Qué tienen que ver el cambio climático y la disparidad de género: la aplicación que cruza las dos variables

La crisis climática profundiza todas las brechas sociales, incluidas las de género. Aunque es un concepto consensuado entre expertos a nivel mundial, no está popularizado: la acción climática con justicia de género implica que las políticas ambientales tengan en cuenta la disparidad. Gender Climate Tracker es una aplicación multilingüe que brinda estadísticas actualizadas e información sobre acción climática y género, una herramienta colaborativa para quienes trabajan o son activistas en el campo ambiental

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En junio pasado, el tema
En junio pasado, el tema de la igualdad de género estuvo en la agenda de la Conferencia anual de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de Bonn

“Acceder a la información es clave para involucrarse significativamente en el proceso de encontrar soluciones climáticas justas en cuanto a género. Las políticas inclusivas y exitosas requieren datos desglosados por género para identificar las brechas y alejarse de la implementación meramente simbólica de estrategias por parte de los gobiernos”. Así explica qué es la justicia de género en la acción climática Bridget Burns, directora de Women’s Environment & Development Organization (WEDO), la organización sin fines de lucro creadora de la plataforma Gender Climate Tracker (GCT), que se traduce al español como rastreador climático de género.

“Es una herramienta para activistas que han estado trabajando para avanzar en la comprensión de las interrelaciones entre el género y el cambio climático. La implementación de políticas y acciones climáticas sensibles al género es vital para crear un planeta justo, pacífico y saludable”, explica Claudia Rubio Giraldo, abogada, investigadora y activista dominicana-colombiana, del equipo de WEDO.

El concepto “justicia de género
El concepto “justicia de género climática” alude a que las políticas que se adopten frente al cambio climático tengan en cuenta las brechas de género (Imagen: gentileza WEDO)

WEDO se enfoca en la organización de mujeres para conferencias y acciones internacionales. Con base en Nueva York, Estados Unidos, fue establecida en 1991 por la excongresista estadounidense Bella Abzug y la activista feminista y periodista Mim Kelber. Surgió de un grupo de mujeres que habían fundado Women USA en 1979.

Hace más de 25 años que WEDO trabaja en esa dirección, con el seguimiento de la Plataforma de Acción de Beijing, de la Agenda 21 y otras políticas climáticas. En los últimos años, junto a la —ya disuelta— Alianza Global de Género y Clima (GGCA por sus siglas en inglés), recopiló los mandatos de género en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) y se dedicó al seguimiento de las estadísticas de participación de mujeres en juntas, órganos y delegaciones de esta convención.

En 2016 lanzó GCT con la idea de resaltar las disparidades de género claves para que los países tomaran cartas en el asunto y facilitar la implementación de políticas. GCT es un desarrollo de WEDO en asociación con el Ministerio de Relaciones Exteriores de Finlandia y la entonces GGCA, con el acompañamiento del Ministerio de Relaciones Exteriores de Suiza y el apoyo actual del Gobierno de Escocia.

GCT está disponible para iOS y Android, en inglés, francés y español. Brinda acceso fácil a estadísticas actualizadas, políticas e investigaciones clave, todas relacionadas con género y clima. Está dirigida a la comunidad de activistas y profesionales que reconocen los vínculos entre el género y el cambio climático y quieren hacer un seguimiento de las políticas de acción climática. También se propone como herramienta para quienes toman decisiones y participan de las negociaciones. “Por ejemplo, tener fácil acceso a la historia del género en las negociaciones climáticas puede fortalecer las posiciones de quienes trabajan por fortalecer la implementación del Acuerdo de París”, cuenta Rubio Giraldo.

Gender Climate Tracker (rastreador climático
Gender Climate Tracker (rastreador climático de género) es una plataforma y una aplicación que publica estadísticas actualizadas e información relevante sobre, por ejemplo, la participación de mujeres en las delegaciones de las cumbres climáticas (Imagen: gentileza WEDO)

Existe un consenso mundial y mucha literatura sobre cómo el cambio climático profundiza las desigualdades que existen en la sociedad y sobre la importancia de reducir las brechas de género si queremos lograr la mitigación y adaptación al cambio climático y potenciar el éxito de los programas.

