NUEVA YORK -- Es posible que los neoyorquinos pronto tengan la opción de utilizar sus días de permiso por enfermedad para llevar a sus mascotas al veterinario o estar con ellas durante una operación quirúrgica, si el ayuntamiento aprueba un proyecto de ley presentado el miércoles.
El proyecto de ley, presentado por el concejal Shaun Abreu, demócrata de Manhattan, busca modificar la Ley de Permisos por Enfermedad y Seguridad de tal manera que el permiso por enfermedad con goce de sueldo, que los empleados pueden tomar para sí mismos o para cuidar a miembros de su familia, pueda utilizarse también para los animales domésticos y de servicio.
Abreu explicó que el proyecto de ley pretende ayudar a abordar la crisis de salud mental de la ciudad. "Creo que una de las formas más sencillas de apoyar la salud mental es fomentando que las personas tengan mascotas", dijo Abreu, y añadió: "Mantener a nuestras mascotas sanas nos mantiene sanos".
Se refirió a varios estudios que demuestran que tener un animal de compañía puede reducir el cortisol, una hormona relacionada con el estrés. Además, hizo notar que tener un perro, por ejemplo, puede obligar a las personas a realizar actividad física, lo que a su vez puede tener efectos positivos sobre la depresión y el aislamiento social.
Esta legislación llega en un momento en que aproximadamente dos tercios de los hogares estadounidenses han informado que tienen al menos una mascota, según el grupo del sector American Pet Products Association. Los estadounidenses gastaron 147.000 millones de dólares en sus mascotas en 2023, incluidos costos de atención veterinaria y medicamentos de venta libre, según el grupo.
Pocos lugares tienen leyes como la que Abreu espera aprobar. En Emeryville, California, las personas pueden utilizar su permiso por enfermedad para cuidar a un perro guía, perro señal o perro de servicio que le pertenezca al empleado o a un familiar.
También hay algunas empresas, entre ellas una compañía de marketing de Minneapolis y una empresa de datos de Nueva York, que modificaron voluntariamente sus políticas a fin de incluir permisos con goce de sueldo para los empleados que acaban de llevar a casa un nuevo animal de compañía, prestación que se hizo muy popular durante un auge pandémico de las adopciones de animales.
Pero las opciones que hay para la mayoría de los dueños de mascotas dependen de la sensibilidad de su empleador.
"Si yo le dijera a mi jefe: 'Oye, necesito tomarme el martes libre porque tengo que llevar a Waffles al veterinario', no sabes qué tipo de reacción tendrá", dijo Allie Taylor, presidenta de la organización sin ánimo de lucro Voters for Animal Rights que trabajó con la oficina de Abreu en el proyecto de ley.
Actualmente, la ley de la ciudad les garantiza a los trabajadores de empresas con por lo menos 100 empleados hasta 56 horas de permiso con goce de sueldo al año por enfermedad o lesión propia o de un familiar, mientras que los que trabajan en empresas más pequeñas tienen derecho a un máximo de 40 horas.
La ley modificada incluiría a los animales de servicio de los empleados y los animales de compañía legales (no incluye una lista de especies).
Kathryn Wylde, presidenta de Partnership for New York City, un influyente grupo empresarial, expresó su preocupación por el posible costo que supondría para los empresarios la ampliación de los parámetros del permiso por enfermedad con goce de sueldo.
"Estas prestaciones cuestan dinero, y una cosa es que el empleado esté enfermo y no pueda ir a trabajar, y otra muy distinta que sea una actividad discrecional", subrayó. "Lo que causa preocupación es que, en última instancia, se crea un patrón de aumento en el costo de vida y de hacer negocios en Nueva York porque los costos se les trasladan a los consumidores".
Wylde indicó que "en algún momento tenemos que reconocer los límites de lo que el gobierno puede o debe ordenar", aunque afirmó que tiene muchas mascotas y que le "gustan los animales de compañía".
En contraste, Inimai Chettiar, presidenta del grupo de defensa A Better Balance que ayudó a liderar la campaña para aprobar la ley de permiso por enfermedad de la ciudad de Nueva York, afirmó que su organización estaría encantada de que la ciudad ampliara la ley, como ocurrió en el pasado.
"Desde nuestro punto de vista, tanto la ciudad de Nueva York como el estado de Nueva York han sido desde hace mucho tiempo líderes en materia de permisos por enfermedad con goce de sueldo", aseveró, y añadió que el estado haría bien en reformar también el seguro de incapacidad temporal para los trabajadores que necesiten tiempo libre por sus propios problemas de salud.
Taylor, quien tiene cinco gatos, comentó que el proyecto de ley también podría ser una pequeña manera de hacer que sea más fácil para las personas tener a sus mascotas en sus hogares, lo que podría ayudar a aliviar el hacinamiento en los refugios de animales de la ciudad.
Una de las razones por las que se han visto abrumados los refugios públicos, gestionados por el sistema sin ánimo de lucro Animal Care Centers, es porque el altísimo costo de la atención veterinaria ha disuadido a algunas personas de adoptar mascotas. Un refugio que abrió sus puertas en Queens en julio estaba ya a más del 210 por ciento de su capacidad en agosto.
Abreu --quien tiene dos gatos, Rocky y Nina-- compartió que tenía esperanzas de que el proyecto se convirtiera en ley, pues hay miembros del ayuntamiento que aman a las mascotas y también están decididos a abordar la crisis de salud mental de la ciudad.
El concejal Shaun Abreu, demócrata de Manhattan, en el barrio Harlem de Nueva York el 6 de abril de 2024. Abreu presentó un proyecto de ley que podría darles a los trabajadores la opción de utilizar el permiso por enfermedad para cuidar a sus mascotas. (Lucia Buricelli/The New York Times)