Los beneficios del cerdo bajo en grasa diseñado genéticamente por científicos chinos

Por Tim Carman

Guardar
(Gretchen Dimling / The Washington Post)
(Gretchen Dimling / The Washington Post)

Los medios de comunicación de todo el mundo, desde Nueva York a Londres, se han hecho eco de la noticia de que los científicos chinos han diseñado genéticamente un cerdo que puede regular mejor su temperatura corporal mediante la quema de grasa en los meses fríos. ¿El beneficio? El cerdo acaba teniendo una carne más delgada.

El avance genético ha sido anunciado como una especie de victoria para los agricultores y los consumidores: los primeros podrían reducir los costos para criar a sus cerdos, y los segundos podrían obtener la solución perfecta para comer cerdo con una menor cantidad de calorías derivadas de la grasa. Todo esto, por supuesto, supone que un cerdo genéticamente modificado de China podría aprobarse para el consumo humano en los Estados Unidos, una hazaña nada fácil teniendo en cuenta que la Administración de Alimentos y Medicamentos tardó casi dos décadas en dar luz verde al salmón del Atlántico modificado genéticamente.

El salmón de crecimiento rápido sigue siendo el único animal diseñado genéticamente aprobado para el consumo humano en los Estados Unidos, aunque la FDA sí aprobó un medicamento producido en cabras genéticamente modificadas para secretar el compuesto en su leche, tal y como señala Gregory Jaffe, director de proyectos de biotecnología del Centro de Ciencia en el Interés Público.

Independientemente de los obstáculos normativos que se presenten, los pequeños criadores de cerdos se muestran desconfiados sobre quién se beneficiaría más de estos cerdos chinos, cuyo ADN ha sido alterado para incluir un gen que ayuda a regular la temperatura corporal del animal. Los agricultores dijeron que estos cerdos servirían principalmente a empresas multinacionales, como Smithfield Foods, el mayor productor de cerdos del mundo, que sacrifica millones de animales anualmente. Esa compañía, de propiedad china, produce cerdos criados para ser más delgados que los criados en pasturas. Estos animales, específicamente los lechones, requieren graneros con lámparas de calor y superficies con calefacción con tal de mantener vivos a los recién nacidos durante sus primeros días.

(Gretchen Dimling / The Washington Post)
(Gretchen Dimling / The Washington Post)

Los costos de calefacción no son insignificantes en las grandes operaciones de cerdos, en las que 5.000 animales pueden estar confinados bajo el techo de un granero. Pero igual de importante es la tasa de mortalidad de los lechones, que puede oscilar entre el 10 y el 20 por ciento de los recién nacidos, algunos causados por las condiciones de un granero frío, tal y como explica Todd See, jefe del departamento de ciencia animal de la Universidad Estatal de Carolina del Norte. Un cerdo con la capacidad de regular mejor su temperatura corporal podría reducir las tasas de mortalidad.

(Gretchen Dimling / The Washington Post)
(Gretchen Dimling / The Washington Post)

Los cerdos son de los pocos mamíferos sin un gen que regula la temperatura corporal, razón por la cual estos animales se esconden bajo el heno durante los meses de invierno. Para alterar el ADN del animal, los investigadores de la Academia de Ciencias de China, en Beijing, utilizaron una herramienta de laboratorio, conocida como CRISPR, para editar un gen de ratón en células de cerdo, que luego utilizaron para crear más de 2.500 embriones. Los embriones se insertaron en 13 cerdos hembra, sustitutos que finalmente dieron a luz a 12 lechos macho.

Los investigadores observaron que los 12 cerdos pudieron regular mejor la temperatura corporal, mientras que también disminuyeron sus niveles de grasa "sin alterar la actividad física o las demandas diarias de energía", de acuerdo con un informe publicado en las actas de la Academia Nacional de Ciencias. "Este estudio destaca el potencial del uso de biotecnología en la cría de cerdos para mejorar la resistencia al frío y la producción de carne magra de cerdo", apostilló.

Los pequeños granjeros de cerdos suspiran cuando escuchan el argumento de que el cerdo delgado sabe tan bien como los que tienen más grasa. Para ellos, es simplemente la última exageración de una industria porcina que, durante décadas, ha estado obsesionada con la producción de carne más delgada para luego persuadir a los estadounidenses para que compren más carne de cerdo con campañas de mercadotecnia.

Guardar

Últimas Noticias

Jair Bolsonaro minimizó las acusaciones de golpismo en su contra: “Son livianas y manipuladas”

El ex presidente brasileño sostuvo que “por mi parte, nunca hubo discusión sobre un golpe”, aunque aclaró que exploró “todas las medidas posibles dentro de la Constitución” sin ofrecer detalles adicionales
Jair Bolsonaro minimizó las acusaciones de golpismo en su contra: “Son livianas y manipuladas”

Con una emotiva carta, Nuria Diosdado se despidió oficialmente de la natación artística

Con 34 años, Nuria Diosdado cierra su etapa competitiva tras su última participación en los Juegos Olímpicos de París 2024
Con una emotiva carta, Nuria Diosdado se despidió oficialmente de la natación artística

Entre los objetivos de Gobierno, reducir la inflación es prioritario a levantar el cepo cambiario

La eliminación del Impuesto PAIS a importadores condena a la baja a dólares financieros y apunta a reducir el índice de precios
Entre los objetivos de Gobierno, reducir la inflación es prioritario a levantar el cepo cambiario

Sufre distrofia muscular y deben operarla de la columna: la niña de 10 años que necesita un ascensor para ingresar a su casa

La cirugía, por una doble escoliosis, busca mejorar su calidad de vida futura al evitar que tenga problemas clínicos por la torsión de las vértebras. Al ser degenerativa, la enfermedad no se detendrá. Vive en un primer piso y su papá debe colocar un montasilla para que la niña entre y salga de su hogar. Cómo ayudarla
Sufre distrofia muscular y deben operarla de la columna: la niña de 10 años que necesita un ascensor para ingresar a su casa

Jimena Frontera en “Y sí, soy mamá”: “No quería ser la madrastra mala”

La especialista en disciplina positiva y crianza respetuosa conforma una familia ensamblada con su pareja, con su hijo y con sus dos hijastros. El relato íntimo de cómo fue el proceso para integrarse a una dinámica familiar que le era ajena y la relación entre su maternidad y sus viejos traumas: “Yo pude tomar la decisión de ser madre gracias a que ya había sanado la relación con mi cuerpo”
Jimena Frontera en “Y sí, soy mamá”: “No quería ser la madrastra mala”
MÁS NOTICIAS