La reina Isabel II ha cancelado el tradicional almuerzo prenavideño que ofrece a numerosos miembros de su familia como medida de precaución, informan este jueves los medios.
La soberana, que permanece en el castillo de Windsor, no recibirá a los familiares, entre ellos primos, al almuerzo que iba a celebrar el próximo martes, después de que el Gobierno estableciera restricciones ante la fuerte propagación de la variante ómicron.
Este evento es al margen del almuerzo que la Reina, de 95 años, celebra con su familia más inmediata el día de Navidad en la residencia de Sandringham, en el este de Inglaterra.
Será la primera Navidad de Isabel II desde la muerte de su marido Felipe, duque de Edimburgo. La monarca ha atravesado algunos problemas de salud a finales de este año, que le han obligado a bajar el ritmo y descansar, además de cancelar varios eventos y reducir su carga laboral por consejo de los médicos.
Entre otras cosas, la Reina canceló su asistencia a la cumbre del clima de la COP26, que tuvo lugar en Glasgow (Escocia) el pasado noviembre, y al acto en recuerdo de los caídos en la I Guerra Mundial que se celebra ese mes en el centro de Londres.
COVID EN EL REINO UNIDO
Las autoridades sanitarias de Reino Unido han confirmado este miércoles un total de 78.610 nuevos contagios de COVID-19, lo que constituye una cifra récord de casos diarios desde que comenzó la pandemia, en el marco de un recrudecimiento de la situación en el país europeo.
Con esta cifra, el acumulado de Reino Unido ha ascendido hasta los 11.010.286 casos, mientras que 146.791 personas han muerto a causa del COVID-19, 165 de estos fallecimientos constatados en las últimas 24 horas. El Ministerio de Salud británico constató el anterior récord de casos el 8 de enero, un total de 68.053.
Mientras, las autoridades sanitarias han confirmado otros 4.671 casos de la variante ómicron del coronavirus, que han elevado el total de esta variante hasta los 10.017. No obstante, las autoridades creen que los contagios de esta variante son muchos más.
En este sentido, la Agencia de Seguridad Sanitaria de Reino Unido ha alertado durante la jornada de que la variante ómicron es “probablemente” la “amenaza más significativa” desde que comenzó la pandemia, según ha recogido la BBC.
El Gobierno de Reino Unido se ha visto obligado a reimponer ciertas restricciones ante el incremento de contagios y las preocupaciones que plantea la variante ómicron del SARS-CoV-2. Impuso la vuelta del teletrabajo o la obligatoriedad del certificado de vacunación para acceder a ciertas instalaciones, medidas previstas en lo que la Administración de Johnson llama su ‘Plan B’, que presentó en septiembre por si la situación empeoraba.
(con información de EFE)
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