El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, reafirmó este martes el compromiso de su país con la Asamblea Nacional de Venezuela y condenó la decisión reciente del Tribunal Supremo de Justicia venezolano, controlado por el chavismo, de anular la presidencia parlamentaria de Juan Guaidó.
“Estados Unidos reafirma su compromiso con la legítima Asamblea Nacional y los 100 diputados de todos los partidos bajo la presidencia interina de Guaidó, que a diario se enfrentan a amenazas e intimidaciones de parte del régimen de Maduro”, indicó Pompeo en un comunicado.
“Condenamos enfáticamente el más reciente intento del régimen de Maduro de destruir la última institución democrática que existe en Venezuela, la Asamblea Nacional, y deponer al presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó”, añadió.
El jefe de la diplomacia estadounidense se refería de esta manera al fallo del Tribunal Supremo del 26 de mayo, que avaló al disidente opositor Luis Parra como presidente de la Asamblea Nacional, a pesar de que Guaidó fue reelecto por los diputados.
Al respecto, Pompeo acusó a Parra de recibir sobornas para orquestar la captura de la institución. “Es espantoso”, consideró.
“Maduro, sus fuerzas de seguridad y sus lacayos en el ilegítimo Tribunal Supremo han atacado constantemente a la Asamblea Nacional, dictando fallos falsos sobre los parlamentarios y forzándolos al exilio”, explicó el funcionario.
Pompeo mencionó específicamente al jefe de gabinete de Guaidó, Roberto Marrero, y a los diputados Gilber Caro, Tony Geara, Ismael Leon, Renzo Prieto, y Juan Requesens, detenidos ilegalmente. “Demandamos su liberación y la de los CITGO 6”, en referencia a los seis ejecutivos de la empresa petrolera filiala de PDVSA, CITGO, que están encarcelados.
“Los Estados Unidos reiteran su apoyo a una resolución pacífica de la crisis en Venezuela y llama a todas las partes a considerar una Transición Democrática para Venezuela, como camino hacia un país próspero, pacífico y estable”, consideró Pompeo.
“Esto sólo podrá ocurrir con el fin de los ataques del régimen a los funcionarios elegidos democráticamente”, concluyó.
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