Para el vicealmirante de la reserva activa Jesús Enrique Briceño García, el informe de 443 páginas de la Misión Independiente de Determinación de los Hechos, ordenado por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, en la resolución 42/25, del 27 de septiembre de 2019, es una pieza clave para denunciar lo que ocurre en el país, porque en él “se identifican violadores de adolescentes que luchaban junto a sus padres y que fueron sometidos a las peores vejaciones, incluso abusos sexuales. A violadores de DDHH de cientos de jóvenes que, por marchar, le disparaban a mansalva hasta en el rostro”.
Briceño García, quien fue comandante de la Armada venezolana, también es licenciado en Ciencias Navales, con varios postgrados, especializaciones y doctorado, dice que “la desorientación de algunos integrantes de la oposición democrática, producto de la guerra de cuarta generación que mantiene el régimen usurpador contra una ciudadanía indefensa, más las nocivas tácticas de guerra psicológica que activan sus colaboracionistas, no permiten identificar claramente el verdadero enemigo de la vida ciudadana”.
A su juicio, en momentos en los que, dice: "Más se requiere la verdadera unión, se produce una total dispersión de los esfuerzos necesarios, para terminar con esta pesadilla de 21 años de regresión histórica y perversión de nuestra Venezuela”.
Dice que hay una realidad contundente, entre las fortalezas, “como es el proceso de identificación por parte de la Misión Internacional Independiente de Determinación de los Hechos de las Naciones Unidas sobre la República Bolivariana de Venezuela, sobre la contundente identificación de los crímenes de lesa humanidad que se han cometido desde 2014 y quienes han sido los dirigentes del régimen permisivos o que lo han ordenado, junto con 45 operadores de la represión”.
En relación con el informe enfatiza el vicealmirante Briceño García que “este documento tan importante pareciera, según algunos medios y adeptos al castrocomunismo, ser una notica del jet set, cuando en realidad se trata de un paso más hacia la libertad, al tratar de apoyar afectados, representantes legales y comunidad aliada, a la lucha en el plano internacional, de lo que no se puede conseguir en Venezuela, que es justicia”.
Es política de Estado
Comparte el criterio de que debe haber justica “sobre hechos vergonzosos cometidos por venezolanos contra venezolanos, violatorios de la naturaleza humana, violatorios de las mínimas consideraciones hacia el respeto y la dignidad hacia nuestros congéneres, una lúgubre imagen de la perversión social a la cual nos han llevado gente sin valores, ni miramientos ante el dolor físico y moral de los afectados, incluso, hasta hacerlos perder sus vidas”.
“Un informe que identifica patrones de violaciones y crímenes altamente coordinados de conformidad con las políticas del Estado y parte de una conducta generalizada como sistemática, constituyendo así crímenes de lesa humanidad”. Cataloga de lamentables las respuestas del pueblo venezolano “ante este horror que demuestran el desapego en sus convicciones hacia un sentido básico en las comunidades, como es el de pertenencia”.
“No se avizora que se identifique claramente el enemigo de nuestro país, porque los criminales se apoyan en quienes golpean sin clemencia lo poco que se ha logrado con dirigentes y activistas de esa oposición democrática, gestora de batallas y única contención efectiva de cientos de ataques en contra la Republica, el pueblo, su territorio y sus intereses nacionales”.
“Son tarifados y grupos motores de los fake news, quienes desvían la opinión publica contra los defensores de la Libertad, en lugar resaltar el camino que puede lograr este proceso, en la Corte Internacional de Justicia. Son gente común, que lanzan sus globos de ensayo para captar actitudes contrarias a la Oposición y no tomar en cuenta las fortalezas que nos colocan muy cerca de la libertad”.
Menciona como esas fortalezas “destacar que somos un pueblo con ganas de vivir en democracia y progreso y que solo nos separa, un régimen que usurpa el poder abiertamente, con el apoyo de algunos integrantes de la Fuerza Armada. Guerreros del teclado que, sin contemplación, siguen los efectos nocivos de los influencers para disminuir conductas del liderazgo que necesitamos para alcanzar pasos contundentes para el logro del cese de la usurpación”.
Que participe el pueblo
Dice el vicealmirante: “Ahora más que nunca, en estos 21 años de oprobio, es cuando necesitamos la participación de todo el pueblo, en las calles manifestándonos en rechazo a que sigan usurpando el poder los violadores de Derechos Humanos, a los cercenadores de vidas cuyo único delito ha sido, desear la libertad, a los torturadores de miles de dirigentes civiles y militares, a aquellos que generan informes tergiversados para confundir como delincuentes a decentes ciudadanos y a quienes asesinan a ciudadanos desarmados, por resistirse a la autoridad”.
“Es el momento de ser creativos, y entre nuestras fortalezas, ser apoyados por 60 países por intermedio de un Gobierno interino, activarnos para convertir en hechos sus decisiones y apoyar sus ejecutorias en el marco de la legalidad y eficiencia”.
“Hagamos realidad el rechazo al fraude abierto a una elección el 6D, que es ilegal e ilegítima y que con todo lo que ha pasado con un CNE politizado y expertos en cambiar cifras, poco se habla en las redes y poco interés atrae a la mafia del teclado que apoya el régimen. Resaltemos las fortalezas de nuestros héroes, quienes pululan en otros países en búsqueda de condiciones de vida mejor que la que tiene nuestra tierra de gracia”.
En cuanto a los detenidos dice que “aún respiran en las mazmorras de la tiranía más de 268 civiles y 126 militares, que no se doblegan ante la tortura humillante y mantienen en alto los esfuerzos que hicieron en cientos de intentos de consolidar la unión de quienes aún conservan en sus espíritus, el carácter institucional que los distingue y que deben ser referencia para el resto, quienes, ante la perversión, se ha agrupado en mafias para seguir destruyendo Venezuela”.
Califica que “muchos no solo no cumplen la Constitución, sino que prefieren ser pasivos ante la ruptura de la civilidad, la transgresión de valores, leyes y reglamentos que claramente indican la naturaleza del profesional y especialmente al militar, como lo exige la Ley Orgánica”.
Destaca así: "No puede ser militar el cobarde, el que carezca de dignidad, pundonor, ni el de relajada conducta, pues mal puede ser guardián de la libertad, honra e independencia de su patria, quien tenga miedo al sacrificio y ultraje sus armas con infames vicios. Amigos todos, convirtámonos en portadores de las fortalezas que tenemos en la oposición democrática, difundamos a los cuatro vientos cuanta debilidad acompañe este régimen y contribuyamos activamente al cese de la usurpación, brindando nuestros esfuerzos para alcanzar la libertad y evitar que se sigan violando los DDHH en la patria de Bolívar”, finaliza diciendo el vicealmirante Briceño García.
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