Autoridades del régimen de Nicolás Maduro en Venezuela desmantelaron este viernes dos sedes del canal de televisión independiente VPITV y clausuraron una sede del diario Panorama, al mismo tiempo que el portal de noticias Tal Cual fue hackeado y la cadena oficialista Globovisión acusó a los medios Efecto Cocuyo, Caraota Digital y El Pitazo de ser “financiados para derrocar al gobierno”.
Tal sucesión de hechos este viernes por la tarde provocó fuertes reacciones de dirigentes políticos que condenaron las maniobras del chavismo para silenciar las voces disidentes en Venezuela.
La embajada británica en Caracas publicó un comunicado donde señaló que “el Reino Unido está comprometido con la libertad de expresión en Venezuela y el mundo”. El texto con fecha 8 de enero de 2021 declara que “la libertad de expresión y los medios de comunicación libres son necesarios para la democracia” y que “el Reino Unido seguirá apoyando a la sociedad civil venezolana en la promoción de los valores democráticos y los derechos humanos”.
“La dictadura de Maduro, vía Conatel y Seniat, arremete contra VPITV, uno de los pocos medios libres que resiste en Venezuela. Les roban equipos para transmisión y trabajo. Nuestra solidaridad con todo el personal de VPI que no ha dejado de reseñar cruda realidad de nuestro pueblo”, escribió en Twitter Carlos Vecchio, el embajador de Venezuela en EEUU designado por el presidente interino Juan Guaidó.
La Asamblea Nacional de Venezuela liderada por Guaidó también repudió los acontecimientos al replicar declaraciones del Comisionado para los Derechos Humanos y Atención a las Víctimas, Humberto Prado, y del Comisionado Presidencial para las Relaciones Exteriores, Julio Borges.
Prado señaló que la irrupción de 13 funcionarios de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) y del Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (Seniat) en las instalaciones de VPITV corresponde a una violación a la libertad de expresión e información y afirmó que el caso fue puesto en conocimiento del Relator Especial para la Libertad de Expresión de la CIDH, el Mecanismo Especial de Seguimiento para Venezuela (MESEVE) y a la Oficina de la Alta Comisionada de los DDHH Michelle Bachelet.
Borges, por su parte, alertó a la comunidad internacional sobre los ataques recibidos por los medios independientes en el país y expresó que la dictadura continúa su esfuerzo por ocultar la grave crisis humanitaria y la violación de DDHH que comete contra la ciudadanía.
El presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, escribió en su cuenta de Twitter: “Procedimientos disfrazados de legalidad contra la prensa libre. Así el régimen de Maduro ha quebrantado sistemáticamente la libertad de expresión. Cerrar medios y robarse sus equipos es parte de la guerra no declarada de la dictadura contra los ciudadanos. #InformarNoEsDelito”.
Y el diputado Freddy Guevara, que estuvo casi tres años refugiado en la embajada de Chile en Caracas tras ser acusado de instigar las protestas antigubernamentales de 2017, calificó estos incidentes como “un nuevo atropello contra la libertad de prensa y los medios de comunicación en Venezuela”.
“No dejaron nada”
Agentes de las entidades estatales Conatel y Seniat confiscaron computadoras y otros equipos del canal de televisión digital VPITV en un procedimiento que se llevó a cabo sin una orden judicial, según denunció el propio medio en un comunicado.
“Funcionarios del Gobierno de Maduro están incautando equipos de transmisión, cámaras, computadoras, entre otros implementos (materiales) de trabajo, fundamentales para ejercer la labor periodística”, reveló VPITV en un escrito cuando los agentes aún seguían en sus dos sedes en el este de Caracas. “Sin presentar orden por escrito, están inspeccionando las instalaciones, interrogando al personal, solicitando documentos e información operativa y administrativa. Incluso solicitaron claves de los procesos de transmisión y además revisaron correos electrónicos relacionados a la operación de VPITV”, detallaron las autoridades del canal.
Un trabajador de VPITV explicó a la agencia EFE que el procedimiento comenzó cerca del mediodía (16:00 GMT) y cinco horas después continuaba. “Se llevaron todo lo del estudio y las demás áreas. No dejaron nada”, dijo la fuente que pidió el anonimato por temor a represalias.
En el comunicado, el canal consideró que estas acciones representan “un evidente hecho de censura que impide la continuidad” de sus operaciones y “el ejercicio de la libertad de prensa” en Venezuela. “Este es un nuevo episodio en la campaña de hostigamiento y censura contra la prensa independiente de Venezuela por parte del régimen de Nicolás Maduro”, señalaron en el comunicado, en el que añadieron que los funcionarios “han impedido que se pueda transmitir en vivo” el procedimiento.
Seguir leyendo: