El gabinete ministerial liderado por el premier Alberto Otárola consiguió la noche del martes 10 de enero el voto de confianza de parte del Pleno del Congreso, luego de cinco horas de debate, donde expuso junto a sus ministros los principales lineamientos de su gestión.
La otorgamiento de la investidura al gabinete Otárola se dio con 73 votos a favor, 43 en contra y seis abstenciones, en medio de un delicado contexto debido a las protestas sociales y ola de violencia en Puno que en un solo día dejó al menos 18 fallecidos y más de 70 heridos.
El primer ministro consiguió el respaldo para el voto de confianza gracias a las bancadas de Fuerza Popular, Acción Popular, Alianza para el Progreso (APP), Renovación Popular, Avanza País, Somos Perú y algunos congresistas no agrupados.
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Votaron en contra principalmente las bancadas de izquierda. Antes, el presidente del Congreso, José Williams, precisó que se requería mayoría simple (mitad más uno) de los 123 legisladores asistentes.
“¿Quiere sangre?”
El congresista Wilson Quispe, de Perú Libre, se realizó daño en el antebrazo, pero ya presentaba un parche, y con lo que sería su sangre se manchó su camisa. El legislador realizó este acto como medida de protesta de los fallecidos que dejó la jornada del 9 de enero, en Juliaca, según sus declaraciones.
Este episodio se llevó a cabo durante su intervención en el Pleno del Congreso, donde se debatió la cuestión de confianza al gabinete ministerial. En este sentido, se encontraba presente el premier Otárola y los diferentes ministros de Estado.
“¿Quiere sangre, señor Otárola? Aquí está la sangre. Esa sangre es lo que usted ha querido a través de la Mesa Directiva y es la que está regada en la región de Puno, Ayacucho, Apurímac y Andahuaylas”, indicó Quispe.
“¿Cuántas jóvenes, niños, adolescentes, madres, viudas y huérfanos, usted ha matado? Lo reto a usted que quiere resolver el problema del país. Usted quiere solucionar el problema de la región de Puno, vamos, vayamos con usted”, continúo el legislador.
“Asesino”
Con la conformación de las carteras ministeriales, quedaba pendiente el voto de confianza que el Congreso finalmente le otorgó. La cita se convocó para este martes 10 de diciembre, en el que se presentarían las autoridades lideradas por el premier Alberto Otárola.
Al llegar a las instalaciones del parlamento, estos fueron recibidos por representantes de las bancadas de izquierda, quienes se ubicaron con carteles en los que indicaban que eran unos asesinos, acusándolos de ser los responsables de las muertes durante las protestas en Perú.
Esta bienvenida no duró un par de segundos. Al ingresar al hemiciclo, continuaron los gritos y reclamos al gabinete Otárola. Frente a sus ubicaciones, colocaron fotos de algunos fallecidos y recorrieron las instalaciones llevando en sus manos mensajes como “gabinete asesino”, “Dina renuncia ya”, “asesinos, fuera”, “alto a la militarización”, “gabinete de la muerte”, entre otros.
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