El embajador ruso en Venezuela, Sergei Melik-Bagdasarov, publicó este lunes un video en ocasión del día de la mujer que se diferenció de la mayoría. Parado en la cima de un terreno elevado y con Caracas de fondo, el diplomático emitió un breve mensaje mientras sostenía un ramo de flores.
“Esto para las queridas, nuestras preciosas. Abrazos enviamos. Tan lindas, hermosas. Amor deseamos. Las felicitamos, nuestras queridas señoras y señoritas”, dijo, priorizando adjetivos físicos, en contraste con las consignas de igualdad y equidad que definen a la jornada.
De hecho, según la ONU, este día “se refiere a las mujeres corrientes como artífice de la historia y hunde sus raíces en la lucha plurisecular de la mujer por participar en la sociedad en pie de igualdad con el hombre”.
Sus semillas se plantaron en 1908, cuando 15.000 mujeres marcharon por la ciudad de Nueva York exigiendo jornadas laborales más cortas, mejores salarios y el derecho al voto. Fue el Partido Socialista de América quien declaró el primer Día Nacional de la Mujer, un año después.
La idea de hacer que el día fuera internacional surgió de una mujer llamada Clara Zetkin. Ella sugirió la idea en 1910 en una Conferencia Internacional de Mujeres Trabajadoras en Copenhague, Dinamarca. Las 100 mujeres que estuvieron allí, provenientes de 17 países, estuvieron de acuerdo con su sugerencia por unanimidad y la primera celebración del día tuvo lugar en Austria, Dinamarca, Alemania y Suiza.
El centenario se celebró en 2011, por lo que este año, técnicamente, estamos conmemorando el 110º Día Internacional de la Mujer, una fecha que resume la lucha obrera que durante décadas llevaron adelante miles de trabajadoras en todo el mundo que proclamaron el reconocimiento de sus derechos.
Melik-Bagdasarov culminó su mensaje arrojando el ramo de flores hacia la cámara. El diplomático asumió su rol a finales de febrero de 2020, poco antes de que empezara la panedmia, y es uno de los representantes extranjeros mayor relevancia en el país caribeño, considerando el rol de Rusia dentro de la política exterior del régimen de Nicolás Maduro. Es uno de sus principales aliados y uno de los pocos todavía dispuesto a tener relaciones comerciales con el régimen.
Y Es, de hecho, actualmente una de sus dos fuentes de vacunas contra el COVID-19 junto con China. El país euroasiático envió el 13 de febrero 100.000 dosis de su inoculante, y el régimen comenzó a aplicarlas cinco días después. El dictador Nicolás Maduro recibió una dosis de la vacuna rusa el sábado 6 de marzo junto a su esposa, Cilia Flores.
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