En medio de varios escándalos por el uso de información privada de los usuarios, Facebook no sólo ha perdido 9 mil millones de dólares, sino millones de cuentas de usuarios jóvenes.
Más de 15 millones de estadounidenses jóvenes, de entre 12 y 34 años, han abandonado Facebook en los últimos dos años, según una investigación de la firma de investigación de mercado Edison Research.
Compartieron que mientras que en 2017 el 67% de la población de EEUU mayor a 12 años usaba Facebook, en 2018 esa cifra cayó 62% y en 2019, un 61%, lo que equivale a 172 millones de usuarios actuales.
Revelaron que al menos 17 millones de personas de entre 12 y 34 años han desactivado sus cuentas. Quienes dejan la red social, prefieren "mudarse" a Instagram, la red hermana del gigante Facebook.
La red social intenta compensar esas pérdidas con el aumento de usuarios mayores de 55 años. En 2017 y 2018, ese grupo creció un 49%, mientras que en 2019 ha crecido 53% con cuentas nuevas.
La investigación de la firma no ofrece datos de los motivos por los que los usuarios desactivan sus cuentas, pero las especulaciones lo atribuyen a los escándalos por el uso de datos privados de los usuarios.
En los últimos meses, el fundador y CEO de Facebook Mark Zuckerberg ha sido criticado por su manejo de los datos confidenciales de los usuarios.
Para atender a las demandas por mayor privacidad y seguridad que proliferan por su manejo de los datos personales y la difusión de noticias falsas, Zuckerberg aseguró que en el futuro la red social será una plataforma "enfocada en la privacidad", con más "servicios privados y encriptados".
Admitió que actualmente Facebook "no tiene una reputación sólida" respecto a la protección de la privacidad, y que históricamente se han centrado en herramientas para compartir más abiertamente los contenidos. El empresario aseguró: "Hemos demostrado que podemos evolucionar para construir los servicios que la gente realmente quiere, incluso en mensajes privados y stories".
"Creo que el futuro de la comunicación cambiará cada vez más a servicios privados y encriptados donde las personas pueden confiar en que lo que se dicen entre sí se mantiene seguro y sus mensajes y contenido no quedará para siempre. Este es el futuro, espero que ayudemos a lograrlo", afirmó