En otra oportunidad ya le hablé de qué significa realizar un cambio y de cómo se produce. Más abajo le recordaré algunos tips. Pero hoy le hablaré sobre qué precio debemos pagar cuando queremos hacer un cambio.
En el video podrá ver una vieja balanza que funciona. Tiene casi 100 años y era de la farmacia de mi abuelo. Yo la traje para hablarles de qué significa hacer un cambio. Esta balanza está en equilibrio. Si yo quiero hacer un cambio en este equilibrio, vamos a suponer que el cambio está mostrado por este peso, este es el peso del cambio, yo tengo que hacer una actividad equivalente para lograr ese cambio.
Entonces digo, “bueno, voy a hacer este esfuerzo”, no es suficiente. “Voy a hacer este otro esfuerzo”. “Quiero aprender un idioma, tengo que tomar clases”, no es suficiente. “Ahí se me fue la mano, agregué demasiado entonces se desbalanceó demasiado”.
Entonces, es una tarea de precisión ir buscando cómo yo mantengo el esfuerzo necesario para que se balancee con el logro que yo quiero buscar y, en general, hay una diferencia grande. La gente desea cosas, pero el solo desearlas no logra que llegue a nada.
A veces, las cosas que se desean son irrealizables, pero la mayoría de las personas, cuando nos proponemos algo, son cosas que sabemos que son realizables, que pueden ser difíciles pero que las podemos realizar.
Si no las podemos realizar y son cosas que son razonables, ahí está pasando una de dos cosas: o usted no lo está tomando en serio, o no está dispuesto a pagar el precio. Si es aprender un idioma, es tomar clases. Si es bajar de peso, es planificar una alimentación, es pesarse, es hacer las compras, es preparar vianda para el día siguiente.
O sea, para decirlo de otro modo, una cosa es lo que yo deseo y otra cosa es si estoy dispuesto a pagar el precio por lo que deseo. Y esa es la pregunta que yo le dejo hoy a usted: ¿Está dispuesto a pagar el precio para lograr aquellas cosas que quiere con fuerzas y son importantes para usted?
Bonus track: ¿qué significa hacer un cambio y cómo se produce?
Hace algunas semanas, le comenté que cuando yo me enfrento con un cambio o con la posibilidad de un cambio me baso en lo que dijeron dos investigadores y psicólogos norteamericanos: (James) Prochaska y (Carlo) Diclemente, quienes idearon una teoría para enfrentar el cambio.
Antes de cambiar aparece el estado de precontemplación. Ahora, si yo le digo: “¿Pensó en este verano irse de vacaciones?”. “Sí, estoy pensando en irme de vacaciones”, me responde. “¿Dónde?”, le pregunto. “Todavía no sé”. En este momento se encuentra en estado de contemplación. Cuando avanza un poquito la cosa y le vuelvo a preguntar, por ahí me dice: “Bueno, me voy a ir a la Costa, o a la montaña”. En este momento, tomó una determinación. Y después pasa al estado de la acción.
Con respecto a las modificaciones que tienen que ver con los cambios de conducta, pueden pasar dos cosas: o se vuelve a la vida sedentaria o se sigue en acción. ¿De qué depende gran parte de esto? De los objetivos que una persona se ponga.
Es que me tengo que poner objetivos, que tienen que ser claros y específicos. Realmente si lo que yo quiero es hacer un cambio, tengo que ponerme en acción. Y ese cambio tiene que ser factible. Sino, me va a llevar inevitablemente al fracaso.
Recuerde, el camino al infierno, está plagado de buenas intenciones.
*El doctor Alberto Cormillot (MN 24.518) es un reconocido médico argentino especialista en obesidad, educador para la salud, escritor y conferencista. Fundó y dirige la Clínica de Nutrición y Salud que lleva su nombre, Dieta Club, la Fundación ALCO (Anónimos Luchadores Contra la Obesidad) y el Instituto Argentino de Nutrición, desde donde asesora a industrias para la elaboración de productos dietéticos y saludables.
* Realización: Gastón Taylor y Alejandro Beltrame / Edición: Facundo Madero / Producción: Dolores Ferrer Novotný
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