"Conversamos con el secretario general (Antonio Guterres) al respecto. Esperamos respuesta ahora de Naciones Unidas", dijo Jorge Arreaza en una rueda de prensa en Ginebra, donde participa en la reunión anual del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, ratificando así la intención del régimen venezolano de contar con observadores internacionales en las elecciones de abril.
La semana pasada, el chavismo aseguró que había enviado una carta sobre el tema. El canciller recordó que la decisión "se tomó en la mesa de diálogo" celebrada en Santo Domingo, en la que finalmente las autoridades venezolanas y la oposición venezolana no llegaron a un acuerdo.
"El gobierno esta cumpliendo con todas las partes del acuerdo", aseguró Arreaza. Hasta ahora, el régimen solo había permitido la presencia de "acompañantes" internacionales, los cuales tienen menor independencia al tener que seguir el recorrido autorizado por el gobierno.
Además, continúan las críticas por la convocatoria anticipada de los comicios, ya que habitualmente se realizan en diciembre, obviando así la mesa de negociaciones que se realizaba en el Caribe.
Canciller @jaarreaza reafirma que el Gobierno Bolivariano, tal como se acordó en el proceso de diálogo en República Dominicana, contará con observadores y acompañamiento internacional para las elecciones del próximo 22 de abril.#JuntosTodoEsPosible pic.twitter.com/nhoXVz55Vx
— Cancillería 🇻🇪 (@CancilleriaVE) February 27, 2018
Por su parte el Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) aprobó el 23 de febrero una resolución en la que pidió a Venezuela aplazar las presidenciales abril y aprobar un nuevo calendario que asegure un proceso electoral "libre, justo, transparente, legítimo y creíble".
Nicolás Maduro ya anunció que aspirará a la reelección y tiene pensando registrar su candidatura este martes, mientras que la coalición de oposición Mesa de la Unidad Democrática (MUD) decidió no concurrir, denunciando las irregulares condiciones del Consejo Electoral.
Venezuela atraviesa una severa crisis económica, con una hiperinflación proyectada en 13.000% para este año por el FMI, y una escasez crónica de alimentos y medicinas.
(Con información de AFP)
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