El dictador venezolano, Nicolás Maduro, confirmó este lunes por la noche una reunión mantenida con funcionarios de la Casa Blanca y anunció que ha decidido “reactivar con mucha fuerza el proceso de diálogo nacional” con “todos los factores políticos” del país. “Hemos decidido en esta reunión reactivar con mucha fuerza el proceso de diálogo nacional con todos los factores políticos, sociales económicos, religiosos y culturales del país”, afirmó tras sostener un encuentro con sus vicepresidentes, el canciller y el Estado Mayor en el Palacio de Miraflores, sede del Ejecutivo.
Maduro ordenó suspender las negociaciones, que se llevaban a cabo en México, en represalia a la extradición a Estados Unidos por Cabo Verde de Alex Saab, un cercano colaborador acusado de lavado de dinero y señalado de ser testaferro del chavista.
“El diálogo de México recibió un golpe tremendo como saben ustedes, pero si estamos pidiendo diálogo para el mundo tenemos que dar el ejemplo en el país y vamos a un reformateo del proceso de diálogo nacional”, indicó Maduro en una alocución transmitida en la televisión estatal.
Acerca de la negociación con la oposición que tenía México como sede, comentó que “recibió un golpe tremendo”, pero apostilló que están “pidiendo diálogo”.
El régimen venezolano y la oposición acordaron la mesa de negociación en México en agosto de 2021, pero está suspendida desde octubre, tras la extradición a Estados Unidos del empresario colombiano Álex Saab, supuesto testaferro de Maduro.
Precisamente, tras la reunión en Miraflores, a la que también acudieron el presidente de la Asamblea Nacional chavista (AN, Parlamento) y jefe del equipo negociador del régimen en México, Jorge Rodríguez, así como el número dos del chavismo, Diosdado Cabello, Maduro confirmó que el sábado sostuvo otro encuentro con una delegación estadounidense de alto nivel. “Tuvimos una reunión, la puedo calificar de respetuosa, cordial, muy diplomática, entre la delegación de Estados Unidos y la delegación del gobierno venezolano que presido”, confirmó.
“Hemos acordado trabajar en una agenda amplia, temas de interés. Me pareció importante poder cara a cara conversar temas de máximo interés de Venezuela y del mundo. Ratifico toda la voluntad para avanzar en una agenda que permita el bienestar”, subrayó.
“Ratifico, como le dije a la delegación, toda la voluntad para, desde la diplomacia, el respeto y la máxima esperanza de un mundo mejor, poder avanzar en una agenda que permita el bienestar y la paz de los pueblos de nuestro hemisferio, de nuestra región”, dijo.
Acerca del futuro del diálogo en Venezuela, Maduro sostuvo que se producirá un “reformateo” para que sea “más inclusivo, más abarcador, más amplio e inclusivo”, aunque, de nuevo, no aclaró las implicaciones que tiene esa decisión.
El objetivo, siempre según el dictador, es que este diálogo “le tienda la mano a todos los venezolanos que quieren echar adelante” a Venezuela.
También que “se den todas las garantías políticas para procesos venideros en los años marcados”.
“Vamos a un reformateo inmediato y dinamización del proceso de diálogo político nacional, así lo anuncio, para el encuentro de todos los sectores, por la paz de Venezuela, por la recuperación de Venezuela, por la pluralidad y diversidad política de Venezuela”, concluyó.
(Con información de EFE)
SEGUIR LEYENDO: