El gobierno de Estados Unidos sancionó este viernes a tres diputados de la Asamblea Nacional venezolana que, bajo las órdenes del dictador Nicolás Maduro, intentaron tomar el control del órgano legislativo del país caribeño en enero.
En concreto, se trata de Luis Parra, Conrado Pérez Lineares y Adolfo Superlano. “Todos aquellos que acepten sobornos y alimenten la corrupción deben rendir cuentas”, indicó la embajada de Estados Unidos en el país caribeño a la hora de realizar el anuncio.
Las sanciones habían sido anticipadas por el embajador James Story. En un encuentro virtual con periodistas que tuvo lugar el jueves y que recogió El Nacional, Story se refirió a los hechos del 5 de enero en la Asamblea Nacional, cuando se debía celebrar la votación para elegir a la nueva cúpula parlamentaria, en la que se esperaba que fuera ratificado Guaidó.
Las fuerzas de seguridad impidieron la entrada a Guaidó y más de 100 diputados afines, pero sí permitió la de Parra y los diputados que acabaron votándolo como nuevo jefe del Congreso. De forma paralela, en una sesión celebrada en la redacción de El Nacional, Guaidó era ratificado en el cargo por esos 100 diputados.
“Diputado Luis Parra, espero que esté bien pero, como usted sabe, no es presidente de la Asamblea Nacional”, dijo Story. “Todos recordamos que (...) usaron ‘colectivos’ con armas para bloquear la entrada a la Asamblea Nacional” y “no hay registro de quórum ni de quiénes votaron por él”, esgrimió.
El diplomático norteamericano reveló que Estados Unidos está haciendo su propia investigación sobre los hechos “porque los que socavan la democracia son sancionables”. “Ya tenemos (preparadas) sanciones contra Luis y algunos de su grupo. Vamos a sancionar y vamos a bloquear la visa de todos los miembros de ese circo de Luis Parra”, reveló.
La elección de Parra ha cobrado actualidad a raíz de una reciente resolución del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) en la que lo respalda como jefe del Parlamento, algo que tanto Guaidó como sus aliados internacionales, incluidos Estados Unidos y la Unión Europea, han rechazado.
La cuestión de quién ocupa la Presidencia de la Asamblea Nacional es de suma importancia en la actual coyuntura en Venezuela, puesto que Guaidó basa su legitimidad como presidente encargado del país en el cargo de titular del Palacio Legislativo. Si perdiera este último, perdería también el primero.
“Solución política”
Además, insistió en que Estados Unidos busca “una solución política, constitucional y, sobre todo, pacífica” para Venezuela. La Casa Blanca ha propuesto que tanto Nicolás Maduro como Guaidó se aparten para dar paso a un gobierno de transición que resuelva las problemas urgentes del país y lo guíe hacia unas elecciones “libres”.
“Yo creo de que dentro del régimen y dentro del chavismo hay personas que reconocen que sus mejores días pueden llegar cuando haya elecciones libres y justas y no podemos hablar de elecciones libres y justas cuando el Gobierno puede elegir a la oposición”, indicó, aludiendo a las inhabilitaciones de partidos y candidatos en las elecciones de 2018.
Estados Unidos dictó ya numerosas sanciones contra Maduro y sus colaboradores por violaciones de los Derechos Humanos, corrupción y hasta narcotráfico. En los últimos meses ha centrado su atención en la industria petrolera, otrora la principal fuente de ingresos de Venezuela.
(Con información de Europa Press)
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