Muerte de Matthew Perry: 5 personas son acusadas de suministrarle ketamina

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Las personas han sido acusadas de conspiración para distribuir el poderoso anestésico que provocó la muerte de la estrella de "Friends". Tres de ellas se declaran culpables.

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El asistente personal de Matthew Perry, dos médicos y varias personas más han sido acusados y señalados con cargos de suministrar la ketamina que causó la muerte de Perry, la estrella de Friends, en octubre, dijeron las autoridades el jueves.

En documentos presentados ante un tribunal federal de California, los fiscales dijeron que el asistente de Perry y un conocido habían trabajado con dos médicos y un traficante de drogas para conseguir miles de dólares en ketamina para el actor, quien había luchado durante mucho tiempo con el abuso de sustancias y la adicción, en las semanas previas a su muerte.

El actor, que alcanzó el estrellato como Chandler Bing en la serie Friends, fue descubierto "flotando boca abajo" en una bañera de hidromasaje en su casa de Los Ángeles el 28 de octubre. La oficina del médico forense del condado de Los Ángeles señaló en un informe de la autopsia publicado en diciembre que Perry había muerto por "efectos agudos de la ketamina".

Una acusación presentada ante un tribunal federal el miércoles detalló los cargos del gran jurado contra Jasveen Sangha, quien, según los fiscales, era conocida como la "Reina de la Ketamina", y Salvador Plasencia, conocido como "Dr. P.". Sangha mantenía un "depósito" en North Hollywood, según el acta de acusación. Plasencia, médico de un centro de urgencias, fue uno de los que se encargó de hacer llegar la ketamina a Perry a pesar de saber que tenía un historial de abuso de drogas, según el acta de acusación.

Los cargos contra ellos incluyen conspiración para distribuir ketamina, distribución de ketamina con resultado de muerte, posesión con intención de distribuir metanfetamina y alteración y falsificación de registros relacionados con una investigación federal.

Según las autoridades, tres personas ya se han declarado culpables en el caso.

El asistente personal de Perry, Kenneth Iwamasa, de 59 años, se declaró culpable de un cargo de conspiración para distribuir ketamina con resultado de muerte. Según las autoridades, Iwamasa admitió haber inyectado ketamina a Perry en repetidas ocasiones, incluidas varias inyecciones el 28 de octubre, el día de su muerte.

Otro médico, Mark Chavez, de 54 años, de San Diego, se declaró culpable de un cargo de conspiración para distribuir ketamina. Chavez admitió haber vendido ketamina a Plasencia, de 42 años, incluida una parte que había desviado de su antigua clínica de ketamina, según las autoridades. Chavez también obtuvo ketamina haciendo declaraciones falsas a un distribuidor mayorista de ketamina y presentando una receta fraudulenta a nombre de un antiguo paciente, según las autoridades.

Erik Fleming, de 54 años, conocido de Perry, se declaró culpable de un cargo de conspiración para distribuir ketamina y otro de distribución de ketamina con resultado de muerte, según las autoridades. Dijeron que admitió haber obtenido la ketamina de Sangha y haber distribuido 50 viales de ketamina a Iwamasa, la mitad de ellos cuatro días antes de la muerte del Sr. Perry.

Los intentos de contactar a los acusados no tuvieron éxito de manera inmediata.

"Estamos enviando un mensaje claro", dijo el jueves Martin Estrada, fiscal de EE. UU. para el Distrito Central de California, en una conferencia de prensa en el centro de Los Ángeles. "Si están en el negocio de la venta de drogas peligrosas, los haremos responsables de las muertes que causen".

Algunos de los implicados utilizaban aplicaciones de mensajería encriptada y lenguaje codificado para hablar de las transacciones de las drogas, incluso refiriéndose a los viales de ketamina como "Dr Pepper", "latas" y "bots", según los documentos judiciales.

