SAN FRANCISCO -- El año pasado, Mark Zuckerberg decretó que 2023 era un "año de eficiencia" y, pronto, su empresa Meta despidió a una tercera parte de sus empleados. Amazon, Google y Microsoft también llevaron a cabo un recorte de decenas de miles de trabajadores.
El mundo no dejó de girar para las empresas, sino que, incluso, les fue mejor. El precio de sus acciones subieron, algunas divisiones fueron más productivas y estas compañías --entre ellas X, antes conocida como Twitter, la cual ha recortado casi el 80 por ciento de su personal desde fines de 2022-- siguieron trabajando.
Otros directores generales tomaron nota y a un mes de haber comenzado 2024, las empresas de tecnología han entrado a una nueva fase de reducción de costos.
Después de los despidos generalizados del año pasado, en estas últimas semanas, las empresas más grandes (como Amazon, Google y Microsoft) han realizado recortes laborales más pequeños y selectivos mientras se concentran en menos proyectos y dirigen sus recursos a productos imprescindibles como la inteligencia artificial. Algunas empresas emergentes de tecnología --como Flexport, Bolt y Brex-- han realizado recortes más acentuados para evitar su posible extinción. La orden que viene de los directivos es la misma: hacer más con menos.
"Estamos viendo tres segmentos básicos de despidos", señaló Nabeel Hyatt, socio general de la compañía de capital de riesgo Spark Capital, la cual invierte en empresas de tecnología. "Los oligopolios de tecnología enormes que buscan más crecimiento y mayores ganancias, las empresas medianas que realizaron demasiadas contrataciones durante las épocas de bonanza y las pequeñas empresas emergentes que solo tratan de darse un respiro para lograr sobrevivir".
Los nuevos despidos son la rectificación más reciente a todos los años de una economía global en expansión y tasas de interés cercanas a cero, lo cual les brindó a las empresas de tecnología la capacidad de arrojar montones de dinero para atraer a los mejores profesionales durante la pandemia. Durante esa época, muchas de las empresas contrataron a decenas de miles de trabajadores para responder a la demanda digital.
Los últimos años han obligado a los ejecutivos de la tecnología a pensar de manera diferente. Después de que se eliminaron los confinamientos y la gente se atrevió a regresar al mundo, disminuyó el uso de los productos tecnológicos, en comparación con los niveles máximos de la pandemia. De acuerdo con los datos recopilados por Layoffs.fyi, que cataloga los recortes laborales en toda la industria tecnológica, más de 1000 empresas de tecnología eliminaron más de 260.000 empleos en 2023.
Recortar la fuerza laboral en el ámbito de la tecnología habría sido un sacrilegio en Silicon Valley hace apenas unos cuantos años. Desde hace mucho tiempo, la cultura de la tecnología ha sido una cultura en la que la categoría de un gerente se determinaba con base en cuántos subordinados tenía y con qué eficacia una empresa contrarrestaba los intentos de contratación de la competencia. Atraer a la siguiente generación de especialistas en informática era casi como un deporte de contacto para los ejecutivos de las empresas de tecnología.
Pero el estigma de los despidos ya ha desaparecido. Cada vez más ejecutivos de las empresas tecnológicas han reconocido que hicieron demasiadas contrataciones en la pandemia. Las empresas más grandes están realizando recortes estratégicos en áreas en las que planean invertir menos y en las que ya no se necesitan cierto tipo de puestos. Las empresas más pequeñas que con facilidad podían obtener capital hace apenas unos años están llevando a cabo recortes con el fin de mantenerse a flote.
Según Layoffs.fyi, durante los primeros 30 días de este año, hubo 25.000 despidos en más o menos 100 empresas de tecnología. Está previsto que Microsoft, Google, Apple, Meta y Amazon den una idea más clara sobre la situación de la industria cuando publiquen sus estados financieros trimestrales esta semana.
Las oleadas de pérdidas del empleo suelen ocurrir de repente y al mismo tiempo, señaló Sheel Mohnot, un socio de la compañía de capital de riesgo Better Tomorrow Ventures. "Cuando lo hace una empresa de tu entorno o cercano a él, te brinda la protección para hacerlo tú, comentó. "Se vuelve más fácil para una empresa decir: 'No somos nosotros, es la industria'".
Meta, la cual es propietaria de Facebook e Instagram, es un ejemplo de cómo se han dado los despidos.
El año pasado, hizo un recorte de lo que llamaba "gerentes administrando gerentes". De acuerdo con dos personas que conocen los planes de la empresa, este año, la empresa ha sido más selectiva en sus recortes y, concretamente, ha disminuido el número de puestos de "gestores técnicos de proyectos" en Instagram. Un gestor técnico de proyectos (o TPM, por su sigla en inglés) supervisa diferentes proyectos dentro de un departamento y es responsable de mantener los equipos como está previsto, justo el tipo de puesto de un gerente de nivel medio que Zuckerberg estaba decidido a recortar.
Con anterioridad, Business Insider informó sobre la medida de Meta de disminuir esos puestos. Meta no quiso hacer comentarios.
Este mes, Amazon también eliminó cientos de empleos en su rama de emisión continua, por ejemplo en Prime Video, MGM Studios y Twitch. Google realizó miles de recortes en varias áreas, entre ellas YouTube y la división de hardware que fabrica el teléfono Pixel, los relojes Fitbit y el termostato Nest. En un memorando interno que obtuvo The New York Times, Sundar Pichai, director general de Google, dio a entender que los despidos continuos aún no habían acabado y que la empresa eliminaría más "niveles para simplificar su funcionamiento e imprimir velocidad en algunas áreas" del negocio.
"Ya se han anunciado muchos de estos cambios, aunque, para ser franco, durante todo el año, algunos equipos seguirán tomando decisiones de asignación de recursos específicos donde se requiera y es posible que algunos puestos se vean afectados", escribió Pichai.
Pocas personas esperan que pronto disminuya la ola de consolidación. Quienes están ahora en la industria de la tecnología bromean acerca de las empresas ZIRP, que, por su sigla en inglés, se refiere a la política de tasa de interés cero, gracias a la cual, las empresas emergentes no habrían podido obtener capital si no hubiese sido por el acceso al dinero de flujo libre y barato que se invertía en empresas de riesgo.
Muchas de esas empresas emergentes, que ya no pudieron atraer más inversiones de riesgo cuando subieron las tasas de interés, están recortando personal y concentrándose en menos productos.
"Igualmente habrían podido intentar muchas cosas para hallar un modelo de negocios que funcione", señaló Mohnot. "Pero ahora es un momento decisivo".
Este año, Meta ha estado reduciendo la cantidad de puestos de "gestores técnicos de proyectos" en Instagram y Facebook. (Ian C. Bates/The New York Times)