Distintas organizaciones sociales, políticas y profesionales (18 en total), en nombre de los casi 200.000 migrantes y refugiados venezolanos que residen en la Argentina, emitieron un comunicado en el que respaldaron a la embajadora de Juan Guaidó, Elisa Trotta Gamus, y le solicitaron al presidente Alberto Fernández que sean renovadas sus cartas credenciales como legítima representante de la Asamblea Nacional, y que siga siendo considerada como interlocutora de los factores democráticos de Venezuela.
“Queremos (...) expresar nuestra profunda preocupación por las medidas tomadas por el Gobierno del Presidente Alberto Fernández sobre la legítima representación que designó el Estado venezolano a través del único órgano electo por el pueblo, la Asamblea Nacional”, comienza el texto.
Y agrega: “Como ha sido reconocido por la comunidad internacional y muy recientemente por la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, el régimen de Nicolás Maduro ha vulnerado todas las instituciones del Estado venezolano, socavando la democracia y siendo responsable de la crisis humanitaria que ha dejado a más de 5 millones de venezolanos en el exilio, dentro de los cuales nos encontramos nosotros que hemos llegado a la República Argentina, en busca de oportunidades y libertades”.
El comunicado enfatiza en que quienes tuvieron que emigrar “forzosamente”, entraron en “una situación de desamparo político e institucional, puesto que los representantes del régimen han estado de espalda a las necesidades de la diáspora”.
Las organizaciones, que agrupan a venezolanos en diversas provincias y localidades como Buenos Aires, Salta, Jujuy, Córdoba, Rosario, Tucumán, Neuquén, Pilar, Bahía Blanca, Mar del Plata, Ushuaia, Cuyo y Bariloche, consideraron fundamental que Trotta pueda seguir cumpliendo con sus funciones para atender y articular a la creciente diáspora y ser su voz ante el Gobierno y la sociedad argentina.
En el texto, recuerdan que “en situaciones de injusticia y opresión, mantenerse neutrales es elegir el lado del opresor”, por lo que confían en que Argentina continuará abogando por el resguardo de los venezolanos que han tenido que migrar forzosamente y por la restauración de la democracia en Venezuela.
Este miércoles, el régimen de Nicolás Maduro, a través de militares y paramilitares, bloqueó la entrada a la Asamblea Nacional venezolana y disparó contra vehículos que trasladaban a diputados opositores para impedir una sesión que iba a ser presidida por Juan Guaidó en el tradicional Palacio Legislativo en Caracas. Los diputados Carlos Berrizbeitia, Carlos Prósperi, Angelo Palmeri y Delsa Solórzano iban en la camioneta atacada.
El presidente interino de Venezuela y jefe del Parlamento había postergado el debate -previsto en un principio para el martes- con el objetivo de no coincidir con la marcha chavista que se realizó y así evitar posibles enfrentamientos. Sin embargo, se vivieron momentos de extrema tensión cuando las fuerzas de choque del régimen rodearon los vehículos de los legisladores y empezaron a dispararles en los alrededores del Parlamento.
Juan Guaidó calificó los actos vividos este miércoles en los alrededores de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) como una “toma” de la sede del Legislativo ejecutada por “paramilitares”, lo que considera que “devela” la “dictadura” de Nicolás Maduro. “(En el gobierno) están usando paramilitarmente grupos civiles armados por la dictadura para atentar violentamente contra el Palacio Federal Legislativo”, dijo a periodistas en el sector El Hatillo, en el este de Caracas.
El comunicado completo firmado por 18 organizaciones venezolanas en Argentina
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