El canciller chavista, Félix Plasencia, aseguró este miércoles que para el país es importante la consolidación de la “alianza estratégica” de cooperación que mantiene con el régimen Irán en la conexión aérea, el comercio, tecnología y alimentación.
“Caracas y Teherán tienen un futuro inmenso de construcción de trabajo”, aseguró el canciller, según una nota de prensa que informó que Plasencia mantuvo una conversación telefónica con su homólogo de Irán, Hossein Amir Abdollahian.
Venezuela reiteró su compromiso para forjar una “ruta exitosa” de comercio bilateral.
Asimismo, el canciller iraní propuso enviar una delegación a Venezuela con la intención de gestionar “entre ambas partes una hoja de ruta para la cooperación bilateral en los próximos cuatro años, cuyos potenciales acuerdos puedan ser suscritos posteriormente en Irán”.
Plasencia agregó que se puede coordinar una agenda de trabajo común en función de los encuentros multilaterales que tendrán lugar en la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) en Nueva York y la reunión de Ministros de Relaciones Exteriores del Movimiento de Países No Alineados (Mnoal), en Belgrado.
Irán es uno de los principales aliados del régimen de Nicolás Maduro y sus lazos se estrecharon aún más durante 2020, cuando en Venezuela hubo una fuerte escasez de gasolina y el Ejecutivo del país caribeño acudió a la nación persa para comprar combustible.
El pasado 23 de junio, Maduro sostuvo una conversación telefónica con el mandatario electo de Irán, el clérigo ultraconservador y jefe del Poder Judicial, Ebrahim Raisi, en la que afirmó que acordaron estrechar los lazos entre los países.
“Sostuve una conversación telefónica con Seyed Ebrahim Raisi, presidente electo de la República Islámica de Irán. Acordamos fortalecer nuestros lazos de hermandad y cooperación para avanzar en la lucha conjunta frente a las agresiones imperiales en contra de nuestros pueblos”, escribió Maduro en su cuenta de Twitter.
En junio, un avión de carga ligado a la Guardia Revolucionaria de Irán y que pertenece a una empresa que es objeto de sanciones de los Estados Unidos aterrizó en la Base Aérea El Libertador, a medio camino entre las ciudades de Palo Negro y Maracay, en Venezuela.
Se trataba de una aeronave matrícula EP-FAB y es parte del portfolio de la empresa Qeshm Fars Air, una compañía que fue sancionada por los Estados Unidos acusada de participar del envío de armamento a Siria.
La empresa había sido sancionada por EEUU en enero de 2019. En ese momento, el Departamento del Tesoro norteamericano sostuvo que la “entrega de material letal” de la compañía a Siria “permite el apoyo militar de Irán” al presidente sirio Bashar al-Assad, por lo que la empresa entró en una lista negra.
El año pasado, más de una docena de vuelos de la compañía aérea iraní Mahan Air llevaron materiales para ayudar a reparar las refinerías de Venezuela. Irán también ha enviado dos flotillas de buques cisterna con combustible a Venezuela, aliviando la aguda escasez de combustible en el país sudamericano.
(Con información de EFE)
Seguir leyendo: