La oposición venezolana pidió a la ONU y a Michelle Bachelet que presionen a Nicolás Maduro para que permita el ingreso de vacunas contra el COVID-19

A mediados de marzo pasado, la dictadura chavista anunció que no permitirá el ingreso de la fórmula de AstraZeneca

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Nicolás Maduro (EFE/Prensa Miraflores/Archivo)
Nicolás Maduro (EFE/Prensa Miraflores/Archivo)

La oposición de Venezuela que se agrupa bajo la figura del líder Juan Guaidó pidió este viernes a la Organización de Naciones Unidas (ONU) que le exija al dictador del país caribeño, Nicolás Maduro, abrir “las puertas para que entren las vacunas” contra el COVID-19 a esta nación sudamericana.

A través de sendas cartas enviadas al secretario general de la organización y a la alta comisionada para los derechos humanos, António Guterres y Michelle Bachelet, respectivamente, los opositores instaron a la ONU a emitir “un pronunciamiento contra el régimen venezolano por violar, una vez más, los derechos humanos, el acceso a la salud y a la vacunación”.

Acudimos ante esta instancia en virtud de que el régimen venezolano prohíbe la entrada de la vacuna AstraZeneca al país”, prosiguió la oposición en la misiva.

A mediados de marzo pasado, el Ejecutivo de Maduro anunció que no permitirá el ingreso de la fórmula de AstraZeneca por considerar que las complicaciones serán mayores que los beneficios derivados por el uso de esta vacuna.

El veto del régimen venezolano a la vacuna de AstraZeneca fue reiterado después de que la Organización Mundial de la Salud adelantara que las dosis previstas para Venezuela a través del mecanismo Covax eran de este laboratorio.

Un paquete de vacunas de AstraZeneca/Oxford bajo el programa COVAX (REUTERS/Francis Kokoroko/Archivo)
Un paquete de vacunas de AstraZeneca/Oxford bajo el programa COVAX (REUTERS/Francis Kokoroko/Archivo)

Yo no soy experto en la materia, pero sí puedo decir que hay países que la están aceptando”, dijo a EFE el ex diputado Williams Dávila, uno de los firmantes de la carta que la oposición remitió a a ONU.

“Además, la de AstraZeneca no es la única vacuna que está en el pool de Covax y nosotros no estamos en ninguna campaña para descalificar a ninguna vacuna, lo que exigimos es que ingrese la vacuna”, agregó.

En Venezuela, una nación que atraviesa por la peor crisis de su historia moderna, al menos 171.373 personas se han contagiado de COVID-19, de las cuales 1.720 han muerto.

Según los datos oficiales, menos del 2 % de la población ha sido inmunizada contra el COVID-19 en la nación petrolera.

El ministro para la Salud, Carlos Alvarado, ha dicho que al país han ingresado más de 800.000 dosis de las fórmulas rusa Sputnik V y china Sinopharm, y que con estas se han vacunado a unos 200.000 trabajadores sanitarios así como a 50.000 voluntarios de un plan gubernamental que busca contagiados casa por casa.

El régimen anunció que Venezuela producirá la vacuna cubana Abdala

El régimen de Venezuela confirmó que la vacuna cubana anticovid Abadala, que se encuentra en período de prueba, se producirá en un laboratorio estatal en Caracas y con cuya fórmula espera conseguir la inmunización masiva de la población.

La vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, dijo en unas declaraciones a través la televisión pública VTV que expertos cubanos visitaron la planta de la Empresa Socialista para la Producción de Medicamentos Biológicos (Espromed Bio), donde verificaron las condiciones para la producción de la vacuna Abdala.

Rodríguez no informó cuándo espera Venezuela comenzar la producción de la vacuna cubana o cuántas dosis por mes espera desarrollar.

Pero el ministro de Salud, Carlos Alvarado, apuntó que la planta, que gestiona el Ejecutivo, debe sufrir algunos ajustes antes de comenzar la fabricación de vacunas.

Trabajadores procesan las vacunas cubanas contra el COVID-19 en La Habana (EFE/ Ernesto Mastrascusa/Archivo)
Trabajadores procesan las vacunas cubanas contra el COVID-19 en La Habana (EFE/ Ernesto Mastrascusa/Archivo)

Son algunas acciones que tenemos que tomar de inmediato para (...) lo antes posible comenzar la fabricación de vacunas en Venezuela”, explicó.

A finales de marzo pasado, el dictador venezolano, Nicolás Maduro, dijo que su país participará de la tercera fase de pruebas de los candidatos vacunales cubanos Soberana 02 y Abdala, dos antídotos con los que espera adelantar la inmunización masiva en el país sudamericano.

Pero la Academia Nacional de Medicina de Venezuela (ANM) ha alertado de que las fórmulas Soberana 02 y Abdala “no son vacunas” todavía, sino “productos experimentales que apenas han comenzado a evaluarse”.

“Venezuela sufre una grave epidemia del COVID-19 y, en vez de participar en pruebas de productos experimentales con características desconocidas, debe priorizar la traída al país de vacunas de reconocida seguridad y eficacia”, dijo la ANM en un comunicado de marzo pasado.

En ese texto, los académicos expresaron su preocupación por la efectividad que pudieran tener estos fármacos, ya que “no se conocen los resultados de la fase 1 y 2” de los ensayos, y por tanto no se sabe “si los productos son capaces de inducir en humanos un nivel y calidad de anticuerpos que pueda conferir protección contra el virus”.

(Con información de EFE)

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