Raúl Alfaro, comandante general de la Policía Nacional (PNP), evitó replicar este martes a las consultas de los medios sobre la represión en Puno, donde se registraron 18 muertes en una jornada sangrienta y ataques como el que sufrió el fotoperiodista Aldair Mejía, quien recibió un perdigón disparado por la Policía.
Pese a los registros, Alfaro indicó que la institución es víctima una campaña de desinformación. “Estamos asistiendo a una campaña donde se está difundiendo información absolutamente falsa, se cuelgan videos que no corresponden a la época ni al lugar para generar alarma y para desprestigiar a la Policía”, señaló.
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Según Zuliana Lainez, presidenta de la Asociación Nacional de Periodistas del Perú (ANP), hasta ahora se han reportado nueve ataques a periodistas que cubrían las manifestaciones en Juliaca, de los cuales el 78% ha sido por responsabilidad de la PNP y FF. AA.
Días atrás, ciudadanos captaron a un grupo de efectivos causando destrozos a una moto torito que estaba estacionada en una avenida, sin la presencia de su propietario.
Los policías, aparentemente en su labor de disuadir a los manifestantes, atacaron al vehículo: primero lo tumbaron, luego tiraron la puerta hasta dejarla completamente dañada. Alfaro desconoció el clip difundido en redes sociales y aseguró los uniformados “no están participando de saqueos ni de acciones que tengan alguna implicancia penal”.
Consultado sobre las víctimas mortales de la última jornada, que tenían en el cuerpo impactos de proyectil, apuntó que la institución “ha dado muestras de haber cumplido escrupulosamente lo que manda la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)”.
“Hasta hace poco éramos el único país que tiene una ley, un reglamento, una directiva y un manual de derechos humanos aplicados a la función policial”, añadió.
ONU pide respetar derechos humanos
El sistema de Naciones Unidas instó al gobierno de Dina Boluarte a respetar los derechos humanos y evitar el uso desproporcionado de la fuerza para reprimir las protestas.
“Exhortamos a las autoridades y fuerzas de seguridad a tomar urgentemente medidas para asegurar el respeto a los derechos humanos, incluyendo el derecho a la manifestación pacífica”, señalaron las agencias, fondos y programas de la ONU en Perú en un comunicado conjunto.
La ONU llamó además al gobierno “a observar los estándares y normas aplicables al uso de armas contra los manifestantes; y a facilitar una solución pacífica y dialogada a la crisis”.
La exhortación está dirigida también a las diversas organizaciones detrás de las protestas, a las que pidieron “abstenerse de actos de violencia y ejercer el derecho a la protesta de manera pacífica, respetando la vida y la propiedad pública y privada”.
“Estamos muy preocupados por el aumento de la violencia en Perú, que el lunes 9 de enero vivió uno de los días más mortíferos desde que comenzaron los disturbios a principios de diciembre”, declaró en Ginebra la portavoz del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Marta Hurtado.
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