Por qué dar positivo en el test de anticuerpos de Covid-19 no es una señal completamente confiable

Por Todd Haugh y Suneal Bedi

Guardar
REUTERS/Craig Lassig.
REUTERS/Craig Lassig.

Ya sea que se piense que Estados Unidos está reabriendo demasiado rápido o demasiado lento, casi todos están de acuerdo en que las pruebas son fundamentales para entrar en la próxima fase del coronavirus. Y en particular, las pruebas de anticuerpos que detectan si una persona ha desarrollado inmunidad al virus parecen ofrecer un camino prometedor hacia adelante.

Pero, ¿qué significa una prueba de anticuerpos positiva? Significa que debe sentirse seguro de que puede trabajar, comprar y socializar sin enfermarse o infectar a otros, ¿no?

Pues precisamente no es conveniente apresurarse a establecer conclusiones.

La confianza que debemos tener en las pruebas de anticuerpos depende de un factor clave que a menudo se ignora: la tasa base del coronavirus. La tasa base es la cantidad real de infecciones en una población determinada. En los Estados Unidos parece estar entre el 5 y el 15 por ciento.

REUTERS/Mike Segar
REUTERS/Mike Segar

Este simple hecho es esencial para comprender la precisión de una prueba de anticuerpos. Sin embargo, pasar por alto este hecho es también uno de los errores más comunes en la toma de decisiones, tanto que tiene su propio nombre: la falacia de la tasa base.

Aquí hay un ejemplo:

Si usted se realizó una prueba de anticuerpos con una precisión del 90 por ciento y determinó que tenía anticuerpos contra el coronavirus, ¿qué tan seguro debería estar de que realmente tiene esos anticuerpos?

La mayoría de las personas dirían que un 90 por ciento. Esto tiene sentido.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump (Archivo)
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump (Archivo)

Pero el valor predictivo de una prueba de anticuerpos con una precisión del 90 por ciento es del 32 por ciento si la tasa base de infección en la población es del 5 por ciento. Dicho de otra manera, hay una probabilidad de casi el 70 por ciento en ese caso de que la prueba indique falsamente que una persona tiene anticuerpos.

La razón de esto es una simple cuestión de estadística. Cuanto menor es la prevalencia de un rasgo en una población estudiada, en este caso por infección de coronavirus, es más probable que una prueba arroje un falso positivo. Si bien una prueba más precisa ayudará, no puede cambiar la realidad estadística cuando la tasa base de infección es muy baja.

La falacia de la tasa base no solo es común, sino que también es casi universal, incluso entre aquellos que deberían ser capaces de tener en cuenta esa característica clave. Los propios médicos cometen estos errores. De hecho, uno de los mejores estudios que demuestran la falacia de la tasa base tuvo como sujetos de estudio a alumnos de la Facultad de Medicina de Harvard.

Entonces, ¿qué significa todo esto en un momento en el que el país comienza abrirse?

Principalmente significa que tenemos que informarnos para salvaguardar nuestra propia salud. Y significa que todos corremos el riesgo de infectarnos y propagar el virus, incluso si hemos tenido una prueba de anticuerpos positiva.

Tenemos que ser cautelosos. El hecho de que una prueba sea muy precisa no significa que sea tan reconfortante como parece.

Eso no es decir que las pruebas de anticuerpos no son importantes. Debemos fomentar un mayor acceso a estas pruebas. Pero también deberíamos verlas con una reflexión serena y sostenida en fundamentos científicos.

MÁS SOBRE ESTE TEMA:

Guardar