El 30 de septiembre, aseguran que Plasencia, quien figura como médico en un centro de atención urgente en Calabasas, California, envió un mensaje de texto a Chavez sobre la compra de ketamina para que pudiera venderla a la "víctima M. P.", quien, según confirmó un agente de la ley, era Matthew Perry. Los fiscales dicen que Plasencia discutió con Chavez cuánto cobrar a Perry en un mensaje de texto, escribiendo: "Me pregunto cuánto pagará este imbécil" y "Vamos a averiguarlo".

La ketamina, un potente anestésico con propiedades psicodélicas, se utiliza cada vez más como terapia alternativa para la depresión, la ansiedad y otros problemas de salud mental. También se utiliza, y se abusa de ella, con fines recreativos.

La policía de Los Ángeles reconoció este año que estaba trabajando con la Administración de Control de Drogas para investigar el origen de la ketamina de Perry y si se había obtenido legalmente.

El informe de la autopsia decía que el actor había estado en terapia de infusión de ketamina, pero determinó que la ketamina en su sistema no podría haber sido de su última sesión de terapia conocida, alrededor de una semana y media antes de morir. La autopsia decía que el nivel de ketamina hallado en la sangre de Perry era equivalente a la cantidad que se utilizaría durante una anestesia general.

En el acta de acusación, Plasencia fue acusado de engañar a los funcionarios sobre el tratamiento de Perry. Los fiscales dijeron que "proporcionó un documento falsificado que supuestamente mostraba el plan de tratamiento médico de la víctima M. P." en el que se afirmaba que se le estaba administrando una dosis máxima de 60 miligramos en 24 horas. Decía que "en realidad, como el acusado Plasencia bien sabía entonces, el acusado Plasencia inyectó a la víctima M. P. dosis de ketamina muy superiores a 60 miligramos".

En las semanas previas a la muerte de Perry, señalaba la acusación, Plasencia vendió a Iwamasa ketamina por valor de miles de dólares e inyectó personalmente la droga a Perry en su domicilio. En una de las visitas, una dosis alta provocó que Perry se "paralizara", dijeron los fiscales, lo que hizo que el médico desaconsejara una inyección de cantidad similar en el futuro. También inyectó ketamina a Perry en un estacionamiento público de Long Beach, California, mientras se encontraba en el interior de un vehículo, según los documentos judiciales.

El 24 de octubre, Fleming, el conocido del actor, compró 25 dosis de ketamina a Sangha y se los entregó a Iwamasa en casa de Perry. Iwamasa le administró al menos seis inyecciones de ketamina. Iwamasa inyectó a Perry más de 20 dosis de ketamina durante los cuatro días siguientes, lo que le causó la muerte el 28 de octubre, dijo la fiscalía.

Sangha se enfrenta a otro cargo federal en relación con las drogas. Fue acusada este año de posesión de metanfetamina con la intención de distribuirla y se ha declarado inocente. Las fuerzas del orden allanaron su domicilio en North Hollywood en marzo y se incautaron 79 envases de ketamina líquida y casi 2000 pastillas de metanfetamina, según los documentos judiciales.

Plasencia describió a Chavez en LinkedIn como su mentor durante 15 años y escribió que Chavez había sido "muy útil para mí mientras navegaba por mi propio camino como empresario médico".

Chavez se ha forjado una marca como lo que él llama "El doctor de la salud", describiéndose a sí mismo en internet como entrenador de longevidad, médico, empresario y pionero del fitness. Tras iniciar su carrera como químico clínico, Chavez se ha dado a conocer recientemente como director médico de una empresa especializada en medicina regenerativa. Su sitio web ofrece un programa de pérdida de peso de 12 semanas por 1500 dólares que incluye el fármaco Ozempic.

Perry tenía un historial de adicción a las drogas y al alcohol, sobre el que escribió en sus memorias.

La oficina del médico forense dijo que el ahogamiento, la enfermedad arterial coronaria y la buprenorfina, que se utiliza para tratar la adicción a las drogas y para el dolor, habían contribuido a su muerte.

Julia Jacobs colaboró con reportería desde Nueva York y Glenn Thrush desde Washington. Kirsten Noyes colaboró con investigación.

Matt Stevens escribe sobre noticias de arte y cultura para el Times. Es periodista desde hace más de una década. Más de Matt Stevens

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