Las 6 cámaras fotográficas más raras e innovadoras de la historia

Los modelos más antiguos de cámaras fotográficas son verdaderas obras de arte con la precisión de un reloj. Un monumento a la belleza mecánica. Pero con el tiempo se encuentran modelos que destacan por su diseño o incluso por su extravagancia. En el presente artículo, Infobae presentará algunos de los modelos más interesantes, raros e innovadores de la historia en la industria de la fotografía.

Las cámaras antiguas son tecnologías dignas de conocer. Cuando no era posible tomar fotografías con ellas, se podían ponerlas como elemento decorativo y seguro que llamaban la atención de los invitados a un hogar. Unas pueden destacar por su forma, otros por la precisión que siempre es característica de los ingenieros, y algunas porque son raras pero innovadoras (para la época).

No se enumerarán los mejores, ni los peores, sino los que más llaman la atención por una u otra razón, por lo que han sido históricamente o por diseño, que lograron marcar a toda una generación.

Esta cámara demuestra que un buen fotógrafo no necesita una buena herramienta sino una forma de pensar. Stephen Shore, uno de los autores más importantes del siglo XX, llevó mucho tiempo trabajando en esta cámara.

Esta es una simple cámara de juguete, tiene un diafragma fijo como un teléfono celular y tiene la popular forma de cabeza del ratón. Cada año sacan modelos diferentes pero los fotógrafos siempre están buscando este mítico modelo.

Esta es una cámara única en su tipo, solo existe una copia. Esta es la cámara de un fotógrafo sin hogar que construyó la cámara con basura para convertirse en un imitador. Es increíble que algo así funcione.

Algunas personas llaman loco a Miroslav Tichý, otros criminal y algunos un artista. Tomaba fotografías de las mujeres que veía en la calle con una cámara de este tipo y luego las exponía a cualquier superficie. El efecto logrado aún no ha sido imitado.

Es difícil entender cómo funciona esta cámara, cómo logra enfocar las tomas y cuál era su obsesión.

Esta no es una cámara que se recomiende llevar. Parece más un arma que una herramienta creativa. Fue inventado por el científico francés Étienne-Jules Marey en 1882 para registrar los movimientos de los animales.

Tiene un obturador mecánico que permite grabar hasta 12 disparos por segundo en la misma placa, más rápido que algunas cámaras actuales. Tiene una velocidad máxima de 1/720, lo que permitía congelar el vuelo de las aves con mucha precisión.

Hoy en día, la se conoce porque los hermanos Lumière la usaron como inspiración para su famosa cámara de movimiento.

Una de las cámaras más interesantes de la década de 1920 se vio ensombrecida por el éxito de la famosa Leica 35 mm. Es una cámara compacta, con una lente brillante f1.8 que permite tomar fotografías discretas con poca luz.

Su principal impulsor fue Erich Salomon, quien lo utilizó para captar, más que nunca, a los políticos en sus momentos de ocio, sin ser detectados, gracias a que disponía de cámara oculta, aunque trabajando con paneles de 6x4,5 cm.

Se hizo famoso por esconderlo en un maletín y fotografiar uno de los juicios más publicitados de la época.

Una de las cámaras más bonitas jamás fabricadas. Y probablemente uno de los mejores de la historia. Contarex Bullseye es una apuesta de Zeiss Ikon para hacer la mejor cámara. Cuenta la leyenda que los tornillos están pegados y sellados, porque creyeron que nunca habría que arreglarlo.

Su nombre se deriva del tamaño del medidor de luz en la parte superior de la caja. No solo el cuerpo es perfecto, sino que la lente se considera la mejor que Carl Zeiss haya fabricado jamás. Era una cámara adelantada a su tiempo, por lo que su producción no fue en grandes cantidades. Solo superó las 30.000 unidades.

Esta cámara es tan revolucionaria como las primeras cámaras digitales. Nada ha sido igual desde entonces. Una pequeña caja con una lente de menisco simple es la única lente que hace que la fotografía sea popular.

En su primera versión, estaba provisto de un eje giratorio que permitía 100 disparos. Se tiene que enviar la cámara y te la devuelven con una copia impresa y una recarga. Nada tan simple ha hecho tanto por la fotografía.

En cierto modo, esta cámara se asemeja a la forma en que funcionan los teléfonos celulares en la actualidad. Lo único que puede hacer el usuario es elegir el encuadre y el tiempo de la toma. Y luego, ver los resultados.

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