La oposición venezolana denunció en las últimas horas que 16 niños del país caribeño -entre ellos un bebé de 4 meses de edad- que habían llegado a Trinidad y Tobago fueron rechazados y deportados en botes precarios por las autoridades, que además los separaron de sus padres. El grupo está desaparecido en altamar.
Según la periodista venezolana Beatriz Adrián, la ex líder adjunta del Movimiento Nacional del Pueblo, el partido gobernante del país, dijo que la deportación tuvo lugar en la zona de Peñeros “y en medio de una tormenta”. Agregó que “muchos (niños) fueron deportados sin sus padres y las embarcaciones podrían haberse quedado sin combustible en altamar”.
La deportación generó fuertes críticas por parte de la oposición venezolana. El representante del Gobierno interino de Juan Guaidó ante la OEA para la crisis de migrantes y refugiados, David Smolansky, calificó de atrocidad la decisión de las autoridades y remarcó que “un juez de la Corte Suprema ordenó a la Fuerza de Defensa de Trinidad y Tobago que devuelva a la isla a los niños”.
“Desde ayer desconocemos el paradero de estos 16 niños. No tienen mucho alimento ni combustible en los peñeros”, agregó. El funcionario explicó que “la deportación tuvo lugar al mediodía del domingo, cuando el grupo salió en bote desde Cedros, en Trinidad”.
Las autoridades del país, además, ignoraron un recurso de habeas corpus introducido por la defensa de los menores. Según recordó Smolansky, Trinidad y Tobago “ratificó la Convención Americana sobre Derechos Humanos y la Convención sobre Refugiados de 1951”, dos instrumentos que “protegen a migrantes y refugiados contra la devolución”.
“Muchos trinitarios emigraron a Venezuela por décadas en busca de trabajo y estudio para superar la pobreza que padecían en su isla. Se les recibió con los brazos abiertos. No hay el mismo trato para los 40.000 refugiados venezolanos que han huido a esa isla por la dictadura”, concluyó.
En paralelo, el canciller del Gobierno interino, Julio Borges, pidió a la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y a la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) que intercedan ante las autoridades de Trinidad y Tobago.
“Instamos a Acnur y la OIM a interceder ante esta situación. Es un hecho cruel, que no refleja un espíritu de hermandad que tuvimos los venezolanos con todos los que llegaron a nuestra tierra en el siglo pasado”, escribió en Twitter. Distintos miembros de la Asamblea Nacional se hicieron eco de las denuncias y demandaron la aparición con vida del grupo.
Las autoridades de Puerto España, debido a la pandemia de COVID-19, han endurecido los controles de entrada al país, donde, como en otros territorios de la región, el número de contagiados por coronavirus ha aumentado en los últimos meses y semanas.
MÁS SOBRE ESTE TEMA: