La Asamblea Nacional opositora de Venezuela designó este jueves a tres legisladoras en el exilio para dirigirla y nombrar la comisión que se encargará de proteger los activos del país en el extranjero como el refinador estadounidense Citgo.
La semana pasada, la mayoría opositora en una votación acordó no extender el gobierno y presidencia interina de Juan Guaidó, quien desde 2019 había sido la cara pública de la oposición.
Guaidó disfrutaba del respaldo de Estados Unidos y otros gobiernos que rechazaron la reelección del dictador Nicolás Maduro en 2018 por considerarla fraudulenta. Washington dijo esa semana que continúa reconociendo a la Asamblea del 2015 y seguirá coordinándose con Guaidó.
Este parlamento fue elegido en 2015, pero su mandato constitucional de cinco años ha sido extendido por los opositores considerando que es la única institución aún democrática en el país miembro de la OPEP.
La directiva de la Asamblea Nacional opositora queda encabezada por Dinorah Figuera en la presidencia y Marianela Fernández y Auristela Vásquez como vicepresidentas. Las tres están radicadas fuera del país desde el inicio del ahora extinto gobierno interino ante lo que la oposición ha dicho fue el acoso de las fuerzas oficiales.
“Tengo la convicción que este parlamento, junto con todos los partidos políticos (...) va a levantar las banderas de la unidad”, dijo Figuera en la sesión virtual y en la que tomó juramento luego que uno de sus colegas propusiera los nombres de las tres legisladoras. “El hecho de representar unas mujeres nos hace sensibles, comprometidas (...) me siento orgullosa de representar al parlamento”, agregó la diputada radicada en Valencia, España.
Figuera, una médico de 61 años, es miembro de Primero Justicia, mientras Fernández milita en Un Nuevo Tiempo y Vásquez en Acción Democrática, los tres partidos que impulsaron el fin del gobierno y la presidencia interina.
Las tres diputadas asumen las riendas de una comisión delegada que se encargará, entre otras funciones, la de designar una comisión de cinco miembros para protección de los activos.
El fracaso de la estrategia del interinato para sacar a Maduro del poder fue la razón citada por la mayoría de los opositores para el cambio, indicando que se requiere construir una nueva unidad opositora de una cara unas futuras elecciones presidenciales.
Los opositores dicen que pese a la eliminación del gobierno interino, el control de los activos externos no está en riesgo, aunque Guaidó y algunos abogados constitucionalistas han dicho lo contrario.
El activo más importante de Venezuela en el exterior es el refinador Citgo, filial de la estatal PDVSA, que desde 2019 tiene una licencia de Estados Unidos que lo protege de posibles embargos de acreedores. Esa licencia vence este mes y los tres partidos opositores esperan que la protección de Washington se mantenga.
Venezuela enfrenta deudas superiores a los 60.000 millones de dólares.
Con los cambios en el parlamento opositor, Citgo, que en 2022 puede obtener ganancias por los 2.500 millones de dólares, podría enfrentar modificaciones en su directorio, que llevarían a una revisión de sus planes de inversión.
(Con información de EFE)
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