Nada relaja a un cuerpo enfermo como los videojuegos de terror

Por Danielle Riendeau; traducido por Elvira Rosales

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Alien: imagen cortesía de Sega
Alien: imagen cortesía de Sega

Esta clase de videojuegos simplemente se sienten mejor cuando tú estás mal.

He estado enferma toda la semana y tuve la espantosa experiencia de sufrir mi primera migraña. Estoy un poco mejor hoy, pero no lo suficientemente bien como para asistir a las conferencias PAX, por desgracia. Sin embargo, traté de aprovechar al máximo el día y me puse a jugar muchos juegos, incluyendo los que he querido jugar desde hace tiempo, como Paratopic: un maravilloso jueguito de terror indie.

Voy a ser sincera: amo los juegos de terror en cualquier momento, pero los amo especialmente cuando me siento mal.

No estoy diciendo que no me hubiera gustado tanto Paratopic si me sintiera normal, pero hay un algo acerca de estar un poco febril y adolorida que vuelve al horror aún más dulce. Es el único género que según yo siempre es emocionalmente honesto: el mundo es un lugar aterrador. Toda existencia humana, sin importar cuán buena sea, está marcada por el dolor, el sufrimiento y la ansiedad. Así es como funcionan nuestros cerebros. Nos preocupamos porque esa preocupación solía mantenernos vivos cuando había un gran riesgo de ser comidos cada vez que salíamos de la cueva, etc.

A todos, creo, nos asusta la muerte. Es la base de por qué tenemos una necesidad psicológica de tener narrativas; una manera de ordenar el caos en nuestros cerebros animales y conectar con otros a través de las generaciones. Si las historias perduran, nosotros también.

Sigue leyendo, te explico.

Cuando me enfermo —o deprimo— hay una parte de mí que quiere que todo a mi alrededor reconozca el lado desagradable y aterrador de la vida. No quiero pretender que las cosas están bien. Quiero jugar o ver o leer sobre cosas que me aterran, porque hallo un extraño consuelo en adentrarme a ese tipo de contenido. Sólo tiene sentido a nivel muy básico y visceral.

Algunos juegos son horribles para jugar cuando estás enfermo (y sí, tal vez eso aplique para algunos juegos de terror también), y existen ciertos tipos de enfermedades que no se mezclan con ninguna clase de juego. Soy afortunada por gozar de buena salud durante casi toda mi vida, así que estoy consciente de que mi perspectiva puede ser parcial; y no quiero entrometerme con las decisiones de nadie. Pero no puedo jugar algo con demasiado movimiento 3D si me siento un poco mal, o pronto estaré derribando las paredes de mi departamento, rogando que pare el malestar.

Hoy, planeo jugar mucho el Walking Simulator a Month de Connor Sherlock, un proyecto donde hace un simulador de caminata nuevo cada mes. Su estilo es atormentado y fascinante; y, especialmente después de Paratopic, me siento con el ánimo de explorar lugares extraños e imposibles. Lo más probable es que no juegue nada de horror durante el fin de semana también, quizá juegue algo como A Way Out con mi novia. Incluso, tal vez comience a jugar Far Cry 5, con mis expectativas muy atenuadas.

¿Qué hay ti, querido lector? ¿Hay algún género o estilo de juego que disfrutes en especial cuando no te sientes bien?

Publicado originalmente en VICE.com

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