El Reino Unido condenó el martes el arresto del opositor Freddy Guevara y las intimidaciones contra Juan Guaidó, a quien más de 50 países reconocen como presidente legítimo, por parte del régimen de Nicolás Maduro.
La declaración estuvo a cargo de Dominic Raab, Secretario de Relaciones Exteriores, quien publicó un mensaje en Twitter. “El ilegítimo régimen de Maduro debe liberar al señor Guevara y a todos los presos políticos. Unas elecciones justas y libres son el único camino para terminar la crisis en Venezuela”, agregó, también, el funcionario británico, en relación al proceso electoral que está previsto para el mes de noviembre en el país latinoamericano.
A diferencia de la Unión Europea (UE), el Reino Unido ha mantenido el apoyo al opositor Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela tras las elecciones del 6 de diciembre, incluso pese al afianzamiento en los últimos meses del régimen de Maduro.
El lunes, las fuerzas de seguridad detuvieron a Guevara quien, advertido de lo que iba a suceder, grabó el momento previo.
El opositor viajaba en una camioneta cuando las fuerzas de seguridad del régimen detuvieron el vehículo en el que se transportaba por una avenida de Caracas. Luego se llevaron al político al Helicoide, un icónico edificio de la capital venezolana utilizado por el chavismo como centro de detención.
Tras su detención, el Gobierno de Iván Duque repudió el hecho: “El Ministerio de Relaciones Exteriores, en nombre del Gobierno de Colombia, rechaza la detención arbitraria del dirigente de Voluntad Popular, Freddy Guevara, por parte del régimen de Nicolás Maduro. Exigimos garantías para su vida y su libertad inmediata”.
“Asimismo, el Gobierno rechaza el hostigamiento contra el Presidente interino, Juan Guaidó, y sus más cercanos colaboradores. La comunidad internacional debe exigir que cesen estos actos arbitrarios, y se liberen todos los presos políticos. ¡Nuestra solidaridad con Venezuela!”, detalló la Cancillería colombiana en su cuenta de Twitter.
Guevara fue indultado por decreto presidencial el pasado 31 de agosto y abandonó el 9 de septiembre la Embajada de Chile en Caracas, donde se refugió el 4 de noviembre de 2017 tras ser acusado de instigar las protestas antigubernamentales que se registraron ese mismo año.
“Decidí quedarme en mi país a pesar de todos estos problemas y de la posibilidad de que me volvieran a detener sabiendo de que estamos en un régimen dictatorial”, dijo el político durante la transmisión en vivo, justo cuando se escuchó a un policía tocando el vidrio de la camioneta para que se bajara.
Y antes de que se cortara la transmisión, agregó: “A todos ustedes les digo que voy a seguir adelante, que por más de que el régimen reprima, sigo creyendo que la ruta es lograr un acuerdo de salvación nacional, y eso podrá ser contradictorio con lo que uno piensa que debe reaccionarse en este tipo de momentos”.
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