Tardará 30 minutos desde el momento del pedido telefónico -o vía web- y no deberá darle propina cuando haga la entrega. Sólo habrá que rezar para que no llueva y que el viento no juegue una mala pasada y redistribuya la muzzarella por toda la masa. Así será el nuevo sistema de reparto a domicilio de Domino's Pizza con drone, que será puesto en funcionamiento hacia finales de año en Nueva Zelanda, según anunció la empresa.
La compañía hizo una demostración de cómo sería la entrega de sus productos al concretar una alianza con una firma de repartos por drone que desarrolló la tecnología necesaria para hacer realidad esta modalidad. El aparato lleva el nombre de Flirtey y puede deslizar el producto comprado por medio de un sistema de cuerdas que lo deja en la puerta de su hogar.
Nueva Zelanda fue el primer país en autorizar el reparto de productos por medio de drone, luego de que las empresas interesadas realicen el permiso oficial para realizarlas.
"Con el número en aumento de repartos que hacemos cada año, nos enfrentábamos al desafío de mejorar nuestros tiempos de entrega", señaló Don Meil, el director ejecutivo del grupo, al diario The New Zealand Herald. Por su parte, Michael Gillespie, jefe digital de Domino's en Australia, había dicho en una entrevista en marzo que a medida que avanzaran no sería difícil de creer que pudieran tener "un local con varios robots haciendo entregas".
Domino's Pizza Enterprises, la pionera en este sistema de delivery, tiene los derechos de la marca en cinco países: Japón, Australia, Nueva Zelanda, Francia y Alemania. En total tiene 1.900 locales comerciales que venden sus productos.
En otros países, la entrega a domicilio por medio de drone es más complicada. Las regulaciones aéreas impiden que el uso de estos aparatos no tripulados sea totalmente libre y deben tenerse permisos especiales para poder tripularlos remotamente. En los Estados Unidos, Amazon había anunciado su intención de realizar las entregas por medio de este sistema, pero por el momento no podrá ejecutar su idea.