A casi 25 años de la muerte de Gianni Versace, el legado del diseñador aún continúa vivo, no solo porque su imperio, ahora en manos de su hermana menor Donatella, sigue cautivando el mundo de la moda, también porque su estilo presente en las propiedades en las que alguna vez vivió todavía causa emoción entre la gente.
Quizá su casa más famosa sea la Mansión Versace, un edificio construido en 1930, ubicado en Miami Beach, en el que el diseñador vivió desde 1992 hasta su fallecimiento, pero del otro lado del país, en Nueva York, una mansión neoclásica fue también su hogar.
La propiedad está ubicada en East 64th Street, a unos cuantos pasos de Central Park. Abarca 6 pisos, cada uno decorado con un tema diferente, y más de 4.300 metros cuadrados de espacio interior y 920 de exterior. La ex mansión de Versace incluye 17 habitaciones.
En los primeros cuatro niveles la casa conserva muchos de los acabados de estilo barroco italiano colocados por Gianni, desde pisos de mármol y columnas clásicas, hasta mosaicos y techos pintados. Los dos siguientes pisos fueron rediseñados, el quinto tiene una sala multimedia de estilo marroquí así como una sala de juegos con billar y videojuegos.
En el tercer nivel hay un techo que se asemeja a la bóveda de la Capilla Sixtina, junto con paneles Versace restaurados del siglo XIX provenientes de un palacio florentino, y el nivel superior ofrece un spa con baño doble.
Los actuales propietarios de la mansión son el administrador de fondo de cobertura sueco, Thomas Sandell y su esposa Ximena Sandell, quienes adquirieron la mansión en 2005 por 30 millones de dólares, mientras que Gianni pagó apenas 7.5 millones cuando la compró en 1995.
Nikki Field de Sotheby’s International Realty y su hija Amanda Field Jordan son las encargadas de cotizar la propiedad que salió al mercado por 70 millones de dólares. La mansión ofrece al comprador la oportunidad de “vivir como la realeza” y “poseer una parte de la historia de la moda y los bienes raíces”, aseguran desde la marca inmobiliaria de lujo.
“Llevamos a cabo extensas restauraciones y renovaciones con un increíble equipo de artistas y artesanos en honor al magnífico legado dejado por Gianni Versace”, dijeron los Sandell al Journal en un comunicado.
“Es como entrar en ‘Alicia en el país de las maravillas’ de Gianni Versace”, manifestó por su parte Nikki Field. Al tiempo que agregó que la pareja es “devota de Versace” y que “ha sido custodia de esta obra de arte”. “Va a ser comprado por alguien que tenga la misma reverencia”, subrayó Field.
Entre otras ventajas, en la casa se incluyen ventanas de estilo francés que dan a un jardín enrejado debajo. Además, cuenta con un balcón que recorre todo el largo de la parte trasera de la propiedad también da a ese espacio verde.
En la parte superior, una terraza en el techo tiene un mirador con vistas a las avenidas Quinta y Madison, y un nuevo propietario puede acomodar hasta nueve habitaciones en el interior.
Por último, la cocina comedor viene recientemente renovada y los muebles inspirados en Versace también están disponibles para su compra.
Fotos: Travis Mark para Sotheby’s International Realty
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