SAN FRANCISCO — Hace un año, las posibilidades de la industria tecnológica lucían sombrías. Las ganancias de Google se desplomaron. Las acciones bursátiles de la compañía matriz de Facebook, Meta, estaban en caída libre. El crecimiento del negocio en Amazon se había lentificado a su nivel más bajo en dos décadas.
No obstante, lo que lucía como una catástrofe en toda la industria pareció haber sido más una corrección. El trimestre más reciente fue sorprendentemente sólido para las compañías tecnológicas más grandes. El negocio de anuncios de Meta y Google rebotó. El negocio de computación en la nube de Microsoft continuó su expansión. También lo hizo el negocio de comercio electrónico de Amazon. Apple, con un declive del uno por ciento, fue la única gran empresa tecnológica cuyas ganancias cayeron.
Aun así, el descenso expuso una debilidad: las compañías tecnológicas más grandes del mundo no habían desarrollado una nueva gran idea en años. A pesar de invertir dinero en vehículos autónomos, el metaverso y las computadoras cuánticas, los negocios todavía dependían de la venta de anuncios digitales, teléfonos iPhone y computación en la nube.
Ahora, las compañías tienen la esperanza de que la inteligencia artificial será la respuesta al problema y también será una manera de refrescar líneas de producto en envejecimiento que no han cambiado mucho durante los últimos años. Tienen planes para invertir miles de millones de dólares en tecnología de inteligencia artificial (IA) generativa, con la que operan los chatbots como ChatGPT.
Aunque todavía está lejos de ganar mucho dinero con los nuevos productos de la IA, su rápida recuperación ha dado a las empresas mucho espacio para experimentar.
En una conferencia con inversionistas el jueves, Andy Jassy, el director ejecutivo de Amazon, manifestó que la labor en la IA generativa todavía estaba en sus primeras etapas, pero “pienso que será transformadora y pienso que va a transformar prácticamente todos los tipos de experiencia de cliente que conocemos”. Tim Cook, el director ejecutivo de Apple, hizo comentarios similares el jueves. Además, durante llamadas recientes con analistas, Google, Meta y Microsoft también indicaron que incrementarían las inversiones para apoyar los trabajos con IA.
Para observadores tecnológicos como Stacy Rasgon, un analista de Bernstein que ha cubierto la industria de los chips durante 15 años, el incremento en gasto para apoyar el desarrollo de IA le recuerda las inversiones en servidores a finales de la década de los noventa y de centros de datos en la de 2010. La IA generativa se espera que arroje más de 2 billones de dólares en beneficios económicos, según McKinsey, la consultora cooperativa, al incrementar la productividad en una variedad de negocios.
Los productos de la IA generativa están comenzando a ingresar al mercado. Microsoft planea cobrar 360 dólares al año por Microsoft 365 Copilot, un asistente de inteligencia artificial para Word, Excel y PowerPoint. Sin embargo, la cantidad de ventas nuevas que genere no será clara hasta en algún punto del año próximo, según analistas.
Para el fabricante de chips Nvidia, el auge de la IA ya llegó. En mayo, Nvidia dejó conmocionado a Wall Street al pronosticar que generaría 11.000 millones de dólares en ventas en su segundo trimestre, el cual concluyó el 30 de julio, y excedió las expectativas de los analistas por más de 4000 millones de dólares.
El gran incremento reflejó la demanda creciente de las unidades de procesamiento de gráficos (GPU, por su sigla en inglés), que diseña para impulsar las tecnologías de IA. Nvidia no tiene rivales serios en ese mercado.
Durante un Espacios de Twitter en abril, mientras discutía sus planes para una empresa de IA, Elon Musk expresó: “Parece que todas las personas y su perro están comprando los GPU”.
Se proyecta que el negocio de centros de datos de Nvidia duplicará sus ventas este año, al añadir 15.000 millones de dólares. Se predice que agregará 20.000 millones de dólares en nuevas ventas el año próximo, según Bernstein Research. Además, el precio de la acción de Nvidia se ha triplicado este año, por lo que la compañía es una de un puñado con un valor total que supera el billón de dólares.
Nvidia anticipó el auge de la IA. Durante años, Jensen Huang, el director ejecutivo de la empresa, había hablado sobre cómo el GPU impulsaría tecnologías de IA. Estaba tan convencido de esto que dijo a analistas en 2017 que la compañía “apostaba todo” en un solo diseño de chip.
Huang finalizó: “Todo va a funcionar bien o todo va a funcionar terriblemente”.
El servidor DGX-1 de Nvidia en exhibición en la sede de la compañía en Santa Clara, California, el 29 de agosto de 2017. (Christie Hemm Klok/The New York Times)