Luego de que la NASA suspendiera el despegue de Artemis I, su cohete gigante que buscará llegar a la Luna, debido a un problema con uno de los motores; la agencia espacial norteamericana anunció que el sábado 3 de septiembre volverán a intentar su despegue desde Cabo Cañaveral, según indicó Mike Sarafin, director de la Artemis I, durante una conferencia de prensa.
“Los equipos revisaron los datos del intento de lanzamiento del lunes de la misión Artemis I y están avanzando con un segundo intento de lanzamiento el sábado 3 de septiembre, con una ventana de lanzamiento de dos horas a partir de las 2:17 PM (15:17 hora argentina)”, afirmaron desde el perfil oficial en redes sociales de la misión que tiene por objetivo reconquistar la Luna.
En ese sentido, Sarafin dio explicaciones sobre las razones que retuvieron a Artemis en la Tierra y afirmó que ante los problemas que se registraron decidieron “cambiar el proceso de carga de combustible y comenzar antes con el enfriamiento de los motores y trabajar en la plataforma para solucionar el tema de la fuga de hidrógeno”. Sin embargo, Charlie Blackwell-Thompson, la ingeniera a cargo del lanzamiento, resumió: “Vimos que teníamos una fuga en uno de los motores, y los esfuerzos que hicimos para repararlo no fueron exitosos. También tuvimos restricciones meteorológicas”.
Según explicaron, cuando el cohete debía despegar, a unas 7 u 8 millas náuticas de la plataforma se desarrollaban tormentas eléctricas, con lo cual no contaron con condiciones para el lanzamiento. En tanto, se mostraron esperanzados de cara al próximo sábado.
“Soy optimista de que tendremos algo de aire despejado para trabajar durante el intento de la tarde del sábado”, afirmó Mark Burger, oficial meteorológico de lanzamiento del 45° Escuadrón Meteorológico de la Fuerza Espacial de EEUU. “Sin embargo, nuevamente, la probabilidad de una clima adverso en cualquier punto de la cuenta regresiva todavía me parece bastante alta”, admitió el experto y destacó que estiman solo un 40% de posibilidades de buenas condiciones climáticas.
De todas maneras los científicos y las autoridades de la misión aclararon “en el intento de ayer (por el lunes) dijimos que si no podíamos acondicionar térmicamente los motores, no vamos a despegar. Y esa es la misma postura en la que vamos a entrar el sábado. No lo veo diferente”. Es por eso que, de ocurrir una nueva suspensión, confirmaron que el lanzamiento se realizaría el próximo 5 de septiembre.
Además, desde la NASA señalaron que Artemis I, conformada por el cohete del Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS) y la nave espacial Orión, aún se encuentran en la plataforma de lanzamiento 39B, del Centro Espacial Kennedy en Cabo Cañaveral, Florida.
Por qué no despegó Artemis
Durante la conferencia de prensa, Sarafin afirmó que, tras analizar los datos detenidamente, se determinó que la principal falla estuvo relacionada con la temperatura del motor al momento del despegue, luego de la carga del hidrógeno líquido. Es por eso que uno de los cuatro motores RS-25 del cohete SLS no alcanzó el rango de temperatura que requiere para que el motor arranque el despegue.
Los contratiempos comenzaron a primera hora, cuando una tormenta impidió el llenado del combustible a la hora prevista, y luego uno de los cuatro motores RS-25 del cohete no logró enfriarse a la temperatura adecuada para el despegue, previsto para las 8.33 hora local (12.33 GMT) desde la plataforma 39B del Centro Espacial Kennedy.
Los ingenieros de la NASA decidieron hacer una pausa en la cuenta regresiva mientras intentaban corregir el fallo, pero finalmente, sobre la hora, anunciaron la suspensión. “Han surgido varios problemas y necesitamos tiempo para resolverlos”, dijo Bill Nelson, administrador de la NASA, durante la conferencia donde detallaron las razones detrás del retraso y recordó que “hay millones de componentes en este megacohete de gran complejidad”, por lo que “hay que hacerlo lo más seguro posible”.
La misión tiene como objetivo realizar un viaje a la Luna de ida y vuelta, y busca poner a prueba las capacidades del cohete SLS (siglas en inglés de Sistema de Lanzamiento Espacial) y calibrar a la cápsula Orión, la cual puede trasladar hasta cuatro tripulantes, y con reservas de agua y oxígeno que le permitirían unos 20 días de viaje independiente.
Uno a uno: cuáles fueron los problemas que influyeron en la decisión de la NASA
- Hubo un problema con la purga del motor número 3, según explicó el gerente de la misión Artemis, Mike Sarafin. Es que el hidrógeno líquido superfrío se hace circular a través del motor para prepararlo para el lanzamiento, pero no logró bajar la temperatura como se esperaba. Los otros tres motores funcionaron como se esperaba.
- El equipo sabía que el problema de la purga del motor era un riesgo.
- Hubo un problema con la válvula de ventilación en el tanque interior.
- Las condiciones meteorológicas fueron desfavorables durante la ventana de lanzamiento: hubo precipitaciones al principio y relámpagos más tarde.
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