De cada 100 muertes en el mundo, una es por suicidio. La estadística es de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que asegura que mueren más personas por esta causa que por VIH, paludismo o cáncer de mama. “Es un problema de salud pública urgente y su prevención debe ser una prioridad nacional”, declaró Renato Oliveira e Souza, jefe de la Unidad de Salud Mental de la Organización Panamericana de la Salud, en el marco del Día Mundial para la Prevención del Suicidio el pasado 10 de septiembre. También para iniciativas pequeñas, locales, es una prioridad. Es el caso de Lions Barber Collective, de Gran Bretaña, una red de peluqueros y barberos que se capacitaron para reconocer los síntomas de problemas de salud mental en las charlas con sus clientes.
Según la ONG británica Campaign Against Living Miserably (CALM), en el Reino Unido cada semana se suicidan 125 personas. Es la principal causa de muerte de los jóvenes menores de 35 años del país.: tres cuartas partes de las 1.600 personas se quitan la vida cada año. En este contexto, en un pequeño poblado de la costa sur de Inglaterra llamado Torquay, una historia personal de dolor y ausencia se transformó en un proyecto colectivo que procura salvar vidas mediante la escucha, el asesoramiento, la compañía y la prevención.
Después de perder a un amigo que se suicidó, Tom Chapman decidió transformar su pena en un proyecto. Él es el barbero que fundó Lions Barber Collective. El grupo ayuda a crear conciencia sobre las enfermedades mentales y tiene como objetivo prevenir el suicidio. Los peluqueros hablan, escuchan y procuran reconocer los síntomas de la depresión. Cuando los detectan, recomiendan los servicios de apoyo.
Torquay se encuentra entre las áreas más desfavorecidas del país, con un alto índice de hombres sin hogar, jóvenes que se autolesionan, abusan del alcohol y una tasa de suicidio que va en aumento. La gran mayoría de los hombres que se quitan la vida en Torquay no accedieron a los servicios de salud mental y muy pocos realizaron consultas con sus médicos de cabecera.
<b>Hablar con el peluquero</b>
BarberTalk se llama el programa que puso en marcha el Lions Barber Collective. La confianza que se puede generar entre el peluquero y el cliente es clave en el proyecto. Así, el colectivo comenzó a involucrar a los hombres en conversaciones sobre salud mental, se propone educar sobre los vínculos entre la salud física y emocional y, cuando corresponde, los pone en contacto con los servicios locales de salud mental. Entre otras iniciativas del grupo están la creación de un gimnasio, los grupos de apoyo entre pares, una línea telefónica y los eventos de concientización.
“En 2011 fui víctima de abuso doméstico. Nunca le conté a nadie hasta que Tom me dio fuerza para hablar sobre estas cosas. Intenté suicidarme varias veces, pensaba que era una carga para los que me rodeaban”, cuenta Brandon. Su testimonio se difunde a través de la web del grupo junto a otros tantos que encontraron en el diálogo el primer paso para mejorar su salud mental.
El proyecto primero creció rápidamente en South Devon, el condado en donde se enclava la pequeña localidad de Torquay. Luego se expandió por el Reino Unido y actualmente la red ya tiene sedes en Kenia, Australia y Hawai. En el South Devon College se creó una Academia de Leones donde los estudiantes de peluquería acceden a un entrenamiento especial sobre salud mental.
Chapman se transformó en un líder. Sus discursos, charlas y conferencias trascienden las fronteras del pequeño poblado. “En salud mental se trata de reconocer los signos, hacer preguntas a las personas, escucharlas y ayudarlas a encontrar el apoyo que necesitan”, sostiene.
“El 72 % de las personas que se quitan la vida no ha tenido contacto con los servicios de salud mental en los 12 meses previos”, agrega. En una entrevista con la BBC, el barbero asegura que “los hombres tienen miedo de ser vistos como débiles y por eso no se abren, pero cuando lo hacen, reciben apoyo”.
Torquay Lions Barber Collective es un proyecto sin fines de lucro. Cuando un cliente concurre a una sede de Lions Barbers está apoyando directamente el trabajo de la organización. Una vez que se pagan los salarios a los peluqueros y se cubren los gastos de las peluquerías, todas las ganancias se donan para las campañas de creación de conciencia sobre la prevención del suicidio y las capacitaciones a peluqueros. También es posible apoyar a la red desde su web. Las donaciones pueden ir desde 1 a 30 libras.
Varones que escuchan y acompañan a otros varones en un ámbito en el que se suele propiciar la charla: la peluquería. El modelo parece simple y certero. Así lo expresa esta red en su página web: “Como barberos, estamos en una posición única para ayudar a nuestros clientes, a través de la confianza y el vínculo que construimos con ellos. Una relación increíblemente fuerte en la que los clientes se hacen amigos y pueden compartir aspectos de sus vidas con nosotros”.
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Esta nota forma parte de la plataforma Soluciones para América Latina, una alianza entre INFOBAE y RED/ACCIÓN.