Así cambió el escritorio de Windows desde sus inicios hasta su posible nueva versión en 2024

Desde su nacimiento como sistema operativo en 1985, Windows ha modificado la apariencia de su escritorio en más de una decena de ocasiones en una progresión que sigue hasta la actualidad y que ha dejado atrás algunas características para servir mejor a los intereses de un usuario que, al igual que el sistema, ha cambiado con el paso de los años.

Estos cambios no fueron únicamente estéticos, sino que sirvieron para introducir nuevas funciones o características, como una barra de herramientas, iconos de programas o un cursor. Si bien en un principio estos fueron agregados y llamaron la atención de las personas, actualmente son comunes y su presencia no es sorpresa.

Esta es la evolución del sistema de Windows desde su nacimiento:

La primera versión de Windows no se parece en absoluto a la que se tiene ahora. En 1985 Microsoft empezaba a elaborar este sistema destinado principalmente para tareas de oficina y no contaba con muchas funciones.

Windows 1.0 contaba en ese entonces con un gestor de archivos, calendario, notas, calculadora, reloj y con respecto al entretenimiento, solo tenía un juego llamado Reversi. Su memoria de 640 kilobytes era más que suficiente para los estándares de esa época.

Fue recién en esta segunda versión de Windows que se introdujo la función de sobreponer pestañas, se le dio un nuevo color a la interfaz y representa la primera aparición de los programa de Excel y Microsoft Word.

El resto de funciones como la calculadora, el reloj, y otras funciones de oficina, se mantuvieron con respecto a la versión anterior.

La tercera versión de Windows tuvo por primera vez la aparición del color no como tema del escritorio, sino como característica individual de iconos y programas. Gracias a los cambios, su apariencia fue más amigable para los usuarios.

El gestor de programas y el de archivos aparecieron por primera vez, al igual que el conocido juego de Solitario y el Panel de Control que se conoce hasta ahora.

Esta versión fue posterior a Windows NT, una versión avanzada de 3.0. La llegada de Windows 95 representó la llegada de características que se conservan hasta el día de hoy como la barra de tareas y la incorporación del botón de inicio.

Además, fue con este sistema que los programas presentaron por primera vez los botones de minimizar, maximizar y cerrar.

La progresión de Windows 95 al 98 trajo consigo otros cambios importantes que se pueden ver incluso hasta hoy. Se introdujo por primera vez la barra de accesos directos, un escritorio activo por completo y, junto con Internet Explorer, una barra de dirección.

Además, a diferencia de su versión anterior, este sistema sí permitía el minimizar una ventana haciendo clic en su icono en la barra de herramientas.

Luego de pasar por dos versiones llamadas Windows 2000 y Windows Me, Microsoft desarrolla un escritorio mucho más cercano a lo que conocen los usuarios a día de hoy y con mayor cantidad de programas y utilidades.

El éxito comercial de esta versión del sistema fue tal que se le dio soporte hasta el año 2014 y a día de hoy muchas de sus características, técnicas y estéticas, se mantienen.

El apartado estético tiene lo que se vio en versiones anteriores, pero presentado de forma amigable para que los usuarios puedan operar en sus sistemas sin inconvenientes.

Luego de los malos comentarios recibidos a partir de la actualización a Windows Vista, la nueva versión de Windows 7 llegó a los usuarios con una mejora significativa respecto a su predecesor.

El escritorio contó con widgets como calendario y reloj para esta versión y se añadió la capacidad de ofrecer una vista previa de los programas activos en la barra de tareas con solo pasa el cursor sobe los botones correspondientes.

Además, se le dio una apariencia “transparente” tanto a los marcos de las ventanas como a la barra de herramientas y al menú de inicio.

Con la llegada de la década del 2010, los dispositivos de pantalla táctil empezaron a ser más comunes y es por eso que Windows 8 tuvo una apariencia que se asemejó más a un menú aplicaciones en un dispositivo móvil.

La adaptación a esta nueva estética llevó a que el menú de inicio ocupara la totalidad de la pantalla y se integraron los servicios de XBox. Funciones como el reproductor de video y de audio modificaron su apariencia estética para ir más de acuerdo con la temática 2D del sistema.

Se dio un paso atrás a la idea de que el menú de aplicaciones ocupe toda la pantalla y se usó la misma idea en un entorno más familiar dentro del menú de inicio, que no solo contenía aplicaciones usadas frecuentemente, sino que también estaban ordenadas por nombre para ayudar a ubicarlas.

La versión actual de Windows y que fue recientemente actualizada en 2022. Windows 11 ya no presenta la barra de inicio alineada a la izquierda por defecto, sino que también puede centrarse en la parte inferior de la pantalla.

El menú de inicio cambió completamente para presentar nuevamente los iconos de los programas y aplicaciones de forma amigable para el usuario

Durante el evento Surface de Microsoft en el que presentó sus nuevos dispositivos, se pudo ver una interfaz de Windows que no se parece a la que está activa con Windows 11 y, al contrario, tiene muchas diferencias empezando por una barra de herramientas flotante.

Además, se pudo notar que los elementos incorporados de hora, batería del dispositivo y clima ya no se encuentran en la parte inferior de la pantalla, sino en la parte superior.

Según la web de Windows Central, este diseño estaría llegando a los dispositivos de los usuarios a modo de actualización en el año 2024 y se integraría a la línea de tiempo de los cambios que ha experimentado el sistema de Microsoft a lo largo de los años.

SEGUIR LEYENDO: