Casters o narradores de videojuegos: qué es, cómo lograrlo y más historias de una profesión en los eSports

“¡Los equipos están cabeza a cabeza!, agárrense de las sillas porque esto está infartante, me voy a tener que tomar 30 pastillas para la presión, Echo tiene la ventaja, si logran bajar este 20 por ciento de vida quedan tricampeones”, esta emoción es la que se vive en cada una de las transmisiones, pero también, es lo que escucha Kevin de su compañero narrador mientras se queda sin palabras, no solo por la emoción de la partida, sino por llegar ahí, a estar acompañando la narración de la final de uno de los eventos de eSports más importantes del mundo y más aún, de su videojuego favorito.

Kevin Correa Vanegas nació en Cali, Colombia, y contó con la suerte de tener en su infancia “uno de los primeros computadores a color del país, en el cual mi tío compró el CD original de Starcraft”, y así; sin saber bien inglés y mucho menos quién era Blizzard, compañía desarrolladora del juego, se fue adentrando en lo que años después se convertiría en una de sus pasiones más grandes.

Vanegas conoció World of Warcraft WoW, videojuego multijugador masivo que lo llevó a conectarse con gente de diferentes partes del mundo, y precisamente fue uno de sus “mejores amigos dentro del juego” quien le ofreció la oportunidad de último minuto de participar como comentarista de las competencias de Mythic Dungeon Internacional (MDI) debido a que conocía el juego.

Así fue como Kevin pasó a convertirse en ‘Keniac’ y a formar parte de los Casters, una industria de narradores de videojuegos que está en crecimiento y que muchos desconocen. De hecho, se podría asimilar al trabajo que hace quienes narran fútbol, un equipo de comentaristas y narradores exclusivos para los encuentros.

En medio del auge que representan los eSports en el mundo, los deportes electrónicos no solo atraen a jugadores experimentados que conforman equipos multimillonarios, pues dichas competencias integran a todo un sinfín de nuevos roles, siendo los Casters los encargados de narrar el minuto a minuto de lo que se vive dentro de dichos eventos, transmitiendo la emoción a los espectadores como si de un partido de fútbol se tratase.

Según Vanegas, para empezar a ser Caster solo se necesita conocimiento del juego, las ganas y la motivación de tomarse su videojuego favorito como una responsabilidad, la experiencia vendría después, pues aún recuerda su primera narración en 2020, la cual realizó con miedo pero con la convicción de hacer las cosas bien. Allí, dejó un precedente y le llegó la oportunidad de empezar a hacer lo que le gustaba: “ser Caster me salvó de un momento muy difícil, también a nivel económico, en el que llegué a pensar en vender mi computador y dejar de jugar”.

Keniac es profesional de soporte técnico; sin embargo, la pandemia y el trabajo ocasionó que sus oportunidades de trabajo se vieran reducidas, y a pesar de que la oportunidad de ser narrador de videojuegos no le cambió su situación económica de un momento a otro, le mostraron que un camino realizando su sueño de creador de contenidos era posible, y así lo hizo.

Bajo esa misma línea aparecen personalidades como Ibai Llanos, un joven español que a sus 19 años presentó un casting para ser narrador en el último día de las convocatorias, y después desempeñarse durante más de cinco años como Caster, hoy día es uno de los influencers y creadores de contenido con más impacto, generando ganancias de más de 140.000 dólares al mes.

Aunque Kevin Correa no es Ibai Llanos, aún se para frente al espejo para mejorar su forma de hablar y estar preparado, cosa que lo llevó a presentar un segundo evento en 2021, esta vez con cámara, un equipo de luces y más infraestructura de por medio.

Actualmente, Keniac se dedica a transmitir partidas de algunos videojuegos por Facebook, con un número de seguidores que va en crecimiento y con unos ingresos que aunque no son regulares, van aumentando.

“No se puede uno explicar el sentimiento cuando una persona que no te conoce en persona decide apoyarte y donarte de un momento a otro 200 o 300 dólares; más que el dinero, impacta es el apoyo de la gente”, aseguró Correa, quien además, tiene la motivación para seguir narrando, “no sé cuándo vuelvan a hacer competencia, pero estoy seguro que por allá en un escritorio de Blizzard debe haber una carpeta con mi nombre esperando a ser llamado de nuevo”.

La industria de los Casters latinos sigue creciendo, aunque con muchos retos por delante

Fabián Garzón lleva cinco años como narrador profesional y en su caso, también comenzó de manera fortuita, pues en 2017 se contactó con la Liga de Videojuegos Profesional para ser organizador de torneos de Overwatch, un shooter desarrollado por Blizzard y fue la ausencia de uno de los narradores ya contratados lo que lo llevó a comentar su primera partida.

Al igual que Keniac, la formación de Fabián, hoy conocido como ‘Pato Caster’, estaba lejana a lo que hace actualmente, pues con unos estudios en gestión financiera jamás se imaginó estar narrando partidas en diferentes juegos e incluso en participar en competencias a nivel internacional.

Si una persona desea ser Caster, debe tener en cuenta que, al tratarse de eventos deportivos o torneos, no es un trabajo fijo, pues como explica Garzón “muy pocos torneos tienen narradores contratados de planta”, por lo que el éxito de cada persona dependerá de la capacidad que tenga de “tocar puertas” en las ligas más bajas de cada videojuego y de la capacidad de ir escalando gracias a la visibilidad cosechada.

Un Caster no narra todos los juegos presentes en los eSports, pues cabe resaltar que existe una gran cantidad, cada uno con sus mecánicas y reglas totalmente diferentes, al igual que sucede con otros deportes, cada narrador se especializa en un título específico o en varios con jugabilidad similar.

Según Garzón, prepararse para un evento o para un videojuego nuevo a narrar toma mínimo un mes, en el cual se debe empezar jugando, “así ya lo hayas jugado antes, debes empezar a entender el juego a consciencia, las habilidades, los personajes, las funciones, entre muchos otros factores, además es vital que los narradores se aprendan los nombres de los jugadores que van a competir, pues equivocarse es un error frecuente”.

Al tratarse de un rol que es por temporada, el pago dependerá del videojuego, de la competencia y de la Liga que se esté narrando, según Fabián, “un buen pago serían unos 150 dólares por jornada, aunque cada Caster tiene su tarifa según su trayectoria y recorrido”. Según Garzón, videojuegos como League of Legends, Fortnite y VALORANT son algunos de los videojuegos con mayor acogida y quienes tienen un mayor número de ligas, y por consiguiente, más talentos de narradores.

No es raro encontrarse a un narrador de videojuegos dedicándose a otras labores como gestor de competencias o creador de contenido, “la gracia de ser Caster radica en que la persona combine esas habilidades con otras cosas que sepa hacer”.

A pesar de ser una industria en crecimiento, en Latinoamérica no muchas organizaciones tienen puestos fijos como narradores. Para empezar, Garzón recomienda narrar las partidas propias, así nadie lo vea o lo escuche, de esta manera, irá adquiriendo habilidades de comunicación y conocimiento del juego que será vital para desempeñarse a nivel profesional.

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