“La igualdad de género se alcanza cuando todos los seres humanos, mujeres y hombres, son libres de desarrollar sus habilidades personales y tomar decisiones sin las limitaciones establecidas por estereotipos, roles rígidos de género o prejuicios”, se subraya en la plataforma digital GCT. “Supone que los diferentes comportamientos, aspiraciones y necesidades de las mujeres y los hombres se consideren, valoren y se promuevan de igual manera. Ello no significa que mujeres y hombres deban convertirse en iguales, sino que sus derechos, responsabilidades y oportunidades no dependan de si han nacido hombres o mujeres. La igualdad entre mujeres y hombres se concibe como una cuestión de derechos humanos y una precondición para, e indicador de, el desarrollo sostenible centrado en las personas”.

Todavía existen muchas brechas de género que afectan a las mujeres y niñas en cuanto a niveles de pobreza, la tenencia de la tierra, la alfabetización, la remuneración laboral, el acceso al trabajo, las labores domésticas y de cuidados, la participación en puestos parlamentarios o legislativos, entre otros.

Las desigualdades pueden impedir que las personas discriminadas o marginadas participen en la toma de decisiones cruciales, como por ejemplo, qué inversiones se hacen. También se traducen en que algunas personas se beneficien más que otras con las soluciones climáticas.

Un progreso lento y desigual

La convención sobre cambio climático entró en vigor en 1994 y hoy tiene una membresía casi universal, con 197 países que la ratificaron y se denominan partes en la convención.

Con la implementación del Acuerdo de París en 2015, la comunidad global entró en una fase determinante en la que Gobiernos, funcionarios de las Naciones Unidas y organizaciones de la sociedad civil necesitaban herramientas y apoyo técnico para comprender, rastrear, traducir e intervenir en los procesos de políticas globales.

La igualdad de género estuvo en la agenda de la Conferencia anual de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de Bonn en junio pasado. En la COP25, celebrada en Madrid en diciembre de 2019, ya se había hablado de acelerar un enfoque más sensible al género en la acción climática con medidas como el Plan de Acción de Género (GAP por sus siglas en inglés). En él se establecieron las acciones que los países y la comunidad internacional pueden y deben tomar.

Sobre la base del trabajo GAP, WEDO organizó un evento en Bonn para impulsar iniciativas de promoción del liderazgo de las mujeres en la diplomacia climática.

Desde la organización señalaron que, aunque las iniciativas para mejorar la participación de las mujeres aumentan, el progreso sigue siendo lento y desigual.

La licenciada en Relaciones Internacionales Renata Koch Alvarenga es brasileña y conferencista, miembro de varias iniciativas globales y candidata a máster en Políticas Públicas. Hoy es una voz líder en género y justicia climática mundial. Fundó la iniciativa multilingüe EmpoderaClima, que dirige y desde donde busca generar conciencia sobre el empoderamiento de las mujeres en los espacios de toma de decisiones sobre el tema y abogar por la educación de las niñas para la acción climática.

EmpoderaClima viene visibilizando el lento progreso de la participación real de las mujeres en las delegaciones de los países en las COPs anuales. En este contexto, destaca a WEDO como “el principal actor en el seguimiento de estos datos en las negociaciones mundiales sobre el clima, a través de su iniciativa Gender Climate Tracker”.

Bridget Burns, directora de Women
Bridget Burns, directora de Women Environment & Development Organization (WEDO) y parte del equipo de esta organización que creó la plataforma GCT (Imagen: gentileza WEDO)

En su Reporte 2022 sobre la Participación de las Mujeres en la Convención del Clima, WEDO señala que “a lo largo de los últimos años de negociaciones internacionales sobre cambio climático, junto con el establecimiento de una nueva agenda de desarrollo sostenible, los Gobiernos de todo el mundo han acordado que promover la igualdad de género y proteger los derechos humanos de las mujeres es necesario para cumplir con los objetivos climáticos y de desarrollo globales”.

Las partes de la convención resaltaron la importancia del liderazgo de las mujeres en el diseño de políticas sobre cambio climático, incluido el marco del plan de acción de género (GAP). “Si bien hemos visto muchas iniciativas excelentes para mejorar la participación de las mujeres, desde fondos para viajes hasta redes de mentores, el progreso sigue siendo desigual e inaceptablemente lento”, aclaran desde WEDO.

