Arabia Saudita ya inició una agresiva toma del poder en el golf profesional. Ha invertido miles de millones de dólares en el fútbol mundial. Ahora también quiere ser dueño del boxeo profesional.Un ambicioso y costoso plan saudita que remodelaría la economía, la estructura y el futuro del boxeo se encuentra en las etapas finales de aprobación, según dos personas con conocimiento directo del plan.El gigantesco vehículo de riqueza soberana de Arabia Saudita, el Fondo de Inversión Pública (PIF, por su sigla en inglés), financiaría el proyecto. El fondo está realizando negociaciones finales sobre la dispersión de la inversión inicial --que se dice podría llegar a los 2000 millones de dólares-- que requeriría el plan, según las dos personas involucradas en la planificación. Ambas personas declinaron ser identificadas porque el proyecto no cuenta con la aprobación final.El PIF se negó a hacer comentarios.
Bajo la propuesta saudita, alrededor de 200 de los mejores boxeadores masculinos del mundo serían contratados y luego divididos en 12 categorías de peso, en lo que equivaldría a una liga mundial de boxeo.Cada categoría incluiría alrededor de 15 peleadores, lo que permitiría que los mejores talentos se enfrenten regularmente. La medida crearía una entidad única de boxeo que remplazaría el sistema actual en ocasiones caótico y frustrante de promotores rivales y organismos reguladores en conflicto. La nueva entidad tendría los recursos y los peleadores para organizar carteleras de alto perfil en todo el mundo.Y a diferencia de muchos de los deportes que Arabia Saudita ha intentado alterar previamente, el boxeo profesional podría estar listo para una reinvención. El deporte ha perdido su brillo y parte de su atractivo en las últimas décadas y actualmente está dirigido por una red enmarañada de promotores rivales y organismos reguladores dispares que organizan sus propias peleas y otorgan sus propios títulos. Eso deja a los aficionados examinando un sistema confuso que con frecuencia obstaculiza los encuentros entre los mejores boxeadores y que cuenta con múltiples "campeones" en las mismas categorías de peso.La nueva liga operaría bajo una sola marca, un acuerdo similar al modelo de negocio de la enormemente popular Ultimate Fighting Championship (UFC), que ha mermado constantemente la popularidad mundial del boxeo. En la UFC, 15 peleadores están clasificados en ligas por división de peso, y también existe una clasificación para los mejores peleadores "libra por libra". En el evento respaldado por Arabia Saudita, los boxeadores podrían ascender en las tablas de clasificación, pero también ser eliminados de la liga y ser remplazados por nuevos talentos.El proyecto ha estado en discusión durante más de un año y se desarrolló con la ayuda de múltiples firmas de consultoría, entre ellas Boston Consulting Group, que ayudó al PIF en varios proyectos a medida que el circuito LIV Golf, financiado por Arabia Saudita, se consolidaba. Si en las próximas semanas se confirma una decisión de inversión, la liga podría comenzar incluso en el primer semestre del próximo año, según una de las personas involucradas en la planificación.En ese momento, el PIF volvería a proporcionar lo que más necesita el proyecto: dinero.Durante años, el fondo ha sido el vehículo que Arabia Saudita ha utilizado para su ofensiva millonaria sobre la industria del deporte. Sus medidas han inyectado enormes cantidades de capital fresco a clubes, equipos, eventos, federaciones y organizaciones deportivas. Pero también han conmocionado industrias enteras, desde el golf profesional hasta el fútbol y el tenis, y han generado críticas de que Arabia Saudita ha tratado de remodelar las percepciones del reino a través de lo que se ridiculiza con el término "lavado deportivo" o "sportswashing".El mayor punto conflictivo del plan saudita para el boxeo podrían ser los contratos a largo plazo que algunos de los mejores boxeadores ya tienen con promotores de alto perfil, muchos de los cuales a menudo están vinculados por separado a diferentes cadenas de televisión.Para resolver ese problema, se han iniciado discusiones sobre la posibilidad de inversiones totales o parciales del PIF en varias de las mayores empresas de promoción del boxeo, según los planificadores.Dos de los promotores más importantes, Top Rank y Queensbury, se negaron a comentar sobre las conversaciones.También se están discutiendo asociaciones con algunas de las organizaciones tradicionales del boxeo, que controlan los derechos no solo de algunos boxeadores importantes, sino también de la propiedad intelectual de gran valor como videos de archivo, resultados históricos y cinturones de campeonato que alguna vez alzaron miembros de la realeza del boxeo como Muhammad Ali y Mike Tyson.En la nueva liga, habría un requisito para que los boxeadores peleen en una cantidad mínima de eventos por año, una medida diseñada para evitar que algunos de los mejores boxeadores se ausenten por un tiempo prolongado del deporte, algo que suele causar frustración entre los aficionados del boxeo.Si el plan para la liga de boxeo sigue adelante, se ha designado a una entidad del PIF llamada Sela para promover los eventos, que se realizarían no solo en Arabia Saudita sino en todo el mundo. Sela, una empresa de eventos deportivos, ya ha organizado eventos de boxeo en Arabia Saudita, incluida la reciente pelea de unificación de peso pesado entre el británico Tyson Fury y el ucraniano Oleksandr Usyk.En ese combate, Usyk se convirtió en el primer campeón unificado de peso pesado en más de una generación.Sela se negó a comentar sobre el nuevo plan saudita referente al boxeo.Esa pelea fue solo la más reciente de una serie de carteleras de boxeo de alto perfil celebradas en Arabia Saudita en los últimos años, las cuales han convertido al reino, gracias a las carteras más abultadas del deporte, en el principal destino para los combates más importantes.Arabia Saudita y Sela pronto se expandirán aún más: los eventos bajo el título Riyadh Season ahora también se realizarán en el extranjero.El primero será en agosto en Los Ángeles, cuando Terrence Crawford e Israil Madrimov se enfrenten por el título superwélter de la Asociación Mundial de Boxeo y la Organización Mundial de Boxeo. A esto podría seguirle un evento aún mayor en el estadio Wembley de Londres con el excampeón de peso pesado Anthony Joshua.Ese evento ya ha sido discutido por el funcionario saudita que se ha convertido rápidamente en la figura más prominente del boxeo, Turki al Sheikh, presidente de la Autoridad General de Entretenimiento de Arabia Saudita.
Al Sheikh está en el centro de los planes para reestructurar el boxeo, y habló al respecto en una entrevista reciente con ESPN en la que supuestamente afirmó que planeaba "arreglar" un deporte "roto". La entrevista no reveló detalles de la nueva liga saudita.