Hace un año el mundo se enteró que Facebook permitió que una compañía de consultoría política llamada Cambridge Analytica explotara la información personal de 87 millones de usuarios, sin permiso. Según las investigaciones, con esos datos habría generado anuncios políticos dirigidos para favorecer la campaña presidencial de Trump, así como para el Brexit del Reino Unido.
De acuerdo con el demócrata David Cicilline, miembro de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, la compañía de Mark Zuckerberg ha recopilado en secreto datos altamente confidenciales a través de las "puertas traseras" de otras aplicaciones. Así lo dijo en una columna para el New York Times.
"Y en su búsqueda continua de dominio, Facebook le dio a 60 fabricantes de dispositivos acceso directo a los datos de sus usuarios. Esas acciones están bajo investigación criminal", explicó el congresista.
Como presidente del Subcomité de la Cámara de Comercio de Derecho Antimonopolio, Comercial y Administrativo, solicito que se lleve a cabo una investigación en contra de Facebook por sus presuntas conductas ilícitas
Después del escándalo de Cambridge Analytica, la Comisión Federal de Comercio confirmó que está investigando a Facebook para determinar si violó alguna una orden de consentimiento que había firmado en 2011.
Sin embargo, David Cicilline argumentó que durante varios años, diversos defensores de la privacidad han alertado a la comisión de que Facebook probablemente estaba violando sus compromisos en virtud del acuerdo. "Pero la comisión no solo se hizo de la vista gorda con la orden, tampoco detuvo la adquisición de WhatsApp e Instagram por parte del gigante de las redes sociales".
Según su dicho, la forma en que la Comisión responda a los "abusos" de Facebook, definirá su efectividad y credibilidad, pues aseguró que tiene el poder de multar al gigante tecnológico con grandes sumas de dinero.
Mencionó que los antecedentes de la red social respaldan su postura, y recordó que en 2013, Mark Zuckerberg, director ejecutivo de Facebook, aprobó personalmente la decisión de la compañía de bloquear a Vine, un rival en rápido crecimiento, en beneficio de su propio servicio de video en línea.
La decisión de Zuckerberg de tener más control respecto de los negocios separados de Facebook ocurre después de dos años de escrutinio de su red principal, que ha sido criticada por permitir interferencias en las elecciones y la divulgación de desinformación. Esos y otros problemas han lentificado el crecimiento de Facebook y han dañado su reputación; los legisladores y reguladores en todo el mundo están en estado de alerta.
Zuckerberg se ha disculpado en repetidas ocasiones y ha prometido solucionar el problema.