Meghan Markle y el príncipe Harry hicieron una visita secreta a una organización benéfica de Los Ángeles. Los duques de Sussex, que viven en la mansión de USD 18 millones del magnate estadounidense Tyler Perry, han estado ayudando a varias organizaciones locales desde su llegada al país a principios de marzo.
La pareja real pasó el martes por la tarde en Homeboy Industries, una ONG con sede en California que trabaja para mejorar la vida de jóvenes con un pasado delictivo. La entidad está dirigida por el padre Greg Boyle, con quien el duque y la duquesa han estado hablando sobre el movimiento de justicia racial.
La ex actriz, nacida en Los Ángeles, ha estado conectada durante mucho tiempo con el trabajo de la organización a cargo del padre Boyle. Tanto ella como su madre, Doria Ragland, participaron en un taller de cocina hace casi 20 hace atrás.
Mariana Enríquez, gerente del Homegirl Café, afirmó: “Harry y Meghan tienen los pies en la tierra y son amables. El personal se sintió honrado porque se tomaron el tiempo de escucharlos. Nunca lo olvidaremos”.
“El duque y la duquesa de Sussex fueron simplemente Harry y Meghan. Se arremangaron y se comprometieron profundamente con nuestros trabajadores”, añadió el padre Greg en diálogo con el sitio estadounidense Page Six.
La organización caritativa publicó una serie de fotografías de la visita del matrimonio real en su cuenta de Instagram. “Gracias a Harry y Meghan, el duque y la duquesa de Sussex, por visitarnos y apoyarnos en nuestros equipos de café y panadería”.
Homeboy Industries ofrece asesoramiento, asistencia legal y oportunidades directas de empleo a través de 10 orgnizaciones sociales, incluidas Homeboy Bakery y Homegirl Café. Con el programa Feed HOPE, que da a trabajo a adictos en recuperación, proporcionan viandas a familias vulnerables que han sido afectadas por la pandemia de COVID-19.
Tras su llegada a los Estados Unidos después de su renuncia a la familia real británica en el mes de enero, la pareja real entregó comidas para Project Angel Food, una organización sin fines de lucro que prepara y entrega alimentos a personas con enfermedades crónicas que no pueden salir de sus casas durante la cuarentena.
A pesar de que Meghan y su esposo Harry esperaban pasar desapercibidos, fueron reconocidos por uno de los hombres a los que le entregaron comida, John Tyrell, quien habló con los medios locales y entregó las imágenes de la cámaras de seguridad.
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