Alcaldes y sus equipos de 6 países de Latinoamérica ya forman parte de la Escuela de Alcaldes, un proyecto que surgió en Venezuela en el año 2018, de la mano de el dirigente opositor Carlos Ocariz, quien lideró durante 9 años el complejo municipio Sucre.
Venezuela, durante los últimos años, ha acaparado las primeras planas de periódicos del mundo, por las violaciones de derechos humanos del régimen chavista, inmensa crisis social y humanitaria, híperinflación, fraudes electorales y persecución política. Tras unas elecciones en el año 2017, catalogadas como un fraude por la oposición y la comunidad internacional, surgió en Ocariz la idea de iniciar este proyecto de formación de dirigentes locales y llevar su experiencia más allá de las fronteras de su país. “Al principio sonaba como algo utópico, pero hoy nuestra escuela es una realidad”, aseguró el exalcalde.
Ocariz, político venezolano, quien fue premiado como el cuarto mejor Alcalde del mundo por su gestión en el municipio Sucre, en Caracas, que cuenta con más de un millón de habitantes y es el de mayor densidad poblacional del continente, con inmensas favelas de estratos muy pobres y también una importante cifra de clase media. El reconocimiento fue otorgado por la organización europea “The City Mayor Foundation” en enero de 2015.
Los participantes de esta escuela reciben formación que combina la teoría y la complicada práctica de la cotidianidad en la gestión pública. Se preparan en materia de gobernabilidad, comunicación política, presupuesto participativo y reconocimiento ciudadano.
Representantes de Alcaldías de Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia y México, asisten a sus clases de forma presencial y virtual, para convertir sus gobiernos en gestiones basadas en resultados, desarrollando proyectos urbanos y fortaleciendo el poder ciudadano, como herramienta para alejarse del populismo.
Apoyar la libertad de información y fortalecer valores democráticos como la participación, el pluralismo, la inclusión, la libertad y la solidaridad, son las principales bases que rigen esta escuela, que busca, además, robustecer los procesos políticos democráticos y otorgarle verdadero valor a la organización de la sociedad civil, como pieza fundamental de toda Democracia, pero, sobre todo, ofrecer resultados concretos, visibles y con participación de todos los actores de la sociedad.
La Escuela de Alcaldes, que ya ha llegado a municipios como el Metropolitano de Lima, Villa El Salvador y El Agustino en Perú; la Municipalidad de Conkal, Nopaltepec, Coahuila de Zaragoza y Tampico en México; Tarija y La Paz en Bolivia, entre otros.