El chavismo vive una semana complicada, quizá una de las más duras desde que Nicolás Maduro está en el poder. A la ratificación de la extradición de Alex Saab por parte del Tribunal Constitucional de Cabo Verde, se suma la detención en España del ex general Hugo ‘Pollo’ Carvajal. Tanto el colombiano como el venezolano tendrán que enfrentarse a la justicia de Estados Unidos, lo que declaren puede salpicar a altos miembros del poder y poner en aprietos a la dictadura caribeña.
En estos momentos reina el nerviosismo en la cúpula chavista, Saab, quien es el testaferro de Nicolás Maduro, es el arquitecto de una red de corrupción y crimen que saqueó millones de dólares de Venezuela. Además, el colombiano mantenía conexiones diplomáticas con países como Turquía, Irán y Rusia, con quienes además realizaba negocios. Por su parte, Carvajal, antiguo jefe de inteligencia de Hugo Chávez, conoce por dentro el chavismo y sus conexiones con el crimen y el narcotráfico.
Hugo Carvajal, que tenía en vigor una orden de detención e ingreso en prisión para la ejecución de la extradición a EEUU, se encontraba en un domicilio protegido por varias personas. En esa vivienda, según las fuentes, estaba refugiado sin salir en ningún momento al exterior.
Se trata de la segunda vez que Carvajal es detenido en España. En abril de 2019 fue arrestado también en Madrid tras entrar en nuestro país con pasaporte falso, pero la Audiencia Nacional denegó su extradición al entender que EEUU lo reclamaba por “una motivación política”, por lo que fue puesto en libertad.
Carvajal fue jefe de la Dirección de Contrainteligencia Militar de Venezuela durante ocho años, en los gobiernos de Hugo Chávez y de Nicolás Maduro, y Estados Unidos le acusa de narcotráfico, blanqueo de capitales y colaboración con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para introducir drogas en territorio estadounidense.
Carvajal habría mantenido una conducta continuada y organizada vinculada al tráfico de drogas durante 20 años, así como a la venta de armas a la guerrilla colombiana de las FARC a cambio de drogas y de protección armada a los cargamentos de cocaína, indican los argumentos que basan el apoyo a la extradición a EEUU que hoy divulgó la Audiencia Nacional.
La detención de Carvajal llegó horas después de que el Tribunal Constitucional de Cabo Verde consideró constitucional la extradición de Álex Saab.
El diputado opositor venezolano Carlos Paparoni, quien desde la Comisión de Contraloría de la Asamblea Nacional impulsó todas las denuncias contra Saab, aseguró que los diálogos en México no frenarán el proceso contra el empresario colombiano y denunció que tienen identificados a otros 27 grandes testaferros.
“Vemos la presencia financiera que tuvo Alex Saab: de cada 10 dólares que manejó Nicolás Maduro a partir del año 2018, ocho pasaban por las manos de Alex Saab”, enfatizó el político en diálogo con el periodista Sergio Novelli.
Y siguió: “Estamos hablando de alguien que era el encargado de las relaciones con Irán, que tenía toda la estructura de relaciones con Rusia, que se encargaba de la monetización del oro con Turquía”.
“Tenía tanto poder porque era alguien que estaba más dispuesto a correr el límite. Y también gracias a la relación que pudo establecer con Maduro se convirtió en esa especie de superministro en términos financieros”, detalló.
Consultado sobre cuándo será extraditado, Paparoni dijo que “es muy complicado dar una fecha exacta en estos temas” pero que “podrían ser 15 días”.
También se refirió a las negociaciones entre el régimen y la oposición en México, dijo que “son dos cosas totalmente diferentes” y subrayó que “la justicia no se puede detener por lo que está pasando en México”.
Por último, señaló que tienen identificados a “otros 27 grandes testaferros que tienen una condición especial: han tenido un rol importante dentro de las estructuras de crimen y delito que sostuvieron a Nicolás Maduro”.
Alex Saab -de ascendencia libanesa y nacido en la ciudad de Barranquilla, Colombia- está relacionado con varias empresas. Pero su principal vínculo con Maduro se daría a través de Group Grand Limited (GGL), señalada de vender al régimen alimentos a precios subsidiados para distribuir en barrios humildes.
Sin embargo, tanto Saab como Maduro han sido acusados en distintas oportunidades de usar el programa, conocido como CLAP, para hacerse de cientos de millones de dólares de manera ilegítima.
De hecho, Saab, junto a tres hijastros de Maduro y otras nueve personas, fue sancionado en julio de 2019 por Estados Unidos por esa precisa maniobra. Por esa razón, todos tienen congelados todos los activos o bienes inmuebles que puedan tener en Estados Unidos.
“Alex Saab se comprometió con los informantes de Maduro a dirigir una red de corrupción a gran escala que utilizaron cruelmente para explotar a la población hambrienta de Venezuela. El Tesoro apunta a los que están detrás de los sofisticados esquemas de corrupción de Maduro, así como a la red global de compañías ficticias que se benefician del programa de distribución de alimentos controlado militarmente por el anterior régimen”, explicó en ese entonces el secretario del Tesoro de EEUU, Steven Mnuchin.
Seguir leyendo: