Un escándalo por presunta pornografía infantil en una academia conmocionaba este miércoles a Venezuela, después de que tres de sus directivos fueron detenidos.
Douglas Rico, director de la policía científica (Cicpc), informó en la noche del martes que tres de los responsables de la agencia Belankazar, con sede en Caracas, se encontraban en prisión.
Familiares de las presuntas víctimas denunciaron que la agencia era responsable por la "exposición de videos y fotografías de niñas y adolescentes previo cobro en dólares", dijo el martes el fiscal Tarek William Saab, anunciando la apertura de una investigación.
Saab agregó que los directivos de Belankazar presuntamente violaron las disposiciones contenidas en la Ley Orgánica para la Protección del Niño y Adoslescente (Lopna), ley contra Delitos Informáticos, Ley contra la Delincuencia Organizada y Financiamiento del Terrorismo.
El Cicpc "incautó todos los equipos de computación que allí se encontraban, para realizar las experticias informáticas de rigor", escribió Rico en Twitter.
Rico también indicó que el material que se encontraban en las computadoras de la empresa habría sido borrado, pero que había sido recuperado por los expertos en informática adscritos al organismo policial.
De acuerdo con información publicada el miércoles en los medios venezolanos, los compradores del material fotográfico y de videos presuntamente estarían vinculados con páginas de contenido para adultos.
El caso dominaba este miércoles las portadas de los portales digitales del país y causó revuelo en las redes sociales.
"Es un hecho que debe investigarse y debe tomarse seriamente", aseveró a la AFP Fernando Pereira, director de la ONG Cecodap, enfocada en la protección de niños y adolescentes en el país.
Según Pereira, el presunto material pornográfico puede exponer "emocional y sexualmente" a las menores de edad involucradas. "No se sabe qué alcance pueda tener" en la web, explicó.
La agencia, creada en 1989, rechazó las acusaciones en un comunicado: "De ninguna manera estamos realizando material que sexualiza a nuestras modelos, o que alienta a la pedofilia".
En su página web, la empresa dice ofrecer formación en modelaje, representación artística y organización de eventos de moda. Para inscribirse, las niñas deben tener al menos cinco años y los niños, 13.
Tras todas las denuncias de la semana, la academia emitió un nuevo comunicado en el que reiteran que, "nuestro material jamás ha sido orientado con una visión sexual o de aprovechamiento de nuestros modelos".
Con información de AFP
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