Por eso, la organización rastrea la participación de mujeres en las delegaciones nacionales ante la convención, comparte estas estadísticas en su sitio web y su aplicación y publica informes periódicos sobre el estado de estas cifras.

El porcentaje de mujeres en todas las delegaciones nacionales aumentó del 30 % para las reuniones en 2009 al 38 % en 2021, apenas 8 puntos en 12 años, a pesar de las actividades y declaraciones para promover la participación igualitaria.

Para las COP, solo el 10 % de los jefes de delegación eran mujeres en 2009 y fueron el 13 % en 2021, con un mínimo de 9 % en 2015 y un máximo de 26 % en 2017. Y de la lectura más detallada de los datos surge que a medida que más altos funcionarios asuman el papel de jefe de delegación, es más probable que sean hombres.

La participación de mujeres tiende a ser más alta en las delegaciones de América Latina, Europa del Este y Europa Occidental, de entre el 45 % y el 50 %, y más baja en África y Asia, de entre el 30 % y el 35 %.

Al ritmo de cambio actual, la paridad de género en las delegaciones de ONU Cambio Climático no se logrará hasta 2040 y específicamente entre jefes de delegación de la COP no se logrará en un futuro previsible.

La aplicación GCT es una
La aplicación GCT es una herramienta colaborativa con información valiosa para activistas y también profesionales e integrantes de las delegaciones negociadoras en las convenciones climáticas (Imagen: gentileza WEDO)

Una herramienta colaborativa

“La aplicación empezó como un recurso informativo y se convirtió en un centro de información relacionada con los mandatos de género dentro de la política climática, la participación de las mujeres en las negociaciones climáticas y el seguimiento del progreso específico de género en cada país”, explica Burns.

Hoy la aplicación y la plataforma permiten que los expertos participen retroalimentando el contenido para fortalecer su nivel de alcance, impacto y apoyo. También, que los participantes y responsables de la toma de decisiones compartan políticas locales y globales y trabajos de planificación sobre políticas climáticas con perspectiva de género e informes de la sociedad civil.

“Creemos que uno de los elementos claves del GCT es la posibilidad de crear información actualizada. Las personas pueden contribuir a la plataforma o ‘convertirse en rastreadoras climáticas de género’ enviando recursos como informes, videos o herramientas de sus contextos locales y nacionales, lo que permite un mejor seguimiento de la implementación de políticas climáticas sensibles al género”, cuenta Rubio.

El impacto del cambio climático
El impacto del cambio climático profundiza las brechas existentes en la sociedad, entre ellas la de género (Imagen: gentileza WEDO)

En cuanto a los desafíos, GCT aspira a rastrear la acción climática con perspectiva de género a nivel mundial, en especial respecto a la implementación de la política climática de la Organización de Naciones Unidas (ONU). Esto implica recopilar recursos a gran escala —que suelen estar en distintos idiomas— mediante la creación de perfiles de cada país en su sitio web, con información adicional relevante para defensores y legisladores.

La plataforma busca más información a nivel nacional: datos e informes sobre los impactos de género del cambio climático, información sobre proyectos de género y clima, análisis de políticas climáticas, y en idiomas que tengan sentido para cada país. Cualquiera puede enviar un recurso en genderclimatetracker.org/become-gct

“La aplicación se descargó más de 5.500 veces y el sitio web tiene más de 7.000 usuarios al año. Tenemos datos comparativos que sugieren que GCT —tanto la aplicación como el sitio web— se usa más en América del Norte, Europa y Asia que en América Latina. ¡Nos encantaría cambiar eso y mejorar el acceso de los usuarios latinoamericanos!”, dice Rubio. “En América Latina se está haciendo un trabajo increíble en cuanto a apreciar los vínculos entre género y clima y promover la justicia climática. Por eso queremos presentar más investigaciones y recursos de la región”.

Gender Climate Tracker no es el lugar recomendado para quienes quieren entender el cruce entre género y cambio climático y se acercan al tema por primera vez. Es una herramienta para quienes investigan, comunican, defienden la causa climática y toman decisiones y necesitan recursos y referencias para mejorar el impacto de su trabajo.

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Esta nota forma parte de la plataforma Soluciones para América Latina, una alianza entre INFOBAE y RED/ACCIÓN.

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