En el mundo, cada 11 minutos una mujer o niña muere asesinada por un familiar. Una cifra dramática que integra una larga lista de estadísticas trágicas difundidas por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) que pueden resumirse en un dato contundente: un tercio de las mujeres en el mundo sufre violencia física y/o sexual, mayoritariamente en el seno de una relación íntima.
Como cada año, el Día Internacional para Eliminar la Violencia contra la Mujer marca el comienzo de la Campaña Únete de la ONU, con 16 días de concientización que van del 25 de noviembre al 10 de diciembre (el Día Internacional de los Derechos Humanos).
El movimiento #MeToo, fundado por Tarana Burke en 2006 y que cobró notoriedad global en 2017, provocó una movilización mundial que manifestó la urgente necesidad de prevenir y responder a la violencia contra las mujeres. Otros movimientos en todo el mundo como #NiUnaMenos en Argentina y Latinoamérica, y #BalanceTonPorc, #TimesUp entre muchos otros, también catalizaron el cambio.
ONU Mujeres destaca que los movimientos feministas fuertes y autónomos impulsan la transformación del escenario actual. Pero no es suficiente, ya que las cifras de maltrato psicológico y femicidios no decrecen. Aquí un decálogo del organismo internacional sobre 10 maneras en las que todos (hombres y mujeres) pueden ayudar a terminar con la violencia contra la mujer:
1 - Hablar y visibilizar
Los tabúes en torno a la violencia de género brindan impunidad a los perpetradores e impiden que las mujeres y las niñas obtengan la ayuda que necesitan: menos del 40% de las mujeres que sufren violencia buscan ayuda de cualquier tipo.
La violencia contra las mujeres está generalizada, pero no es inevitable, a menos que permanezcamos en silencio. Frente a los crecientes movimientos antifeministas, es más crucial que nunca que hablemos abiertamente.
2 - Conocer las formas y señales
La violencia contra la mujer puede ser física, sexual o emocional. Puede darse en público o en la intimidad del hogar, en entornos digitales o presenciales, y puede ser cometida por un extraño o una pareja íntima.
Independientemente de cómo, dónde o por qué suceda, tiene graves consecuencias a corto y largo plazo para las mujeres y las niñas y sirve para impedir su participación plena e igualitaria en la sociedad.
Si cree que alguien en su vida podría estar sufriendo abuso, hay señales comunes que puede buscar. Una pareja abusiva puede actuar enojada o tener un temperamento rápido o impredecible, por lo que nunca se sabe qué podría causar un problema. Los victimarios buscan controlar donde y con quién está su víctima todo el tiempo, impiden o desaniman a relacionarse con amigos, familiares o ir al trabajo o a la escuela.
3 - Combatir y denunciar el acoso sexual
Lamentablemente el acoso es una experiencia cotidiana para muchas mujeres, ignorar el comportamiento inapropiado sirve para normalizarlo aún más.
Las formas comunes de acoso como el acoso digital (por chat o en redes), los silbidos, los comentarios sexuales y las bromas sexuales hacen que las mujeres y las niñas se sientan incómodas e inseguras en los espacios públicos. Ayudan a reforzar prejuicios y estereotipos que perpetúan la misoginia. Y contribuyen a una cultura de impunidad, en la que las mujeres pueden sufrir daños sin consecuencias.
4 - Desafiar los modelos de masculinidad tóxica
La evidencia muestra que las mujeres en relaciones con hombres cuyas creencias y comportamientos refuerzan el dominio masculino y la desigualdad de género tienen más probabilidades de experimentar violencia de género, señala la ONU.
Los conceptos machistas tienden a enfatizar rasgos como la agresión, la fuerza y el control, mientras menosprecian la sensibilidad, la empatía, la vulnerabilidad y otros rasgos tradicionalmente asociados con la feminidad.
5 - Respaldar a las organizaciones de mujeres
Los movimientos feministas autónomos son el factor más crucial para impulsar el cambio de políticas sobre la violencia de género. Pero las organizaciones de derechos de las mujeres, impulsoras clave de la movilización feminista, están cada vez más privadas de fondos, marginadas y silenciadas en los espacios de toma de decisiones.
Las Naciones Unidas propone aumentar el financiamiento a largo plazo para las organizaciones de derechos de las mujeres como herramienta fundamental para encontrar soluciones efectivas para prevenir y responder a la violencia contra las mujeres.
6 - Asistencia a las víctimas
Los refugios, las líneas directas, el asesoramiento y todo el apoyo para las sobrevivientes de la violencia de género deben estar disponibles para quienes lo necesiten, incluso durante crisis y emergencias. Los servicios para mujeres y niñas que sufren violencia pueden ser la diferencia entre la vida y la muerte.
Cada año, la campaña 16 Días de Activismo de la ONU hace un llamado a la acción mundial unida para poner fin a todas las formas de violencia contra las mujeres y las niñas.
7 - Conocer los datos
La recopilación de información y cifras relevantes es clave para implementar medidas de prevención exitosas y brindar a las víctimas el apoyo adecuado. Para combatir eficazmente la violencia de género, debemos comprender el problema.
A medida que la violencia de género se ha disparado debido al COVID-19, las crisis económicas, el cambio climático y migraciones, las brechas en la recopilación de datos sensibles al género se han vuelto más evidentes que nunca.
8- Impulsar leyes más estrictas
Naciones Unidas alerta que el mundo necesita mecanismos de protección más sólidos para prevenir y eliminar la violencia, el acoso, las amenazas, la intimidación y la discriminación contra las defensoras de los derechos humanos y las defensoras y activistas de los derechos de las mujeres en todo el planeta. El organismo internacional provee un listado de las leyes vigentes en cada país para ser consultadas en su web.
9 - Apoyar el liderazgo de las mujeres
“Durante el COVID-19, las mujeres estuvieron muy poco representadas en los grupos de trabajo de sobre la salida de la pandemia, una disparidad que se refleja en la insuficiencia de las respuestas del gobierno a cuestiones específicas de género, como el aumento de la violencia doméstica”, advierte ONU Mujeres.
Algo similar ocurre con la acción climática, la consolidación de la paz y una gran cantidad de otros temas: cuando las mujeres no están en la mesa, sus voces no se escuchan. Eso hace que sea demasiado fácil para los órganos de toma de decisiones pasar por alto las brechas cruciales.
10 - Solidaridad con otros movimientos
La violencia contra las mujeres y las niñas está inherentemente relacionada con otras formas de daño e injusticia, como el racismo, la homofobia, la xenofobia, la pobreza y el cambio climático.
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