El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, anunció este miércoles que los once directivos de Banesco -el mayor banco privado del país- que habían sido detenidos por supuestas operaciones especulativas contra la moneda local, quedaron en libertad condicional.
"En el caso de Banesco se han otorgado en el medio de las investigaciones unas libertades condicionadas, inicialmente se otorgaron a cuatro damas y el día de hoy a siete caballeros", dijo el fiscal en entrevista con la televisora privada Globovisión.
"Ya con ello, sí (quedan todos en libertad), con medidas restrictivas, pero obviamente las investigaciones continúan", acotó.
Los empresarios fueron aprehendidos, según Saab, por ser sospechosos de facilitar o encubrir "ataques" contra el bolívar mediante la salida de papel moneda hacia otros países y la especulación con el precio del dólar en el mercado negro, 14 veces más que la tasa oficial.
"El objetivo final ha sido destruir la moneda", señaló entonces el fiscal.
Además del presidente ejecutivo de Banesco Venezuela, estaban encarcelados un consultor jurídico, cuatro vicepresidentes, un director, dos gerentes y dos oficiales de servicio.
"No son libertades plenas (…). En el sistema de justicia, en el Ministerio Público, nunca hay extremos, tú vas viendo en el transcurso de una investigación; a quien merezca una medida, se le otorga una medida", añadió Saab, aclarando que aún hay investigaciones en marcha sobre el caso de Banesco.
Tras las detenciones, el gobierno de Nicolás Maduro ordenó la intervención del banco, algo que el presidente de Banesco Grupo Financiero Internacional, Juan Carlos Escotet, calificó de "decisión política".
Maduro había justificado la medida, acusando a Banesco de sacar el efectivo de Venezuela hacia otros países y especular con el precio del dólar en el mercado negro.
Escotet viajó a Venezuela el 4 de mayo para "responder a las preguntas de las autoridades" y aseguró que la entidad cumplió con la entrega de información requerida.
Venezuela enfrenta una falta de efectivo que según analistas se debe a la inflación -proyectada por el FMI en 13.800% para 2018- y que dejó rezagadas nuevas denominaciones de billetes lanzadas a fines de 2016.
Un nuevo cono monetario con tres ceros menos empezará a circular en junio.
Con información de AFP
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