Un ex alcalde venezolano que fue aliado del fallecido Hugo Chávez y al que su predecesor Nicolás Maduro busca para que sea enjuiciado, se entregó discretamente a las autoridades de Miami en relación con un importante caso de corrupción que involucra proyectos de crudo con socios extranjeros.
Jhonnathan Marín era alcalde de la ciudad portuaria de Guanta en 2017 cuando renunció abruptamente y huyó del país en medio de una gran depuración en la petrolera estatal PDVSA. Posteriormente, el régimen de Maduro ordenó su detención por cargos de corrupción y le prohibió postularse a cargos públicos.
Se creía que estaba viviendo en México, pero apareció en Miami el 25 de abril, donde se entregó a las autoridades y fue liberado el mismo día tras depositar una fianza de 100.000 dólares, según documentos judiciales.
De acuerdo con una denuncia penal, la cual no se había dado a conocer, Marín ayudó a pagar sobornos en nombre de un cómplice no identificado al que se le adjudicaron decenas de millones de dólares en proyectos conjuntos de PDVSA con Chevron, la francesa Total y compañías de Rusia y China.
Dentro del plan, Marín supuestamente ayudó a transferir más de 1,2 millones de dólares entre 2015 y 2018 de una cuenta bancaria en Miami a una en Panamá para beneficiar a dos funcionarios venezolanos no identificados.
Fue acusado de un solo cargo de asociación delictuosa para cometer un delito contra Estados Unidos, un cargo menor que conlleva una sentencia máxima de 5 años de cárcel.
No hay indicios en la denuncia de que algún socio extranjero de PDVSA haya participado o siquiera estuviera al tanto del plan de sobornos.
Marín, de 43 años, se adhirió en una etapa temprana al Movimiento V República de Chávez y en 2008 fue elegido alcalde de Guanta, una ciudad a las puertas de la Faja Petrolífera del Orinoco. Esa región petrolera alberga las mayores reservas del mundo y aproximadamente la mitad de la producción actual de Venezuela.
Marín es representado por Michael Nadler, un ex fiscal federal de Miami que ganó reconocimiento por combatir la corrupción en el círculo íntimo de Maduro. Nadler declinó hacer comentarios, pero en el pasado Marín ha rechazado las acusaciones interpuestas por aliados de Maduro, diciendo que se trata de una venganza política basada en evidencia falsificada.
“No tenemos nada que ocultar”, declaró en un video publicado en redes sociales en 2019. “Todo lo contrario, tenemos muchas cosas por decir y esto nos abre una ventana hacia el futuro. Nos dará la gran oportunidad de decir muchas cosas”, subrayó.
(Con información de AP)
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