La inflación acumulada en 2020 en Venezuela fue de 2.959,8 %, informó este viernes el Banco Central de Venezuela (BCV), contradiciendo el dato de una oficina de análisis económico que responde al líder opositor Juan Guaidó que ubicó el dato en 3.713 %.
El BCV además publicó el indicador de la inflación mensual de enero de este año y la ubicó en 46,6 %, un dato también opuesto al brindado por la oposición que la había ubicado en 55,2 %.
La institución venezolana no publica regularmente estos datos, y no informaba sobre ellos desde septiembre pasado cuando acumulaba 844,1 %.
Ante la irregularidad de las publicaciones de datos del Banco Central, que pasó incluso años sin informar sobre los indicadores, la oposición venezolana creó un informe mensual, cuando dominó el Parlamento entre 2015 y 2020, para ofrecer los índices.
Tras las elecciones legislativas del pasado diciembre en la que no participó la mayoría antichavista, la oposición decidió crear el Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF) con el que continúa informando sobre la situación económica del país.
El pasado martes, el fundador del observatorio, el ex diputado Ángel Alvarado, explicó a través de Twitter que Venezuela ya acumula 38 meses en hiperinflación “y va rumbo a convertirse en la más larga de la historia, pasando a Nicaragua”.
El salario mínimo en Venezuela, el que percibe la mayoría de la población, es de 1,2 millones de bolívares (0,69 dólares según la tasa de cambio), lo que ha empujado a muchos venezolanos a trabajos informales, pagados en divisas, para completar sus ingresos y poder comprar los alimentos de esa canasta básica.
En Venezuela comenzó un proceso de hiperinflación en noviembre de 2017.
El dato de la oposición
Venezuela cerró 2020 con una inflación de 3.713 % impulsada por el “financiamiento monetario” del Banco Central al régimen de Nicolás Maduro, dijo una oficina de análisis económico que responde a Juan Guaidó.
De acuerdo al informe del Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF), la inflación de diciembre pasado fue del 21,2 % aupada por una expansión de la liquidez monetaria del 33 %.
“Sin embargo, en términos anualizados, la base monetaria se incrementó en 1.134 %, muy inferior al aumento de los precios de 3.713 %”, agregó el OVF en su informe.
Este fenómeno, que señaló es “típico de las hiperinflaciones”, llevó a “una caída de la liquidez real” en Venezuela, donde cada vez se necesitan más bolívares para comprar los mismos productos.
Asimismo, el OVF precisó que la tasa de depreciación del bolívar durante el pasado diciembre fue del 5 %, “lo que implicó un desacoplamiento entre depreciación del bolívar y la inflación” que se tradujo “en un encarecimiento del costo de la vida expresado en dólares”.
Con estos datos, el OVF asegura que “Venezuela sigue en hiperinflación”, un escenario en el que entró a finales de 2017 y que ha pulverizado el poder de compra de los ciudadanos que no tienen acceso a las llamadas monedas duras, como el dólar o el euro.
De hecho, el informe del OVF apunta que el salario mínimo alcanzó “su mínimo histórico” en el país durante 2020 y apenas cubrió “el 0,88% de la canasta alimentaria”, una realidad que condenó a millones de ciudadanos a la miseria.
En sus perspectivas económicas para este año, el OVF señaló que la inflación continuará en aumento a menos que el BCV corte la financiación monetaria al régimen de Maduro.
Además, la oficina estimó que “parece inevitable” que prosiga la dolarización de facto que atraviesa el país, y que Maduro defendió como una “válvula de escape” para la economía.
“Sin embargo, los salarios de la administración pública y las pensiones no serán dolarizados, no hay cómo pagarlos debido a lo limitado del flujo de caja en divisas. Además pagar los salarios en bolívares es lo más fácil: basta que el BCV emita dinero”, aseveró el OVF en su informe.
(Con información de EFE)
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