Ejercicio rápido: elija cualquier partido de la Selección Argentina en este Mundial y remóntese al momento final, ese lapso donde baja toda la adrenalina con el resultado satisfactorio, aquel score que nos catapulta a la ronda siguiente. Seguramente, más de uno, se haya sentido en cada instancia, como su hubiera corrido una maratón sin moverse del sillón de su casa. Se sabe: los nervios quitan la energía.
Ahora, imaginemos por un momento lo que le pasa a cada uno de los jugadores que están en la cancha, frente a un rival complejo, con semejante desgaste físico y frente a la mirada de cientos de millones de personas sobre sus hombros. Hablamos de un verdadero desgaste, uno superlativo que incluye no solo lo físico, si no también lo mental. Cada uno de ellos está dentro de lo que se conoce como deportistas de elite, un status soñado por muchos pero que requiere una exigencia máxima en un Mundial que ya de por si -parece- es más exigente que otros.
Solo basta, por dar un par de ejemplos, sumar el nerviosismo extra que puede significar el VAR o la exigencia ya común que decanta luego de jugar 10 minutos de tiempo adicional.
Argentina está en la final del Campeonato del Mundo en Qatar. Mañana se medirá frente a Francia para definir quién se queda con la ansiada copa. Para cada uno de los jugadores será el oportunidad de ponerle un broche de oro a una carrera que empezaron -muchos de ellos- cuando eran niños o adolescentes, el instante preciso donde -aunque no lo sepan- se comienza a construir la figura de estas verdaderas máquinas humanas del deporte.
“Todos, comienzan desde chicos, se van preparando para hacer grandes deportistas. Como no pueden trabajar la fuerza, entonces trabajan coordinación y a través del juego, tratan de hacer la mayor cantidad de deportes posibles”, comienza diciendo a Infobae Alexia Keglevich, fundadora de Pax Assistance, una compañía internacional de asistencia al viajero, quien conoce muy bien cómo se prepara y cuida a estos gladiadores del alto rendimiento.
Según la experta los deportistas de elite tienen que responder a cuatro claves: entrenamiento físico, alimentación, descanso y salud mental. Si falta alguno de ellos, no será lo mismo el rendimiento que tendrán dentro del campo de juego.
“En el tema físico, obviamente, el equipo y la mayoría de los equipos, llegaron una semana antes con lo cual el entrenamiento en general viene originalmente de los clubes donde juegan. El deportista ya viene preparado físicamente con rutinas, con lo cual, en el caso de la Argentina, que llegó una semana antes, hay que saber que no se puede entrenar a alguien con tan poco tiempo antes de un evento deportivo como este”, dice Keglevich.
Cuando se junta el equipo, comenta la experta, sí se hace muchísimo hincapié en todo lo que sea psicología de grupo e individual. “Es súper importante la mentalidad o la forma en que el equipo está a nivel psicológico y mental. Es clave”, apunta.
Keglevich, con larguísima experiencia en la materia —entre el 2003 y hasta el 2020 ocupó el cargo de CEO global de la compañía Assist Card—supo acompañar a los campeones del Mundial 86 en México y estuvo presente desde ese momento en los mundiales sucesivos. Sabe y conoce de los cambios que se han sucedido.
A nivel físico se evolucionó muchísimo en el diagnóstico. “Todos los equipos tienen ecógrafo ambulante, lo que hace que rápidamente, una distensión o un desgarro, se identifique de inmediato. Y lo que se trabajó mucho en estos últimos años es la manera más rápida de superar esas lesiones musculares. A lo largo de los años, los físicos de los jugadores ha cambiado muchísimo. Los ves mucho más marcados porque, está comprobado que la recuperación muscular es más rápida cuando el músculo tiene más fuerza. El tema físico de fuerza se ha trabajado muchísimo”, explica Alexia.
Todos los jugadores, especialmente los de nuestra Selección, están acostumbrados a tener dos partidos por semana, porque tienen el campeonato local y tal vez el Campeonato Europeo. Entonces, están acostumbrados a recuperarse en dos, tres o cuatro días.
“Se trabaja muchísimo en la regeneración y la fatiga. Ahora, ¿qué pasa en medio de un Mundial? la fatiga psicológica es enorme por la atención, por la presión, por todo lo que está pasando. La fatiga se da en un 20 o 30 por ciento más que en partidos normales con lo cual, eso fue un factor determinante ahora para para atender no la fatiga física y mental”, dice
Una de las cosas que cambió también a lo largo del tiempo es que antes un equipo de fútbol en medio del mundial estaba concentrado durante un mes y medio, y no podían ver a la familia. Se ha comprobado que ahora, mientras uno no sea tan estricto con esta concentraciones, nuestro equipo tiene días de salida y de encuentro con sus familiares que definitivamente, muestran que los jugadores alcanzan mejor rendimiento. Psicológicamente están más contentos y y felices”, dice la experta.
Con respecto a la recuperación de las lesiones, hay algo muy interesante que últimamente se utiliza mucho. “Es muy difícil que un deportista de élite no tenga su osteópata. La osteopatía ahora es una especialidad clave en un deportista de élite. Otra cosa que se trabaja muchísimo es la elongación, que también permite que, por ejemplo, una distensión se cure en menos tiempo que lo normal”, suma Alexia.
La alimentación es otro de los ejes. Guillermo Vilas, tres horas ante un partido, se comía un bife de chorizo. Y después con la evolución y el conocimiento, se supo que los hidratos de carbono de fácil digestión y que la alimentación es energía pura para el cuerpo humano. “Eso cambió. Ahora entonces el tema de la alimentación también es súper importante. Una dieta balanceada entre proteínas e hidratos de carbono que hacen que la alimentación no solo sea la energía que ponés en el cuerpo, sino además la forma en que podés recuperar ante lesiones”, dice la especialista.
Y otro tema fundamental es el descanso. “Se dice que tienen que tener mínimo 8 horas de descanso, eso también es la manera más rápida o, mejor dicho, la forma de recuperarse. El tema del descanso es absolutamente clave en un deportista de élite”, agrega Alexia.
El mundo del deportista de elite ha cambiado por completo. Hoy hay muchos equipos que tienes psicólogos, coach ontológicos, individuales y grupales. “Es clave la actitud con que se va a la cancha y se entra”, dice Aleixa.
Y cierra: “La parte psicológica como equipo y como persona individual. Esto es obvio pero es parte de un nuevo paradigma que se le está dando mucho más foco ahora que tiempo atrás. La fortaleza mental. La mentalidad con que entrás a la cancha y te manejás ante una adversidad, ante un score adverso. Ahí es donde se ven las diferencias”.
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