El representante de Exteriores de Juan Guaidó, Julio Borges, informó que revisará con las autoridades peruanas la situación de los migrantes venezolanos en ese país, tras registrarse una serie de ataques xenofóbicos en las últimas semanas.
En una nota de prensa, el Centro de Gobierno que coordina Guaidó, reconocido como presidente interino por más de 50 países, precisó que Borges “sostendrá reuniones con las autoridades peruanas” para “atender la severa situación que viven” los venezolanos en ese país. En los encuentros con el Gobierno de Martín Vizcarra también participará el representante de Guaidó en Perú, Carlos Scull.
Borges, además, se comunicó con el canciller de Perú, Néstor Popolizio, “con la finalidad de abordar los recientes sucesos” que se han registrado en la nación inca.
"Instruí al comisionado Julio Borges a conversar con las autoridades peruanas y al embajador Carlos Scull a establecer una línea de denuncias de ataques por xenofobia", confirmó Guaidó en sus redes sociales, al tiempo que advirtió que "un venezolano es venezolano de pleno derecho esté donde esté y velaremos por ellos".
“No vamos a generalizar. Sabemos que Perú es un pueblo que ha apoyado y respaldado la lucha de Venezuela”, dijo el líder opositor, aunque adelantó que tomará “los correctivos y medidas urgentes para evitar los ataques a ciudadanos venezolanos”.
Este domingo, el régimen de Nicolás Maduro también se refirió a la situación de los venezolanos en Perú y emitió un comunicado en el que manifestó su “más contundente repudio a los actos de xenofobia, agresión y persecución” que han sufrido algunos emigrantes venezolanos.
Mediante un comunicado el gobierno peruano calificó estas acusaciones de “infundadas” y señaló que el único responsable “de la catástrofe humanitaria en Venezuela es el régimen ilegítimo y dictatorial de Nicolás Maduro”.
La nota aseveró también que el gobierno peruano “mantiene permanente contacto con las autoridades legítimas de Venezuela sobre éste y todos los temas relativos a la relación bilateral”.
Perú, junto a Ecuador y Colombia, ha sido uno de los principales receptores de los más de 4 millones de venezolanos que, según Naciones Unidas, han emigrado a consecuencia de la crisis económica y política que vive el país sudamericano.
(Con información de EFE)