Una Copa del Mundo es sinónimo de fiesta en el país anfitrión, pero también de un motivo de reunión con familiares y amigos para ver los partidos, por lo que muchos optan por cambiar de televisor para tener una mejor experiencia y ahí hay varias consideraciones a tener en cuenta para sacarle provecho.
Es importante tener en cuenta que más allá de marcas, lo que interesa es encontrar características técnicas que hacen que la experiencia de ver partidos de fútbol sea mucho más agradable, fluida y en general con la mayor calidad posible.
A todos los factores que se presentan a continuación se le deben sumar elementos externos del televisor que se deben garantizar previamente, como por ejemplo una buena conexión a internet si los partidos se van a ver por streaming o buena señal en el operador de cable, que además cuente con los canales en HD.
Resolución
Este primer apartado es una condición poco negociable. Entre mayor sea la resolución de la pantalla más detalles se va a poder ver, como por ejemplo los números de las camisetas de los jugadores, sus rostros, el movimiento del balón, entro otras situaciones de un partido. Lo básico sería ir por un panel Full HD para ver el presupuesto y si es posible llegar al 4K u 8K la experiencia será mucho más disfrutable.
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Tasa de refresco
Los deportes son un reto para las pantallas por que son transmisiones que van a una alta velocidad de movimiento y que no está controlada, como sucede en una película o programa de televisión. Así que un televisor para ver fútbol debe contar con un alto rango en su tasa de refresco, que en lo posible vaya de 100 Hz en adelante. Esto permitirá que la imagen se vea más fluida y haya menos difuminado.
Tamaño de pantalla
Este es un factor muy variable porque va a depender del espacio de cada persona. No siempre un televisor más grande va a ser el más cómodo para disfrutar su contenido. Hay una formula que ayuda a dimensionar cuál sería la mejor opción, teniendo en cuenta la distancia de visionado, es decir, el lugar desde donde se verá la pantalla. Esta dice que se debe multiplicar la altura de la pantalla por 1.5 para encontrar el mejor lugar para posicionarla.
Aunque lo mejor será tener pantallas de hasta 40 pulgadas si el sofá está a menos de dos metros de distancia, si es entre 2.1 a 2.5 metros la mejor opción serán paneles de entre 49 y 55 pulgadas, y ya si el sitio desde donde se ve es de más de 3 metros se pueden optar por pantallas de 70 o más pulgadas.
LED, QLED u OLED
Es otra duda recurrente, pero la verdad es que suele haber poca diferencia para el caso de los deportes. Si bien los paneles QLED y OLED son de mejor calidad por su brillo y contraste. Pero con una LED también se conseguirán buenos resultados y los precios suelen ser más bajos.
Modo deportes
Este es un añadido interesante del que se le puede sacar provecho. Algunos televisores cuentan con esta opción porque optimiza la imagen para adaptarse a la velocidad del juego, dar un equilibrio entre el brillo y el contraste y mejorar el sonido. No es una obligación, pero es un elemento que suma para el caso del Mundial.
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HDR o Dolby Vision
Son sistemas que mejoran directamente la imagen de la pantalla. Pero para el caso del fútbol, la mejor opción es Dolby Vision porque mejora la profundidad del color y el brillo, aunque es mucho más caro que el HDR por lo que sube el precio del televisor.
Un sonido que acompañe
Finalmente, para complementar las características del televisor, una barra de sonido es una opción que va a mejorar la experiencia al dar un ambiente con mayores bajos y se sentirá de manera más fiel el entorno que se vive en el estadio.
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