Las 5 claves que le indicarán si necesita comprar un televisor nuevo

Comprar un televisor se vuelve un poco más complicado cuando se trata de ir a la tienda de electrodomésticos y elegir la primera TV que tienen a la venta. Antes de esto, es necesario conocer de antemano algunos buenos aspectos.

Aunque parezcan prácticamente idénticos por fuera, las diferencias técnicas que presenta cada modelo por dentro pueden ser determinantes.

Descubrirá que al elegir un televisor, no solo debe considerar su precio o tamaño, sino también otros factores importantes que marcan la diferencia entre elegir un televisor común y corriente y el que realmente necesita.

1. Tener más pulgadas en una TV no es sinónimo de mejor

Ahorre límites razonables de espacio disponible; si no cabe en los muebles de su sala de estar o en el espacio donde está instalado, no hay mucho que hacer, el tamaño del televisor es uno de los problemas más obvios. ¿Es mejor un televisor de 65 pulgadas que un televisor de 49 pulgadas?

El tamaño del televisor está determinado por la distancia a la que se verá. Una fórmula matemática simple le dará el tamaño perfecto para la distancia disponible: Distancia de visualización (en pulgadas) x 0.84 = pulgadas del televisor.

Con esta fórmula encontrará que si normalmente mira televisión desde una distancia de 2 metros (200 cm / 2.5 = 79 pulgadas), luego de realizar la operación obtenemos que para esta distancia, una TV de hasta 66 pulgadas (79 pulgadas de distancia x 0,84 = 66 pulgadas de pantalla) sería el tamaño perfecto.

2. El sistema operativo

Los televisores son cada vez más sofisticados en funciones. Es por ello que el sistema operativo instalado en el televisor será un factor determinante en la experiencia del usuario. Desde la plataforma de conexión de Smart TV hasta el control de imágenes. Todo lo mencionado anteriormente sucede en el sistema operativo.

Cada marca ha desarrollado su propio sistema operativo para sus dispositivos. Como por ejemplo Tizen en televisores Samsung, webOS en LG o VIDAA U en Hisense.

La excepción a esta regla la encontramos en Android TV, la versión del sistema operativo presente en 85 teléfonos móviles del mundo, específicamente adaptada para funcionar en TV.

Marcas como Sony o Philips y muchas otras usan Android TV en sus televisores, agregando pequeñas mejoras al sistema para incorporar funciones específicas de su hardware.

Aspectos como la disponibilidad de las aplicaciones de Netflix, Disney o Amazon dependen de un sistema operativo confiable, entre las muchas otras plataformas de transmisión de video y entretenimiento necesarias para una gran experiencia.

3. Presupuestos realistas

El dinero es un fuerte argumento a la hora de elegir un televisor porque dependiendo del presupuesto disponible determinará el tamaño, las características e incluso la tecnología de pantalla que tendrá.

Este presupuesto debería ser realista, pero hasta cierto punto flexible. El mercado de la televisión está lleno de fluctuaciones de precios provocadas por ofertas y promociones específicas en las que puede comprar televisores baratos.

Hay televisores por USD$ 500, pero también de USD$ 3.000 en el mercado y cada precio está basado en la mejora tecnológica. Claramente, un televisor de USD$ 500 no se ve ni suena igual que un televisor de USD$ 800 o USD$ 3.000.

Empiece por ahí, sabiendo que no todo el mundo necesita un televisor que valga más de USD$ 1000. Por ello, fija un presupuesto realista, pero con cierta flexibilidad, ser un buen punto de partida.

4. Conectividad en la parte posterior pensando en el futuro

Desde ya hace unos años atrás, es sumamente importante mirar tanto la parte frontal como la parte posterior del dispositivo. Y eso es porque en la parte posterior encontrará las diversas conexiones del televisor. Esta es una parte que se ha vuelto cada vez más importante a medida que aumentan las capacidades de la televisión.

El ejemplo más evidente lo encontramos en los conectores HDMI que, según su versión, proporcionan un amplio abanico de funciones o limitarán la calidad de los dispositivos conectados a este puerto.

La llegada de HDMI 2.1 marca el antes y el después de la conectividad de la televisión, ya que este estándar permite un ancho de banda mucho mayor, lo que resulta en una mejor calidad de imagen.

Esta mejora en la conectividad del televisor le permite aprovechar mejor su televisor al conectar una consola de nueva generación o una PC para videojuegos, ya que mejora la sincronización con la GPU y permite la visualización del juego en resoluciones 4K y HDR, mejorando la experiencia de juego.

Además, la incorporación de tecnologías inalámbricas como Bluetooth o la compatibilidad con redes WiFi-5 facilitará la conexión a un gamepad, auricular o teclado Bluetooth.

Además, facilitará la transmisión de alta velocidad, fundamental para lograr contenido 4K en plataformas de transmisión.

5. Debe conocer las diferencias entre LED, QLED, Nanocell y OLED

Esta tecnología se basa en una fuente de luz LED que se proyecta sobre una serie de difusores y filtros polarizadores hasta llegar a un panel de cristal líquido, estimulando eléctricamente las células (píxeles), permitiendo la transmisión de una determinada frecuencia de onda de luz que nuestros ojos perciben como colores.

Estos diminutos cristales actúan como un filtro capturando un cierto espectro de luz (RGB) dependiendo de su tamaño, filtrándolo eliminando el resto de frecuencias y energías de onda. El resultado es una pantalla más brillante con colores más vivos.

Por último, las pantallas OLED tienen un LED fabricado de material orgánico que emiten luz cuando la carga o corriente pasa a través de él. Las pantallas OLED se usan ampliamente para mostrar colores ricos y vibrantes. Además, cuando transmiten colores más oscuros, consumen menos energía.

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