La vida de Kamala Harris en Canadá estuvo marcada por el anhelo por volver a casa ‌

The New York Times: Edición Español

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OTTAWA, Ontario -- En sus actividades de campaña la semana pasada, el senador JD Vance, republicano de Ohio, dijo que la vicepresidenta Kamala Harris era una "impostora" porque "creció en Canadá"; por su parte, el expresidente Donald Trump, el candidato republicano a la presidencia, siguió lanzando acusaciones falsas e incendiarias sobre la presunta identidad racial de la candidata demócrata.‌"Kamala Harris creció en Canadá", señaló Vance durante una parada de la campaña en Arizona el miércoles. "No hablan así en Vancouver ni en Quebec, o en donde sea que haya sido su lugar de origen".‌Sí es cierto que cuando Harris tenía 12 años se mudó a Montreal junto con su hermana, en 1976, cuando su madre, Shyamala Gopalan, aceptó un trabajo de investigación sobre cáncer de mama en el Jewish General Hospital y comenzó a dar clases en la Escuela de Medicina de la Universidad McGill.‌En los siguientes cinco años, Kamala Harris realizó viajes constantes de la ciudad más grande de Quebec a California para visitar a su padre, Donald J. Harris, economista de la Universidad de Stanford, y a una amistad de la familia en días festivos y vacaciones.‌En su autobiografía, Harris describe ese periodo de su vida como una época de añoranza de California (su equipo de campaña se negó a hacer comentarios sobre el tiempo que Harris pasó en Canadá).‌"Me acostumbré a la mayor parte", escribió acerca de su vida en una ciudad predominantemente francófona con inviernos muy crudos y lejos de la mayoría de sus parientes. "A lo que no me acostumbré fue a sentirme nostálgica por mi país. Tenía una sensación constante de nostalgia por estar de regreso en casa".‌Se fue de Canadá después de terminar la preparatoria en Westmount High School, en Montreal, y se inscribió en la Universidad Howard en Washington D. C.‌Wanda Kagan, de quien Harris ha dicho que fue su amiga más cercana en Westmount, comentó que Harris y los demás estudiantes estadounidenses de la escuela conservaron sus vínculos con Estados Unidos.‌"Eran estadounidenses y conservaron su identidad estadounidense", afirmó Kagan, quien vive en Montreal y trabaja en el área de servicios médicos. "No solo por venir aquí te conviertes en francocanadiense o canadiense".‌"Sentían mucho orgullo por ser estadounidenses", añadió.‌Fue una época de grandes cambios sociales, políticos y económicos en Quebec. El año en que Harris llegó con su madre y su hermana, el primer gobierno del partido Parti Québécois asumió las riendas del país con la encomienda de separarse de Canadá y ampliar las leyes de las provincias a fin de que el francés fuera el idioma predominante.‌En respuesta, varias empresas trasladaron muchas de sus operaciones o todas ellas al vecino Ontario. Entre 1971 y 1986, casi 200.000 quebequeses angloparlantes abandonaron esa provincia.‌Sin embargo, casi nada de esa situación se filtró a los pasillos y la cafetería de Westmount, según cuenta Kagan. Explicó que, al igual que en la mayor parte de la zona occidental de la isla de Montreal, la vida ahí estaba desconectada de las áreas de mayoría francófona del este.‌En la preparatoria, el único efecto visible de los extensos cambios políticos fue una nueva legislación que les exigía a los estudiantes tener un dominio mínimo del francés para poder graduarse, recordó Kagan.‌Kagan relató que tanto ella como Harris sobresalieron porque ambas habían tomado clases en una escuela de francés un año antes de transferirse a Westmount, que formaba parte del sistema de escuelas públicas anglófonas.‌Harris escribió en su autobiografía que su madre la envió a una escuela de francés para que aprendiera un segundo idioma, pero que no le fue bien.‌"Solía bromear y decir que me sentía como un pato porque todo el día en nuestra escuela nueva me la pasaba diciendo 'Cua? Cua? Cua?' (la pronunciación en francés de '¿Qué? ¿Qué? ¿Qué?')", escribió Harris.‌No obstante, Kagan mencionó que, gracias al año que pasaron en el sistema francés, tanto ella como Harris se evitaron las dificultades que tuvieron muchos compañeros para pasar el examen de francés recién incluido en los requisitos.‌Kagan compartió que la vida en el colegio para ella y para Harris consistía casi por completo en actividades escolares, entre ellas "participar en el espectáculo de variedades".‌"Estuvimos en el desfile de modas", dijo, "así como en el evento previo a un juego".‌Forjaron una amistad muy estrecha. Cuando Kagan le compartió a Harris que su padrastro abusaba sexualmente de ella, Harris hizo que se mudara al apartamento de su familia en un vecindario de clase media.‌"No solo fue que me recibiera en su casa", afirmó Kagan. "Es ese lado humano que tiene, ese lado de empatía que la hizo ser compasiva y percibir que algo me pasaba".‌Harris dijo en 2020 que la lucha de su amiga influyó en parte en su deseo de convertirse en fiscal.‌Al igual que Harris, cuyo padre es negro y originario de Jamaica y cuya madre es del sur de Asia, Kagan es birracial, de madre blanca y padre negro.‌El par de amigas asistía a una preparatoria en la que alrededor del 60 por ciento de los alumnos eran blancos y el 40 por ciento, negros, además de provenir de distintos barrios con diversos niveles socioeconómicos.‌Kagan dijo que Harris y ella navegaron la división racial en la escuela.‌Hasta que Harris fue seleccionada como pareja de fórmula de Joe Biden en 2020, su carrera política había pasado prácticamente desapercibida en Canadá. Sus años en ese país también habían recibido muy poca atención desde que anunció que se postularía para la presidencia.‌Harris no se ha involucrado muy a fondo en las relaciones entre Estados Unidos y Canadá, aunque en su época de senadora votó en contra de la versión renegociada del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, según dijo, porque le pareció que le faltaban suficientes protecciones ambientales.‌El gobierno del primer ministro Justin Trudeau consideraba que el pacto era vital para la economía de Canadá, por lo que lograr que los tres países lo adoptaran fue su principal prioridad política.‌Antes de mudarse a Canadá cuando era niña, Harris había expresado algunas dudas, pero, a fin de cuentas, pareció encontrar su nicho.‌"Mi mamá intentó pintarlo como una aventura", escribió sobre sus recuerdos del momento en que le habló de mudarse. "Íbamos a ser exploradoras en el invierno del Gran Norte. Pero me costó mucho verlo así".

Fotografías de Wanda Kagan la muestran con Kamala Harris durante su tiempo en la preparatoria, en su casa en Montpellier, Canadá, el 16 de septiembre de 2020. (Nasuna Stuart-Ulin/The New York Times)

La vicepresidenta Kamala Harris, presunta candidata demócrata a la presidencia, habla durante un mitin de campaña en Atlanta el martes 30 de julio de 2024. (Nicole Craine/The New York Times)

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