SAN FRANCISCO — El 27 de febrero se publicó en las plataformas de blogs Substack y Blogspot un artículo en el que se afirmaba que Estados Unidos estaba detrás del bombardeo de los gasoductos submarinos Nord Stream en el mar Báltico.
En 24 horas, el artículo —y otras versiones— se habían publicado en más sitios web, como Reddit, Medium, Tumblr, Facebook y YouTube. También empezaron a aparecer traducciones del artículo en griego, alemán, ruso, italiano y turco.
Las publicaciones formaban parte de una campaña de influencia china que destaca como la mayor operación de este tipo hasta la fecha, según un informe publicado el martes por investigadores de Meta. El esfuerzo, que, según la compañía, había comenzado con las autoridades chinas y fue descubierto en 2019, tenía como objetivo promover los intereses de China y desacreditar a sus adversarios, como Estados Unidos, señaló Meta.
En total, 7704 cuentas de Facebook, 954 páginas de Facebook, 15 grupos de Facebook y 15 cuentas de Instagram vinculadas a la campaña china fueron eliminadas por Meta, propietaria de Facebook, Instagram y WhatsApp. Cientos de otras cuentas en TikTok; X, antes conocida como Twitter; LiveJournal; y Blogspot también participaron en la campaña, que los investigadores denominaron Spamouflage, por la frecuente publicación de mensajes similares al spam, según el informe de Meta.
“Se trata del mayor desmantelamiento de una sola red que hayamos realizado”, declaró Ben Nimmo, responsable del equipo de seguridad de Meta que se ocupa de las amenazas globales. “Si lo sumamos a toda la actividad que hemos desmantelado en internet, llegamos a la conclusión de que se trata de la mayor campaña encubierta que conocemos en la actualidad”.
La campaña china tuvo dificultades para llegar a la gente y atraer la atención, aseguró Nimmo. Algunas publicaciones estaban plagadas de errores ortográficos y gramaticales, mientras que otras eran incongruentes, como enlaces aleatorios bajo artículos de Quora que la gente podía ver y notar que no tenían nada que ver con el tema tratado.
Sin embargo, la operación se revela en un momento delicado de las relaciones entre Estados Unidos y China. La secretaria de Comercio, Gina Raimondo, se encuentra en China esta semana para hablar con funcionarios del gobierno y líderes empresariales chinos sobre las relaciones comerciales. Es la cuarta alta funcionaria estadounidense que viaja a China en menos de tres meses.
La operación china de tráfico de influencias es la séptima que Meta retira en los últimos seis años. Cuatro de ellas se descubrieron el año pasado, según la empresa, que publicó los detalles de la nueva operación como parte de un informe trimestral de seguridad.
Según Meta, el objetivo parecía ser “aprender e imitar” las operaciones de influencia rusas. También parecía estar dirigido a un público amplio. En ocasiones, los mensajes se publicaban en chino en sitios web como el foro financiero chino Nanyangmoney. Otras veces, los mensajes estaban en ruso, alemán, francés, coreano, tailandés y galés en sitios como Facebook e Instagram, que están prohibidos en China.
Según Meta, la policía china parecía trabajar en la campaña desde oficinas repartidas por todo el país. Cada oficina al parecer trabajaba por turnos, con actividad a media mañana y a primera hora de la tarde, y pausas para comer y cenar, según el informe.
Las cuentas publicaban con frecuencia mensajes idénticos en distintas plataformas de redes sociales, en un esfuerzo sincronizado para difundir mensajes a favor de China en internet. La red era “amplia y ruidosa”, afirmó Nimmo, pero le costaba llegar a la gente en parte porque “era el mismo comentario muchas veces al día”.
“Era como si los copiaran de una lista numerada y se olvidaran de corregirlos antes de publicarlos”, añadió.
Si bien Meta ha eliminado la campaña de Facebook e Instagram, muchas de las cuentas de la operación en plataformas como X, Reddit y TikTok siguen en línea, según un análisis de The New York Times.
El esfuerzo fue descubierto en 2019 por Nimmo y otros investigadores de Graphika, una empresa que analiza redes sociales. Meta señaló que había eliminado elementos de la operación en los últimos años, pero que la campaña había regresado con nuevas cuentas y tácticas.
En un principio, la operación se concentró en desacreditar las protestas a favor de la democracia de 2019 en Hong Kong. En febrero de 2020, el esfuerzo se trasladó al brote de COVID-19, y se dedicó a desviar las afirmaciones de que China era el origen del virus y a centrar la culpa en Estados Unidos.
En una ocasión, la operación publicó un documento de investigación de 66 páginas en el que se afirmaba de manera falsa que el COVID se había iniciado en Estados Unidos. Apareció en el sitio web Zenodo, un repositorio en línea para que investigadores y académicos suban documentos y conjuntos de datos.
A continuación, videos de YouTube y Vimeo promocionaron el trabajo de investigación, junto con publicaciones en plataformas de blogs como LiveJournal, Tumblr y Medium que sostenían que Estados Unidos había ocultado los verdaderos orígenes de la COVID. Luego, se publicaron enlaces a esas entradas en Facebook y otras redes sociales, aunque muchas de ellas no fueron muy leídas.
En junio de 2020, la red comenzó a publicar videos en inglés en YouTube y TikTok que destacaban las disparidades raciales en Estados Unidos, en un aparente esfuerzo por avivar las divisiones. Algunos de esos videos se hicieron virales.
Meta también incluyó en su informe enlaces a cuentas de TikTok que, según aseguró, habían formado parte de la operación china. Uno de los videos más populares, que vio el Times, mostraba a una mujer argumentando en chino que la vida en Sinkiang, una región del extremo noroeste de China, era pacífica. China ha estado sometida al escrutinio internacional por aplicar políticas represivas contra los uigures y otras minorías étnicas de mayoría musulmana provenientes de la región.
El video de TikTok fue visto más de 7000 veces.
El cartel de Meta en Menlo Park, California, el 16 de febrero de 2022. (Jim Wilson/The New York Times).