Apple, la empresa creadora del iPhone, añadió un paso extra en su "App Store" para que los usuarios confirmen en una ventana especial que quieren pagar suscripciones recurrentes en una aplicación.
Una vez que los usuarios descarguen la aplicación que requiere suscripciones pagadas –por ejemplo: periódicos o videojuegos– o que ingresen a las opciones de suscripción en una aplicación ya descargada, la primera autentificación será la misma de siempre: la identificación de cara, en sus dispositivos más avanzados, o con la huella digital, en modelos anteriores.
Pero ahora, la compañía de Tim Cook agregó una nueva verificación: una ventana emergente aparecerá cuando ya se haya identificado el usuario, donde Apple recordará al comprador que la suscripción continuará salvo que se cancele al menos un día antes del periodo establecido, ya sea por semana, mes o por año.
La intención principal de Apple es combatir las aplicaciones que se dedican a estafar usuarios, pero también a aquellas que ofrecen un periodo de prueba gratis, pero registran los datos de pago del usuario y, después de cierto tiempo, comienzan a cobrar sin ningún tipo de aviso.
El desarrollador David Barnard fue uno de los primeros en reportarlo a través de sus redes sociales. La actualización es un paso más de la empresa de la manzana para tener un entorno más transparente en su "App Store".
La autentificación en dos pasos es usada por las empresas para proteger a sus usuarios. Gmail, por ejemplo, ofrece ese servicio para ingresar en una cuenta de mail, aunque en este caso el usuario es el que debe activarlo y no es por defecto.
Este es el segundo paso de Apple para transparentar el funcionamiento de sus aplicaciones, que en casi todos los casos son creadas por desarrolladores externos que tienen intereses diferentes.
En enero, de acuerdo con los reportes de medios especializados, el reglamento de la "App Store" cambió para que los desarrolladores estén obligados a presentar con claridad el costo y las opciones de las suscripciones en sus aplicaciones.
Los desarrolladores deben claramente presentar los precios reales que se tienen que pagar desde un principio, aun cuando la aplicación tenga un periodo gratis de prueba al inicio.
Si una aplicación tiene ese periodo de prueba, debe advertir al usuario que, cuando finalice el tiempo marcado, iniciarán los cargos indicados. Aplicaciones tan famosas como Tinder, que tienen una opción de servicio "Premium", deben aclarar que cobrará las suscripciones completas desde el principio, aunque los planes que ofrecen sean para seis y doce meses de uso.
Otras empresas más oscuras buscan, a través de aplicaciones gratuitas. que los usuarios graben los datos de sus huellas digitales. Luego éstas usaban esos datos para realizar cargos que quienes descargaban la aplicación no necesariamente conocían o aprobaban.